Podemos aprovecha el giro a la izquierda de CCOO para infiltrarse en su cúpula

El peligro al topo se hace fuerte en Comisiones Obreras (CCOO). La central sindical que lidera Unai Sordo modificó hace algo más de un mes a su Ejecutiva, y entre los nombramientos más sonados se halla el de Carolina Vidal como nueva secretaria Confederal de Mujeres, Igualdad y Condiciones de Trabajo. Vidal es esposa del secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, quien ejerce de principal portavoz de Yolanda Díaz. Fuentes de Unidas Podemos recuerdan que ambos provienen de la rama sindical de Castilla-La Mancha, y que son un enlace directo con la cúpula de Comisiones. La cuestión cobra mayor relevancia de cara a posibles posiciones del sindicato ante el Gobierno.

Sordo quiso incluir en el último congreso a Vidal en la cúpula de la central. Pero esta decisión se está convirtiendo en polémica, porque, tal y como ha podido saber este diario, su vínculo con el ministerio de Yolanda Díaz ofrece al grupo de Unidas Podemos de influir directamente en las decisiones sindicales, pero sobro todo puede servir para tener información sensible sobre los debates internos y las estrategias del sindicato.

Pérez Rey, el marido de Vidal, está estrechamente vinculado a Díaz. Él es quien habla en nombre de la ministra en todas las negociaciones sobre empleo, y es quien se encarga de tejer los pactos con las partes sociales, al igual que Josep Vendrell y Rodrigo Amírola preparan el discurso y la estrategia política de la ministra. En Podemos consideran a Pérez Rey como un dirigente y profesor universitario de la órbita morada.

Cercanía al primer Podemos

Pérez Rey trabajó para Podemos como asesor del partido en la primera etapa del partido morado. Cuando en 2019 Pablo Iglesias negociaba con Pedro Sánchez para obtener el ministerio de Trabajo, es el secretario general de Podemos quien hace el nombre tanto de Yolanda Díaz como de Pérez Rey. En la formación morada se le apoda como uno de los «duros» en los asuntos laborales.

Como Pérez Rey, también Carolina Vidal goza del apoyo directo de los morados. «No es de la primera hora, pero sí ha dado un giro al igual que ha hecho el sindicato en los últimos tiempos», explican fuentes de Unidas Podemos. En el caso de Madrid, la victoria en el último congreso de Paloma López responde a esta dinámica. «Las dos se han unido a Unidas Podemos por conveniencia», afirman fuentes tanto sindicales como del partido morado. López, de hecho, formó parte de un grupo que en un primer momento sufrió la embestida de los morados, hasta perder relevancia interna. Pero después se unió a ellos.

Vidal tiene una historia parecida: «Se ha reubicado ahí para seguir viviendo del sindicato», comentan las fuentes consultadas. También a nivel sindical se comenta que «Podemos tiene sentado en la ejecutiva de Comisiones a una de los suyos». Algunos apuntan a que Vidal, que es de familia de afiliados al sindicato, no forma parte del grupo con más poderes e influencia, aunque recalcan: «No deja de estar en la Ejecutiva».

Posible señalamiento

Para las fuentes consultadas, este giro de CCOO se debe a la necesidad estratégica de acercarse a una formación que se halla en el Gobierno. Sobre todo con el área de afines de Yolanda Díaz, aunque también existen contactos directos con la cúpula morada. En el caso de UGT, en cambio, intentan mantener los vínculos con el PSOE, si bien el secretario Pepe Álvarez ha entregado a un responsable afín a ERC la sección catalana, con el objetivo de estar cerca de la Generalitat para intentar paliar los problemas económicos y la falta de inscritos.

La afinidad de CCOO con Unidas Podemos se ha fortalecido también por el papel desempeñado por Yolanda Díaz. La ministra gallega es hija de un histórico dirigente de Comisiones, y ahora está contando con el apoyo directo de Unai Sordo para la construcción de una plataforma política que supere a la etapa de Pablo Iglesias. Oficialmente, Sordo intenta mantenerse equidistante, pero en el entorno de Díaz admiten que su apoyo es esencial para la creación de un núcleo duro de afines que cuenten con el respaldo de la principal central sindical y permita arrancar al «proyecto».

Ahora, Díaz y algunos sectores de Unidas Podemos pueden gozar de un vínculo directo en la cúpula de CCOO. Para algunos es una manera para blindar esta alianza, aunque todo tiene que quedar en la confidencialidad. Si bien el temor a chivatazos es un hecho, puesto que cada miembro de la ejecutiva puede ser señalado de cara a la contraparte política. Máxime si la cúpula de Comisiones debate asuntos como huelgas o movilizaciones contra el Gobierno, tal y como el propio Sordo ha comentado el pasado miércoles para presionar a Pedro Sánchez en la reforma laboral. «En cuanto salga de una reunión, Carolina puede llamar a su marido que trabaja con Yolanda y explicar el contenido de las conversaciones», explican las fuentes consultadas.