Radiografía del putero español: tiene 50 años, vive en Madrid y le gustan los transexuales
El 30% de los usuarios de sexo de pago ha solicitado los servicios de una prostituta transexual
El sector del sexo de pago cuenta con un volumen de negocio de casi 5 millones de euros al año. | Ilustración: Alejandra Svriz
El perfil mayoritario del consumidor de sexo de pago (el conocido como putero) en España es un hombre de entre 45 y 54 años (49,5 de media), residente en la Comunidad de Madrid y con un cierto gusto por las prostitutas transexuales (el 30,16% ha pagado por ellas). Así se desprende del informe de la plataforma Escort Advisor, elaborado en base a sus datos internos.
El buscador de escorts ha realizado un profundo análisis que desvela el perfil de los puteros y sus preferencias en todo el país, en donde el sector cuenta con un volumen de negocio de casi 5 millones de euros al día. Este concluye que entre las preferencias de los consumidores retribuido se encuentran los servicios de escorts mujeres (49,14%), seguidos muy de cerca por los servicios de trans (30,16%).
En cuanto a la preferencia por la nacionalidad, el 99% de los usuarios mensuales no utilizan dicho filtro en la página web, lo que indica que el origen étcnico de las trabajadoras sexuales no es un factor que importe a los puteros.
Más puteros en Madrid y Barcelona
El porcentaje de usuarios de la página Escort Advisor con respecto al total de población masculina (de 18 a 75 años) varía significativamente de una provincia a otra. Madrid tiene el porcentaje más alto, con un 27,01% sobre 648.152 habitantes, seguida de Valladolid (17,01%) sobre 32.134, Barcelona (15,92%) sobre 330.454, y Zaragoza (15,59%) sobre 55.210. Le siguen Baleares, Vizcaya, Valladolid, La Coruña, Alicante, Murcia y Pontevedra. Por ese orden.
A pesar de la mayor presencia de consumidores de sexo de pago en algunas provincias, como las anteriormente mencionadas, sorprende el número de escorts por cada 1.000 habitantes de provincias como Lugo (4,83), Baleares (4,16) o Almería (4,06), frente a las 2,11 y 2,05 de Barcelona y Madrid, respectivamente. En la cola se sitúan Melilla (0,98) y La Rioja (0,64).
Búsquedas
Por otro lado, los seis términos de búsqueda más populares en Google en relación al sexo de pago son: «putas Madrid» (93.530 búsquedas), «putas Valencia» (70.313), «escort Madrid» (65.262), «putas Barcelona» (61.078), «putas Zaragoza» (51.535) y «putas Valladolid» (40.054). Valladolid y Lugo tienen tasas extremadamente altas de búsquedas por cada 1.000 habitantes, lo que sugiere un elevado índice de puteros en esas áreas específicas.
Minusválidos y viudos
La madame Susana Pastor, presidenta de la Asociación de Trabajadoras Sexuales (Astras), no concuerda con los datos deslizados por la web. Maneja otros. «El consumidor es de todas las edades», asegura, y subraya que «cada vez más gente joven y mujeres consumen prostitución». «El 80% son hombres, pero en el último año el número de mujeres ha incrementado un 5% hasta el 20%», abunda.
Con arreglo a sus cálculos, el nicho más amplio se ubica entre los 30 y 40 años, el 35% de los puteros, por delante del de 18-30 (el 25%) y del de 40-50 (20%). Los clientes de entre 50 y 60 años serían el 20%. Pastor también destaca que el 15-20% de los clientes son gente con minusvalía y el 20-25% gente viuda. Por último, los separados y solteros suponen un 25-30% y los casados un 60-70%.
Los puteros se movilizan
Sea como fuere, parece claro que los puteros están más activos que nunca. El CEO de Escort Advisor, Mike Morra, admite que «la oferta de sexo de pago no disminuye» en España, sino que «aumenta cada mes» en su plataforma. El empeño del Gobierno de España por abolir la prostitución se enfrenta a un movimiento organizado que quiere seguir gozando del sexo de pago.
Aglutinados en el Movimiento de Consumidores de Sexo de Pago, han repartido folletos, pegado carteles y hasta alquilado helicópteros para denunciar la «falta de libertad» y el «clima de prohibición» que, a su juicio, se respira en España. «¡Esto solo es el comienzo!», adelantan los puteros.
