Puigdemont no convocará elecciones anticipadas en Cataluña
El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha anunciado desde el Palau que no convocará elecciones anticipadas en Cataluña como respuesta a la aplicación del artículo 155. La comparecencia tiene lugar poco después de que Puigdemont haya presentado al Senado las alegaciones a la aplicación del artículo 155 y horas antes de que se celebre en el Parlamento catalán un pleno para analizar la situación política. El Senado debe ratificar este viernes las medidas aprobadas el pasado sábado por el Consejo de Ministros.
El president de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha anunciado desde el Palau que no convocará elecciones anticipadas en Cataluña como respuesta a la aplicación del artículo 155 al considerar que «no hay ninguna garantía que justifique la convocatoria de unas elecciones». El president si que ha asegurado que ahora corresponde al Parlament «decidir la respuesta a la aplicación del 155». La comparecencia ha tenido lugar poco después de que Puigdemont haya presentado al Senado las alegaciones a la aplicación del artículo 155 . El Senado debe ratificar este viernes las medidas aprobadas el pasado sábado por el Consejo de Ministros. «Mi deber es agotar todas las vías para encontrar una solución dialogada y pactada para evitar la aplicación del artículo 155», ha asegurado el president. «No acepto las medida del articulo 115 por injustas», ha remarcado.
«Nadie tiene derecho a reprochar a la parte catalana el esfuerzo que ha hecho para llegar a un acuerdo», ha dicho Puigdemont.»El compromiso con la paz y el civismo deben mantenerse, sólo de esta manera podemos seguir ganando», ha sentenciado.
▶️ Declaració íntegra del #president @KRLS: “Correspon al @parlament_cat procedir sobre l’aplicació contra Catalunya de l’article 155” pic.twitter.com/bCBhIDJR2A
— Govern. Generalitat (@govern) 26 de octubre de 2017
Por su parte el Gabinete catalán ha presentado este jueves ante el Tribunal Supremo dos recursos que piden, mediante la adopción de medidas cautelares urgentes, la suspensión provisional del acuerdo del Gobierno de Mariano Rajoy para asumir competencias de esa autonomía. La petición de medidas cautelares supone que la Sala de lo Contencioso Administrativo del Supremo haya de resolver sobre la paralización provisional o no del acuerdo del Gobierno de Mariano Rajoy en un plazo menor de 48 horas.
La Bolsa española ha reaccionado con una subida de casi el 2% tras divulgarse la intención de Puigdemont de convocar elecciones anticipadas.
Las medidas concretas con las que se pondrá en marcha el artículo 155, si el Senado las aprueba este viernes, son:
- La facultad de disolver el Parlamento de Cataluña pasa al presidente del Gobierno. Se convocarán elecciones en un plazo máximo de seis meses. Rajoy ha dicho que su voluntad “es hacerlo tan pronto como se recupere la normalidad”.
- Se pide autorización al Senado para proceder al cese del presidente, Carles Puigdemont, del vicepresidente y de los consejeros del gobierno catalán. El ejercicio de dichas funciones la asumirán los ministerios correspondientes durante el tiempo que dure esta situación excepcional.
- El Parlament no se disolverá. Seguirá cumpliendo su función representativa. No obstante, el Parlament no podrá proponer candidato a la presidencia de la Generalitat, ni plantear plenos de investidura. Tampoco llevar a cabo iniciativas que sean contrarias a la Constitución o al Estatut. El Gobierno tendrá un plazo de 30 días para vetar estas iniciativas.
- La Generalitat continuará funcionando y seguirá siendo la administración ordinaria de la Comunidad Autónoma. Esta administración actuará bajo las directrices de los órganos designados por el Gobierno de la nación.
- El Gobierno asumirá el mando de la Policía regional (Mossos d’Esquadra) y también podrá cesar o nombrar a los responsables de los medios audiovisuales públicos (TV3 y Catalunya Ràdio) para garantizar una información veraz y respetuosa con el pluralismo político. El Colegio de Periodistas de Cataluña, ha condenado esta medida y la ha calificado de “un ataque a la libertad de expresión”.
- El Gobierno asume la totalidad de ingresos y gastos de la autonomía catalana, de modo que se garantice que no irá partida alguna al proceso secesionista.
- La vigencia de todas estas medidas se mantendrá hasta la toma de posesión del nuevo Gabinete catalán, tras las elecciones autonómicas.