Un hombre secuestra a un fontanero en Málaga porque el presupuesto era «un robo»
El investigado no quería abrir la puerta de su inmueble pero lanzó un arma por la ventana
Un agente de la Policía Nacional.
La Policía Local de Málaga se tuvo que enfrentar el pasado fin de semana a una situación «de película». Los hechos ocurrieron en la mañana del sábado. Un hombre llamó al fontanero tras detectar una avería en su domicilio. Le pidió presupuesto y al cliente le pareció «un robo». A partir de ahí, el individuo se atrincheró en su casa junto con el fontanero amenazando con explosionar una bombona de butano.
Según la información adelantada por Sur, el hombre colocó la bombona en el rellano del edificio y avisaba con su pretensión de «volar el edificio». Tras la llamada de los vecinos por la escucha de unas detonaciones, la Policía Local acudió al bloque donde se estaban produciendo los hechos.
Los agentes, según han confirmado fuentes cercanas a THE OBJECTIVE, retiraron la bombona de butano que se ubicaba en el rellano del edificio. Seguidamente, avisaron a los vecinos que se encontraban en el mismo bloque de piso para desalojar las viviendas ante las amenazas del presunto secuestrador.
Las negociaciones comenzaron, pero no fueron fáciles. Aunque el hombre aseguraba a la Policía que se encontraba solo en su casa, las alarmas saltaron cuando escucharon gritos de auxilio dentro de la vivienda de una segunda persona.
La Policía trató de convencerlo para poder entrar al piso y «comprobar que todo estaba bien». Ante la negativa, los operativos sí consiguieron que el individuo lanzase por la ventana el arma con la que estaba llevando a cabo sus amenazas. La Policía confirmó que el arma era falsa.
La retención del fontanero se confirmó cuando una llamada sonó en la comisaría de la Policía Nacional. Una persona aseguraba estar secuestrada dentro de una vivienda. A los esfuerzos de la Policía Local se sumaron los de la Policía Nacional. Más tarde, también intercedería una unidad del Grupo Operativo de Apoyo de la Policía Local.
Las negociaciones se enfocaron en tratar de convencer al supuesto secuestrador para dejar entrar a los agentes a su domicilio. En el momento en el que el varón abrió la puerta, dos agentes accedieron al piso a la fuerza. El individuo había colocado muebles para impedir la entrada, pero sus esfuerzos fueron vanos.
El Grupo Operativo de Apoyo de la Policía Local accedió al lugar de los hechos y se enfrentaron a un hombre que se resistió y mostró gran agresividad, tratando de golpear a los agentes con una silla y otros objetos de la vivienda, según informa el diario malagueño Sur.
El fontanero pudo ser liberado sin ningún tipo de daños físicos y el supuesto secuestrador fue detenido y trasladado a las dependencias policiales. Tras un exhaustivo registro en la casa, los agentes requisaron dos armas blancas que habrían sido utilizadas para amenazar al fontanero.
Hasta el momento no se ha podido verificar si el supuesto secuestrador tiene antecedentes o algún tipo de patología mental.
