Podemos ve la mano de La Moncloa en la agenda internacional de Díaz en EEUU
La ministra de Trabajo Yolanda Díaz aprovecha el viaje institucional a Washington para impulsar su proyecto Sumar que aspira a sustituir a Podemos
La vicepresidenta del Gobierno, Yolanda Díaz, ha aprovechado el viaje institucional a Estados Unidos para impulsar su proyecto personal, Sumar. La ministra de Trabajo se ha reunido, entre otros, con el izquierdista Bernie Sanders, con quien ha hablado de enlazar -o «coser», según el diccionario empleado recientemente por la gallega- una «alianza internacional». Podemos cree que La Moncloa está ayudando a la dirigente para afianzar su agenda internacional, ofreciendo una colaboración mucho más intensa que con la ministra de Igualdad, Irene Montero.
Díaz se despidió de España después de una serie de encuentros durante la escuela de verano de Podemos y la Complutense. En dichas reuniones, Díaz ha reivindicado su proyecto, a la vez que miembros destacados del partido morado como Juan Carlos Monedero, ya diferencian las dos iniciativas. En los cursos de la Complutense, Díaz ha podido conocer a la pensadora belga Chantal Mouffe, considerada una de las inspiradoras del enfoque transversal por el que en su día abogó Íñigo Errejón, y que ahora defiende la política gallega.
Después de esos encuentros, Díaz ha viajado a Estados Unidos. Ha evitado el Falcon, tal y como hizo Montero y que desembocó en una feroz polémica de la oposición. Aunque Díaz viajó en Falcon en el pasado mes de diciembre cuando llegó a Roma para citarse con el Papa, todo apunta a que esta vez ella y su séquito (entre ellos el secretario de Estado Joaquín Pérez Rey) han empleado un vuelo comercial.
Encuentro con Sanders
Durante su estancia en Estados Unidos, Díaz se ha reunido con el senador Bernie Sanders, excandidato a la Casa Blanca y considerado uno de los referentes de la izquierda de ese país. «En momentos de incertidumbre global y crisis climática, las alianzas progresistas son más necesarias que nunca. Acordamos realizar un nuevo encuentro para seguir ensanchando la democracia y protegiendo los derechos humanos», ha lanzado Díaz en las redes sociales.
También se ha citado con el exalcalde de Boston y Secretario de Trabajo de los Estados Unidos de la administración de Joe Biden, Marty Walsh. En este caso, la dirigente ha difundido fotos del encuentro institucional acompañadas por el mensaje: «Reforzamos las relaciones bilaterales en materia sociolaboral para construir, de manera conjunta, el futuro del mundo del trabajo». Después, ha participado a una rueda de prensa en la que ha hablado de la coalición de Gobierno en España y también de su proyecto Sumar, la oposición al Gobierno y los últimos sondeos del CIS.
Los encuentros de la ministra han sido de mayor envergadura que los del viaje a Estados Unidos de Irene Montero. Díaz ha hablado con asociaciones y empresas españolas que trabajan en Washington, y con el cuerpo diplomático de estancia en la capital de Estados Unidos. También ha hablado con el senador Ben Ray Luján, nombrado por el Estado de Nuevo México, y con la diputada Ilhan Omar, cuyo activismo está centrado en la lucha por el derecho al aborto, y que fue detenida junto a Alexandria Ocasio-Cortez el pasado 19 de julio por una protesta delante del Tribunal Supremo de EEUU.
Promoción internacional
Fuentes de Podemos sostienen que detrás de esta intensa agenda se encuentra «sin duda» el equipo de la ministra, y sobre todo el papel de Josep Vendrell, pero también la «colaboración activa» de la Moncloa. «Esto es así, no se entendería de otra forma semejante agenda», deslizan las fuentes moradas consultadas.
El complejo de La Moncloa cuenta con un equipo centrado en la promoción internacional del presidente del Gobierno (ubicado cerca del despacho del propio Sánchez y sus estrategas), pero en el partido ‘morado’ aseguran que tanto el cuerpo diplomático de estancia en Estados Unidos como la propia oficina de presidencia pueden «mover hilos» para facilitar encuentros y charlas con los representantes del gobierno americano.
Cabe recordar que, hace menos de un mes, la ‘número dos’ de Podemos, Irene Montero, viajó a Washington y Nueva York, pero su agenda fue de menor envergadura que la de Díaz. Entre otras cosas, Montero no celebró ruedas de prensa ni mantuvo encuentros con el cuerpo diplomático español en el país. También es cierto que su estancia en Washington fue mucho más corta, puesto que la responsable de Igualdad prefirió quedarse un día en la capital y volar el día siguiente, siempre en Falcon, hasta Nueva York. Fue un trayecto de tan solo 43 minutos, como desveló este diario.
«No quieren que pinche»
Fuentes sindicales cercanas a Díaz también hablan del respaldo de la Moncloa en este viaje. La dirigente gallega está centrada en una operación de marketing político que sirve para proyectar una imagen de gestión sólida a través de lo que algunos califican de «legitimación externa».
No es la primera vez que Díaz emplea dicha estrategia. Inauguró ese plan con el encuentro en diciembre con el Papa, y después desplegó varias reuniones en Bruselas y con otros ministros de Trabajo de los países europeos. En invierno, presentó el nuevo libro del economista francés Thomas Piketty en Madrid. Aunque desde el frente socialista no todos asumen el respaldo de Sánchez en esa operación.
Si bien en el PSOE dan por descontado que Sánchez necesita que Díaz se haga con el «espacio político» de Unidas Podemos, el entorno del presidente se ha mostrado más frío con la gallega después de algunas salidas públicas. De ahí que no todas las fuentes socialistas vean rentable para el PSOE ayudar activamente a Díaz en esa operación. Y dudan de que La Moncloa la apoye. Pero en el ámbito sindical no tienen dudas: «[Los socialistas] no quieren que pinche».