'Escuela de Todos' pedirá la ejecución de la sentencia del 25% si el Govern no lo hace

Escuela de Todos, la plataforma que engloba a las principales entidades del constitucionalismo catalán, insta al Gobierno de la Generalitat a dictar «inmediatamente las instrucciones para hacer eficaz el modelo de conjunción lingüística en la escuela catalana» y les advierte de que, en caso contrario, «se personará en el TSJC para solicitar la ejecución de la sentencia».

Este viernes ha sido comunicada formalmente a la Generalitat la firmeza de la sentencia de Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de 16 de diciembre de 2020 que establece la obligación de que al menos un 25% de la docencia se imparta en castellano y en catalán a todos los alumnos del sistema educativo de Cataluña.

Tal y como establece la Ley de la Jurisdicción Contencioso Administrativa, la Generalitat tiene diez días para indicar el órgano responsable del cumplimiento de esta y llevarla a efecto. Según la plataforma, «un mínimo respeto a los principios del Estado de Derecho conduciría a la Generalitat a acatar sin más dilación la mencionada sentencia y no profundizar en el clima de crispación y enfrentamiento que intenta generar entre los catalanes al rechazar una obligación tan básica para los poderes públicos como es la de ajustar su comportamiento a la ley y a las decisiones de los tribunales».

De momento, sin embargo, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se ha posicionado en sentido contrario: «El catalán no se toca y la escuela catalana tampoco. Basta de ataques a la lengua, a la enseñanza y al país entero. No permitiremos que se ponga en riesgo la cohesión social. Estamos trabajando en el despliegue normativo para rehacer el modelo de escuela catalana. Basta de politizar la educación», afirmaba en Twitter.

Escuela de Todo critica esta referencia a la «cohesión social» para justificar la desobediencia a las resoluciones judiciales». En este sentido, en el comunicado enviado instaban al Govern a ser claros en su propósito: «La Generalitat debe informar al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y a la sociedad en general de las instrucciones que va a dar para hacer eficaz el modelo de conjunción lingüística en todo el sistema educativo catalán».

«No existe razón alguna que pueda justificar el incumplimiento de la sentencia por lo que invitamos a la Generalitat de Cataluña a que asuma la nueva realidad jurídica y cambie el sistema educativo catalán para adaptarlo a la Constitución y al ordenamiento jurídico», abundan en su segundo punto.

En caso de que la Generalitat no dé cumplimiento voluntario a la sentencia, advierten de que utilizarán «todos los medios a nuestro alcance para hacerlo posible, lo que incluye la presentación de un incidente de ejecución, al amparo de lo dispuesto en el artículo 109 de la Ley de la Jurisdicción Contencioso Administrativa».

Avanzan, además, que en el incidente pediremos al Tribunal que determine el órgano u órganos que han de responsabilizarse de realizar las actuaciones que hagan posible aplicar el modelo de conjunción lingüística en el sistema educativo catalán; que fije el plazo en que se debe adaptar el sistema educativo al nuevo modelo; y la concreción de los medios para llevarlo a efecto».

Gobierno de España

A este respecto apelan «al Gobierno de España» ya que, como parte implicada, «tiene obligación de garantizar la enseñanza en castellano en todo el sistema educativo español y eso incluye también a Cataluña, por lo que debe velar desde la posición privilegiada y relevante que tiene en el procedimiento judicial para que la Generalitat ejecute la sentencia que reconoce un mínimo de 25% de clases en castellano a fin de garantizar los derechos lingüísticos de todos los alumnos catalanes».

Con todo, se muestran optimistas de que «la sociedad española y la catalana en particular están reaccionando con responsabilidad y mostrando de manera clara su voluntad de no dejar pasar esta ocasión para poner fin a la apropiación nacionalista de las aulas». Por esta razón, piden que todos los actores políticos se comprometan en asumir el cambio inexorable que se va a producir en el modelo lingüístico en las aulas catalanas».