El PSOE tiene previsto presentar esta misma semana la proposición de ley para sortear al TC
Como adelantó THE OBJECTIVE, el PSOE tiene previsto un plan b en forma de iniciativa legislativa con la intención de aprobarla a principios de enero
El PSOE presentará este viernes la proposición de Ley para tramitar de forma urgente el contenido de las dos enmiendas al Código Penal que perseguían forzar el cambio de una mayoría progresista en el Tribunal Constitucional. Según adelantan fuentes socialistas a THE OBJECTIVE, el grupo parlamentario socialista presentará esta iniciativa parlamentaria el viernes en solitario, en principio, sin el consorcio con el grupo de Unidas Podemos, aunque los dos partidos que sustentan la coalición de Gobierno siguen negociando. El principal escollo de los socios de coalición es la reforma del sistema de elección de los vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) a través de una rebaja de las mayorías, la llamada ‘reforma dura’ de la Justicia que Podemos está intentando recuperar buscando el acuerdo en bloque de los aliados del Ejecutivo.
Como adelantó en primicia este martes THE OBJECTIVE, el plan B de Pedro Sánchez estaba previsto registrarse esta misma semana en las Cortes, con la intención de volver a tramitarlo por la vía de urgencia y acortando al máximo los plazos. Los cálculos del Ejecutivo son que el pleno de aprobación de esta proposición de Ley pueda celebrarse en un máximo de tres semanas, a principios o mediados de enero. Para ello, el Gobierno tiene previsto habilitar un pleno extraordinario, habida cuenta de que el mes de enero es inhábil en el Parlamento y el periodo de sesiones ordinario no comenzaría hasta un mes después, la segunda semana de febrero.
Fuentes de Moncloa consultadas por este periódico descartan que se vaya a recuperar esta fórmula de la rebaja en las mayorías que, sin embargo, no descartó el portavoz parlamentario del PSOE, Patxi López, en conversación permanente con su homólogo de Podemos, Pablo Echenique, autor de esa ronda de contactos con los socios del Ejecutivo y según el cual «el PSOE es menos reticente en estos momentos de lo que lo era hace unas semanas». En rueda de prensa en el Congreso, el propio López no descartó esa recuperación de la rebaja de las mayorías para el CGPJ ante la pregunta reiterada de la prensa: «Estamos estudiando y valorando todas las opciones».
Moncloa niega esta posibilidad que la Comisión Europea obligó a retirar hace dos años, cuando PSOE y Podemos presentaron una proposición de Ley conjunta para cambiar de la mayoría reforzada de tres quintos a la mayoría absoluta los números necesarios para la elección de sus miembros. Sin embargo, el Gobierno tampoco explica por qué el presidente Pedro Sánchez incluyó también este martes una mención al «desbloqueo» del Consejo General del Poder Judicial en su declaración institucional cuando las enmiendas vetadas por el TC sólo afectan a un cambio en los nombramientos del Constitucional.
Podemos confía en el trámite de enmiendas
El Gobierno lo deja en suspenso mientras Podemos confía en sumarse a la iniciativa durante la tramitación parlamentaria y no destila malestar porque su socio le haya orillado en la presentación de la iniciativa, después de haber alimentado la posibilidad de una acción conjunta de todos los grupos parlamentarios para defender con firmeza la autonomia del poder legislativo», en palabras de López. Fuentes de Podemos confían en que «habrá que modificar luego ese texto vía enmiendas y a la luz del auto que presente el TC». Una oportunidad para ver «esos detalles» y ganar tiempo para convencer al socio mayoritario del Gobierno. Un convencimiento sobre el que se mostró esperanzado el portavoz morado, Pablo Echenique, ya por la noche en Ondacero, tras conocerse la presentación de la proposición de Ley socialista en solitario.
Según fuentes del Ejecutivo, se han iniciado conversaciones con todos los grupos y «quien quiera podrá formar parte y sumarse» al apoyo parlamentario. Los negociadores socialistas perciben un «cierre de filas por la tropelía del TC» y constatan una mayoría para renovar al TC. Sin embargo, discrepan de tras cuestiones «menos lógicas» propuestas por sus socios como el intento de abrir un proceso constituyente para reprobar el proceso de la transición, solicitado por EH Bildu, o los llamamientos a secundar manifestaciones en la calle a los que se vio tentado Podemos.
Llamamiento para evitar protestas
Fuentes socialistas y moradas aseguraron a THE OBJECTIVE que las direcciones de ambos partidos tuvieron que pedir serenidad y cordura a sus cuadros, ante la presión de las bases por secundar protestas ciudadanas. «La respuesta debe estar en las instituciones, con los mecanismos que ofrece la política. Tenemos que pedir responsabilidad y no atropellarnos», explicaron fuentes socialistas que ponen el acento en las «dudas de ERC y PNV» a iniciar un proceso con «celeridad y excitación». «Estamos ante un momento delicado y es bueno intercambiar reflexiones con prudencia», explican fuentes parlamentarias.
Por el rabillo del ojo se vuelve a mirar a Europa. El Gobierno niega que las fuentes comunitarias que respaldaron el procedimiento del tribunal de garantías hayan avalado la parálisis del procedimiento legislativo y prefieren ver el vaso medio lleno: «Vuelven a pedir que se desbloqueen y renueven los órganos judiciales». Sin embargo, pese a no admitir los errores de tramitación en el procedimiento que sí admiten algunos de sus socios como el PNV, hay recelos respecto a un futuro apercibimiento de las autoridades comunitarias como sucedió en 2020.
Moncloa y Podemos confían en que «la Comisión Europea tiene que estar muy preocupada porque el órgano de gobierno de los jueces esté bloqueada durante cuatro años». Pero al tiempo sostienen que, en el peor de los casos las decisiones de la Comisión «no son vinculante sino recomendaciones» que sólo pueden derivar en sanciones como en el caso de Hungría.