Los tribunales obligan a Almeida a restituir la placa de Largo Caballero en Madrid
Un juzgado de lo Contencioso-Administrativo exige recuperar el nombre de las calles dedicadas a los dirigentes socialistas retiradas a propuesta de Vox
Placa de Largo Caballero en Madrid. | Eduardo Parra (Europa Press)
Francisco Largo Caballero e Indalecio Prieto volverán a tener una calle en Madrid. El juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 30 de la capital obliga al Ayuntamiento presidido por José Luis Martínez-Almeida a recuperar los nombres de los dirigentes socialistas que retiró a finales de 2020 a propuesta de Vox. La resolución también insta al Consistorio a restituir una placa con el rostro del responsable de UGT y presidente del Consejo de Ministros durante la Segunda República. Unos operarios la destruyeron a martillazos. El Consistorio puede recurrir la resolución, aunque los responsables municipales no se han pronunciado por el momento.
Todo comenzó el 29 septiembre de 2020, cuando Vox presentó una moción para retirar las calles de ambos dirigentes socialistas. La propuesta contó con el beneplácito de PP y Ciudadanos, que votaron a favor. Los partidos fundamentaron su decisión en el artículo 15 de la ley de Memoria Histórica, aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero en 2007. Una normativa que no se aplica, denuncian las organizaciones memorialísticas, para eliminar otras nomenclaturas del callejero, como la calle que homenajea al Crucero Baleares, que bombardeó a la población civil que huía por la carretera de Almería en plena Guerra Civil.
Almeida y la memoria histórica
El Grupo Mixto, autodenominado Recupera Madrid, acusó a los de Santiago Abascal de «manipular» la propuesta. Además, denunció que PP y Ciudadanos formaran parte de «una actuación intolerable». El secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, celebró en Twitter la retirada de la placa en memoria del dirigente socialista, de cuyo nacimiento se cumplían 151 años. El portavoz de la formación verde en el Ayuntamiento incluso compartió en sus redes un vídeo en el que aparecían varios operarios municipales golpeando la esfinge de Largo Caballero, al que tildó de «Lenin español». Días más tarde, la escultura del político situada en Nuevos Ministerios fue vandalizada.
La oposición calificó la retirada de «ilegal». Recupera Madrid denunció el destrozo de la placa ante la fiscalía y UGT recurrió la decisión en los tribunales. En opinión del sindicato, el Consistorio «no solo atenta contra el patrimonio histórico y cultural de la ciudad, sino que instiga las actuaciones de vándalos de ultraderecha para que pinten y destrocen las esculturas de ambos dirigentes. La sentencia, a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, obliga a reponer la placa de Largo Caballero, que tendrá que ser reconstruida, en la plaza de Chamberí, 4, sede de la Junta Municipal, y devolver los nombres de los dirigentes socialistas a los espacios públicos.
La placa fue colocada en la casa natal de Largo Caballero en abril de 1981 tras su aprobación por unanimidad en el Pleno. La propuesta la realizó Carlos Alonso de Velasco, concejal de UCD. La escultura fue confeccionada por Pepe Noja, que también es el autor de la estatua ubicada en Nuevos Ministerios, e incluía una leyenda: «A Largo Caballero, testimonio vivo de honestidad y entrega al servicio de los trabajadores».
Unas actitudes que ha subrayado este miércoles el concejal Ramón Silva, del PSOE, tras conocer la sentencia. El edil se ha felicitado por la resolución, con la que considera probado «lo que siempre ha defendido el Grupo Municipal Socialista: que la placa de Largo Caballero estaba protegida, por lo que nunca debió arrancarse a martillazos sin ningún procedimiento administrativo».
La calle de Millán Astray
Silva ha exigido a Almeida que no recurra la sentencia «de la misma manera que no recurrió la restitución de las calles franquistas en su momento porque le gustaron más los nombres de la dictadura que los acordados en el Pleno». En julio del año pasado, una resolución del Tribunal Superior de Justicia de Madrid obligó al Consistorio a restituir el nombre de siete vestigios que el Gobierno de Manuela Carmena concluyó que contenían nomenclatura franquista, entre ellas la calle del general José Millán Astray. El alcalde no pleiteó y se apresuró a enmendar la decisión del gobierno que le precedió.
La magistrada también condena al Ayuntamiento a pagar los costes procesales porque «faltó en su tramitación un preceptivo dictamen de la Comisión Institucional para la Protección del Patrimonio Histórico, Artístico y Nacional». La sentencia no es firme, por lo que el Consistorio cuenta con 15 días desde la fecha de notificación para presentar alegaciones. Luis Cueto, concejal de Recupera Madrid, ha calificado este miércoles la sentencia como «extraordinaria noticia por lo simbólico que tiene».
Cueto sostiene que quitar los nombres de las calles de los dos dirigentes socialistas y retirar la placa de Largo Caballero «no solo es una disparidad de opiniones sobre la memoria histórica, sino que se trata de una actuación agresiva e iconoclasta». El edil dice esperar que el Ayuntamiento no recurra la sentencia, aunque este aún no se ha pronunciado al respecto.
