El Festival de San Sebastián rechazó proyectar un filme sobre Guerra y priorizó el de Ternera
El comité de selección descartó en marzo un documental, premiado en otros países, sobre el exdirigente del PSOE
Alfonso Guerra, entrevistado por THE OBJECTIVE. | Fotografía: Víctor Ubiña
El Festival de San Sebastián rechazó proyectar en su edición de este año una película documental sobre Alfonso Guerra que ha sido premiada en varios certámenes internacionales. El comité de selección del Zinemaldia declinó incluir en su programación la cinta Guerra, Alfonso. El hombre detrás del político, del cineasta Manuel Lamarca, que había solicitado su inclusión en el certamen cinematográfico de San Sebastián. Un festival en el que sí se proyectará, por el contrario, una película sobre el exjefe de ETA José Antonio Urrutikoetxea, alias Josu Ternera, que ha desatado las críticas de algunas asociaciones de víctimas del terrorismo.
«Me dijeron que no había sido seleccionada con una respuesta muy protocolaria. A lo mejor es que no les ha gustado, pero creo que es relevante que un testimonio como el de Josu Ternera se haya puesto en primera plana, y a otra figura como Alfonso Guerra se la haya relegado a un segundo plano», indica a Lamarca en declaraciones a THE OBJECTIVE. El cineasta expresa su sorpresa por el hecho de que su película de 155 minutos sobre Alfonso Guerra, un relato en primera persona de la España de la Transición y los primeros años de la democracia, no haya sido aceptada en ninguno de los festivales españoles a los que se ha presentado. Por el contrario, en varios países de Europa, América y Asia ha recibido premios y menciones honoríficas.
El documental de Lamarca, en el que Alfonso Guerra cuenta en primera persona también facetas desconocidas de su vida íntima, ha recibido el premio al mejor largometraje documental en el Pacific International Film Festival, en Vancouver (Canadá). También una a mención honorífica en el London Film Festival y el premio de la crítica del Golden Leaf International Film Festival, que se celebra en la India, dentro del apartado como mejor largometraje documental, entre otros. Además, el testimonio de Guerra sobre la Transición ha sido proyectado en otros lugares como Nueva York o Moldavia. Pero no en España.
Rechazo a Alfonso Guerra
Lamarca confirma que, el pasado mes de marzo, el comité de selección del Festival de San Sebastián le comunicó que había visto con gran interés su cinta sobre el histórico dirigente del PSOE, de actualidad en las últimas semanas por sus críticas a la posible amnistía al procés catalán a cambio de la investidura de Pedro Sánchez. No obstante, también le trasladaban que su cinta no había sido seleccionada para la edición de este año al no haberse encontrado un lugar para su inclusión dentro de la programación del certamen, en el que se proyectan más de 200 títulos.
Desde el Festival de San Sebastián indican a este diario que nunca informa públicamente sobre qué películas han sido rechazadas, al considerar que sería de mal gusto para las obras que no han sido seleccionadas por una u otra razón. Añaden que cuando se comunica que una cinta que no ha sido seleccionada, en todos los casos, se envía una respuesta de carácter protocolario.
La dirección del Festival de San Sebastián, por el contrario, emitió la pasada semana un comunicado para aplacar las críticas sobre la emisión desde el próximo viernes y durante tres días, en la sección Made in Spain del festival, del documental No me llame Ternera, dirigido por el periodista Jordi Évole. Ese documental, en el que el propio Josu Ternera narra a través de una entrevista su participación en un asesinato por el que nunca fue procesado y que fue sobreseído por la Ley de Amnistía de 1977.
El documental de Josu Ternera
«La no ficción que ahora nos ocupa ni justifica ni blanquea a ETA, porque este Festival no proyectaría una película con estas premisas», decía en el comunicado oficial el director del Zinemaldia, José Luis Rebordinos. La polémica se desató después de que la asociación de víctimas Dignidad y Justicia pidiese a la Fiscalía revisar la cinta sobre Ternera por un posible delito de enaltecimiento terrorista.
El Ministerio Público lo rechazó. Posteriormente, más de 500 personalidades entre las que se encuentran Fernando Savater, Fernando Aramburu, Ana Iríbar, Marimar Blanco, Andrés Trapiello o Félix de Azúa enviaron una carta al festival de cine de San Sebastián en la que piden que no se exhiba la película puesto que supone un blanqueamiento del exjefe terrorista y de ETA. Alguno de los firmantes de esa carta recordaría también que hace tan solo dos años, como admitió su propio autor, la dirección del festival rechazó proyectar el documental de Iñaki Arteta el documental ‘Bajo el silencio‘, financiado por la fundación Villacisneros, donde las víctimas muestran su relato tras cincuenta años de terrorismo nacionalista.
Similitudes de formato
El documental dirigido por Évole, que se podrá ver en Netflix tras el Festival de San Sebastián, guarda ciertas similitudes con el de Manuel Lamarca sobre Alfonso Guerra en cuanto a formato. El cineasta cordobés convirtió en un documental de 155 minutos una entrevista de 9 horas, realizada en cuatro días diferentes, al exdirigente socialista. En ella, Alfonso Guerra reflexiona en primera persona sobre sus inicios en el PSOE durante la dictadura, el Congreso de Suresnes, la Transición democrática, la Constitución de 1978, la moción de censura de 1980, el golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 y la histórica victoria socialista de 1982, entre muchas otras cuestiones de la historia reciente de España.
La transcripción de las casi siete horas de entrevista que, por cuestiones de espacio, no tuvieron cabida en el documental de Lamarca, es el hilo argumental en el que se basa el nuevo libro de Alfonso Guerra, La rosa y las espinas. La presentación de ese libro, este miércoles en el Ateneo de Madrid, reunirá por primera vez en 3o años en un acto a Felipe González y Guerra. Un acto que contará con la presencia de otras figuras socialistas que se han expresado públicamente en contra de la amnistía que el PSOE estaría negociando con ERC y Junts para facilitar la investidura de Pedro Sánchez.
