Vox se crece ante miles de personas: defiende a Toscano y acusa a Sánchez de traición
Según los datos de la formación, a esta cita han acudido unas 80.000 personas, una cifra que la Delegación del Gobierno ha rebajado hasta las 25.000
El líder de VOX, Santiago Abascal, interviene en la manifestación. | Sergio Pérez (EFE)
Las manifestaciones convocadas este domingo por Vox en Madrid y frente a los ayuntamientos de las capitales de provincia para pedir la dimisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, han congregado a decenas de miles de personas, especialmente en la capital. Según los datos de la formación, a esta cita han acudido unas 80.000 personas, una cifra que la Delegación del Gobierno ha rebajado hasta las 25.000.
En la convocatoria que la formación hizo «para exigir la dimisión del Gobierno de la traición, la inseguridad y la ruina», el líder del partido, Santiago Abascal, ha acusado a Pedro Sánchez, de ser un «jefe de demoliciones que quiere triturarlo todo» y que «no tiene escrúpulos», y ha criticado al Ejecutivo por que «se victimice con el numerito de Montero», tras las acusaciones a Vox de ejercer violencia política contra la ministra de Igualdad por las declaraciones de su diputada Carla Toscano.
Multitud de banderas de España y de Vox se han abierto paso en un evento en el que también se han encendido bengalas de color verde y se han escuchado cánticos de «Gobierno traidor», así como peticiones constantes de dimisión para Sánchez y Montero.
Abascal ha clamado contra el Gobierno por estar «contra los españoles, y entregado a todos y cada uno de los enemigos de España», motivos por los que ha criticado que hoy en el país «no existe ninguno de los pilares esenciales» que se necesitan para «mantenerse en pie y prosperar».
«No hay bienestar, seguridad, propiedad garantizada, libertad básica, instituciones sólidas e independientes, unidad nacional garantizada, soberanía ni una democracia de verdad», ha lamentado Abascal.
Ha cargado también contra el Gobierno por su «eficiencia» a la hora de «soltar a los delincuentes, sediciosos y malversadores», en referencia a la reforma del delito de sedición y del de malversación que quiere llevar a cabo el Ejecutivo. Abascal considera que la respuesta a esta postura debería pasar por «tipificar en el Código Penal el delito de traición», para que «ningún político, ni separatista ni del conjunto de España», pueda «traicionar a los españoles liberando a los que dieron el golpe de Estado».
Por todo ello, España necesita, según Abascal, lo que asegura que encarna su partido: un «resurgir patriótico» y un «renovado orgullo nacional» ante el «hartazgo de acomplejarse de nuestra patria».
Abascal defiende a Toscano
El líder de Vox también ha dedicado una parte de su intervención a la polémica suscitada por las palabras de la diputada de la formación Carla Toscano, quien dijo esta semana en el Congreso que el único mérito de la ministra había sido «estudiar en profundidad a Pablo Iglesias».
«Se victimizan. Lo que hemos tenido que aguantar esta semana… Decir la verdad en el Congreso se ha convertido no ya en una osadía. Ya es la antesala de un delito. Es violencia, llevarles la contraria es violencia», ha dicho al respecto. Y en ese sentido, se ha preguntado si «es violencia decir que había un matrimonio en el Consejo de Ministros», una circunstancia que, según él, no se toleraría «en ningún país serio».
«Violencia», en su opinión, es la «intimidación» que considera que sufrió Toscano tras sus palabras por parte de dos miembros de la Mesa del Congreso, a los que ha acusado de no mantener la imparcialidad implícita en su cargo.
