Trump culpa a las bombillas de su color de piel anaranjado
Para el presidente estadounidense las bombillas de bajo consumo gastan mucho más y son un desecho peligroso
El color de piel de Donald Trump ha sido motivo de discusión y de burla desde que en 2016 se convirtiera en protagonista indiscutible de la política internacional. Ahora, tres años más tarde, ha decidido dar una explicación. El presidente norteamericano ha culpado de su tono anaranjado de piel a las bombillas de bajo consumo.
En una conferencia ante legisladores republicanos en Baltimore el jueves por la noche, Trump pronunció un discurso en el que abordó las críticas a sus recientes planes para debilitar las regulaciones sobre las bombillas ecológicas.
“Las bombillas”, comenzaba así la intervención del presidente. “La gente dice ¿qué pasa con las bombillas? Y esta es la historia. Las bombillas que nos están obligando a utilizar… En primer lugar y lo más importante para mí, la luz no es buena, siempre me veo naranja”, confesaba Trump ante su partido, mientras este se reía. “¡Y vosotros también!”, sentenciaba.
Pero este no fue el final. Trump se quejó de que las bombillas de bajo consumo energético gastan mucho más que su predecesoras incandescentes, aunque no aportó ningún dato para respaldar su opinión, y afirmó que deben tratarse como un «desecho peligroso» si se rompen.
Sin embargo, las bombillas de bajo consumo, como las incandescentes halógenas, las lámparas fluorescentes y las luces LED suelen utilizar entre un 25% y un 80% menos de energía que las tradicionales, y pueden durar hasta 25 veces más.
“¿Qué estamos haciendo? Se considera un desecho peligroso, es mucho más caro y, francamente, la luz no es tan buena”, ha exclamado. “Las vamos a seguir vendiendo, pero también vamos a seguir vendiendo bombillas incandescentes. La gente está muy feliz por eso. Es asombroso», concluyó.
