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El Gobierno espera que la visita de Lula relance las relaciones entre España y Brasil

El presidente latinoamericano visita al Gobierno y al Rey Felipe VI en un encuentro en el que ambos estados buscan estrechar los lazos

El Gobierno espera que la visita de Lula relance las relaciones entre España y Brasil

El presidente de Brasil, Lula da Silva. | Leonardo Negralo (Europa Press)

El Gobierno confía en que la visita oficial que el presidente de Brasil, Luiz Inazio Lula da Silva, iniciará este martes a España permita dejar atrás el ‘impás’ que supuso el mandato de Jair Bolsonaro y relanzar la relación, sobre todo en el plano económico, habida cuenta del rol que este país juega no solo en América Latina sino a nivel global.

Desde Moncloa ponen de relieve la voluntad de los dos gobiernos, tras la vuelta de Lula a la Presidencia, de fortalecer la relación después de cuatro años sin contactos debido a las diferencias con la anterior administración brasileña. Para España, Brasil es un socio estratégico no solo desde el punto de vista regional sino también a nivel mundial, de ahí la voluntad de estrechar aún más los lazos, explican fuentes gubernamentales.

La economía será uno de los temas centrales de la visita de Lula, quien se reunirá el miércoles con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y con el Rey Felipe VI. De hecho, arrancará con un importante foro empresarial organizado por la Cámara de Comercio y la CEOE que clausurará el mandatario brasileño junto a la vicepresidenta primera, Nadia Calviño.

España es el segundo mayor inversor en Brasil por detrás de Estados Unidos, con un stock de 30.000 millones de euros y que genera unos 175.000 empleos directos, mientras que la inversión brasileña en España se sitúa en torno a los 1.100 millones.

En el plano comercial, admiten las fuentes, hay un déficit que España quiere abordar aprovechando la visita, durante la que también se dejará claro al mandatario la voluntad de las empresas españolas en seguir invirtiendo en Brasil, al tiempo que se trasladarán las bondades de invertir en España. Al Gobierno también le interesa conocer los programas de inversión e infraestructuras del país, a los que aspira que puedan optar empresas españolas.

Asimismo, el Ejecutivo también considera que hay margen para potenciar aún más las relaciones en el plano científico y en el de la enseñanza del español, toda vez que Brasil es el país con más centros del Instituto Cervantes, hay cuatro millones de estudiantes y 24.000 profesores y existe un creciente interés.

Relaciones con la Unión Europea

Las fuentes consultadas también ponen de relieve la voluntad compartida de España y Brasil de impulsar una relación estratégica entre la UE y América Latina. En este sentido, consideran que la cumbre entre la UE y la CELAC de julio en Bruselas será una buena ocasión para ello e inciden en la importancia de contar con el respaldo de Lula en este sentido.

En este punto, en Moncloa creen que la coincidencia en el tiempo de la Presidencia de turno de la UE que España asumirá en el segundo semestre y la de Brasil al frente de Mercosur, así como el cambio de política que ha supuesto su vuelta al cargo ofrece una oportunidad de cerrar definitivamente el acuerdo entre los Veintisiete y este bloque.

Las fuentes han celebrado los pasos dados por Lula para la protección del Amazonas, que España respalda, y que podrían allanar el camino a que los países que se mostraban reticentes hasta ahora a avalar el acuerdo, terminen por dar luz verde. España ha mantenido en todo momento su respaldo a este importante acuerdo, por las enormes oportunidades que brinda desde el punto de vista económico y comercial.

Lula busca la paz en Ucrania

La visita servirá igualmente para que el presidente del Gobierno pueda escuchar por boca del mandatario brasileño sus propuestas para la paz en Ucrania y su postura respecto al conflicto, que tanta polémica han generado en los últimos días al considerarse que se alineaba con la tesis rusas y que Lula ha matizado.

Las fuentes consultadas reconocen que Sánchez no comparte todo lo planteado por Lula pero sí da la bienvenida a cualquier esfuerzo para propiciar la paz y está dispuesto a debatir. Los dos países comparten el objetivo pero el presidente ya dejó claro tras su visita a China que cualquier acuerdo o negociación debe contar en primer lugar con el beneplácito de Ucrania, el país agredido.

España valora positivamente los esfuerzos que están haciendo distintos países para propiciar la paz, pero tiene claro que debe tratarse de una paz justa para que pueda ser duradera y que respete los principios de la Carta de Naciones Unidas. Desde Moncloa sostienen que esto pasa también por la retirada de todas las tropas rusas y por la rendición de cuentas por las violaciones del Derecho Internacional que se han cometido.

Por otra parte, el Gobierno también tiene interés de abordar con Lula otros asuntos de índole internacional como la lucha contra la emergencia climática, en la que creen que Brasil está llamado a ser un actor clave, así como cuestiones relativas a la estabilidad económica y financiera global, toda vez que el país asumirá en 2024 la presidencia del G-20.

La agenda de la visita

Lula llegará a Madrid a primera hora de la tarde del martes procedente de Portugal, donde ha llevado a cabo en los últimos días una visita oficial. El mandatario será el encargado de clausurar con Calviño el foro empresarial, en el que está previsto que intervenga también el titular de Industria y Comercio, Héctor Gómez, así como su homólogo brasileño. Desde Moncloa han explicado que Sánchez no podrá acompañarle debido a su comparecencia ante el Senado.

Ya el miércoles, Sánchez recibirá al presidente brasileño en el Palacio de la Moncloa, donde al término de su encuentro está prevista la firma de varios acuerdos bilaterales y la comparecencia de ambos ante la prensa. En el encuentro, ambos presidentes estarán acompañados por varios de sus ministros, en el caso del español por las tres vicepresidentas así como los titulares de Exteriores, Comercio, Ciencia y Universidades.

Tras ello, Lula se trasladará al Palacio Real, donde será recibido por el Rey Felipe. A continuación, y en este mismo escenario, tendrá lugar el almuerzo ofrecido por los Reyes en su honor, al que asistirán el presidente del Gobierno y otras personalidades, con el que el presidente brasileño pondrá fin a su visita a España.

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