El teniente que investigó el 1-O asegura que después del 20S se vivió "un periodo insurreccional"

El teniente de la Guardia Civil que dirigió la investigación policial sobre la preparación del referéndum de autodeterminación del 1-O ha afirmado que a partir del 19 y 20 de septiembre de 2017 se vivió un “periodo insurreccional” y Cataluña se convirtió “en un polvorín”.

El teniente, que estuvo al frente de la investigación dirigida por el juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona por los preparativos del referéndum, ha explicado durante su declaración en el juicio del procés que hubo tres periodos de tiempo claramente diferenciados en Cataluña.

El primero fue antes del 19 y 20 de septiembre, cuando las concentraciones contra las fuerzas de seguridad eran puntuales y con un tono de protesta.

Después llegó lo que ha definido como “un periodo insurreccional”, que se produjo entre el 19 y 20 de septiembre y el 27 de octubre, cuando se aplicó en Cataluña el artículo 155 de la Constitución.

Por último, a partir de esa fecha, las protestas cesaron. A partir de ese día, hubo otro «cambio radical». «No hay concentraciones, ya no hay ningún tipo de incidente» porque, por un lado, ya no había llamadas a la movilización y, por otro, los Mossos d’Esquadra hicieron «dispositivos de seguridad muy eficaces» como los que montaron cuando se registraron las sedes de ANC y Òmnium, ha explicado el teniente.

Durante este “periodo insurreccional”, hubo un “cambio radical” en la actitud de la ciudadanía en Cataluña y fue cuando se produjeron la mayoría de “asedios” y “escraches” a la Guardia Civil y la Policía Nacional.

En concreto, de las 88 acciones contra la Guardia Civil, se produjeron dos antes del 19 y 20 de septiembre, 84 en el «periodo insurreccional» y dos a raíz de la aplicación del artículo 155.

Durante la explicación del teniente, dos de los abogados de las defensas se han quejado al tribunal de la insistencia en calificar de esa manera los días comprendidos entre el 20 de septiembre y el 27 de octubre.

«Es una expresión llena de valoración personal, pero en la medida que la sala no se va a sentir vinculada por las valoraciones que haga el testigo para describir la realidad que él percibió, que sea más acertado o no… Él está valorando lo que vio de esta forma», ha respondido el magistrado Manuel Marchena.

Sobre el referéndum del 1-O, el teniente ha explicado que su análisis mostró que todas las acciones conducían a su celebración, pues era “la piedra angular sobre la que pivotaba todo un proceso”.

“El referéndum no era el objeto en sí”, sino que era “la condición sine qua non para la declaración unilateral de independencia o para poner el Estado en una situación de conflicto”, ha dicho en respuesta a las preguntas de la fiscal Consuelo Madrigal. “Esto tenía que suceder sí o sí”, ha añadido, informa Efe.