El Rambo de Requena se sienta en el banquillo con peticiones de penas de entre 29 y 61 años de prisión
El Rambo de Requena protagonizó una fuga de varios meses en 2020, desde Requena hasta las sierras turolenses, en la que hirió a dos guardias civiles que le perseguían
La Audiencia de Teruel juzga hoy y mañana a Pedro Lozano Giménez, conocido como el Rambo de Requena por la fuga de varios meses que protagonizó en 2020, desde Requena hasta las sierras turolenses, y en la que hirió a dos guardias civiles que le perseguían, a uno de ellos de gravedad.
La fiscalía y la acusación en nombre de la Asociación Unificada de Guardias Civiles pide penas que suman 29 años de prisión por presuntos delitos de tentativa de homicidio, continuado de robo en vivienda habitada, sustracción de vehículo, coacciones y tenencia ilícita de armas.
Por su parte, el abogado de los dos guardias civiles tiroteados eleva la petición de condena a 61 años al calificar los hechos como dos presuntos delitos de tentativa de asesinato, lesiones graves, atentado contra agentes de la autoridad, robo en casa habitada, robo de vehículo, conducción temeraria, tenencia ilícita de armas y coacciones graves.
A esta causa, se suman también otras instruidas en los juzgados valencianos por delitos contra el patrimonio, que comenzaron en febrero de 2020 con la ocupación de una vivienda ilegal en la pedanía de Requena denominada Los Cojos. Y en esa comunidad comenzó la búsqueda, para la que llegaron a movilizarse en el mes de mayo hasta 30 agentes, con drones y un helicóptero, además de solicitar la colaboración ciudadana.
La presencia en la provincia de Teruel del Rambo de Requena, de 30 años, fue detectada ya en junio, tras su huida por zonas boscosas y de campo.
El 8 de junio de 2020 robó una carabina y un coche en la población turolense de El Castelar y se desplazó en el vehículo robado a Muniesa, donde fue arrinconado en un callejón desde el que se enfrentó a los dos agentes que le perseguían, uno de los cuales resultó herido de gravedad en un brazo y el abdomen.
Huyó del lugar en un coche que tenía las llaves puestas y continuó su fuga hasta Andorra, donde chocó con un muro, se introdujo en un vehículo en marcha y amenazó al conductor para que condujera en dirección a Albalate del Arzobispo.
Después, se apeó del coche y huyó hacia una zona agreste donde, tras enfrentarse a los agentes que le perseguían, recibió un disparo mientras trataba de ocultarse en unos arbustos.
La vista se celebrará durante dos días y ante el tribunal comparecerán para declarar más de treinta testigos y peritos.