La pareja de Rosell pide fondos para pagar 422.500 euros que le exige una juez
La juez obliga al novio de la ex alto cargo de Podemos Victoria Rosell, el periodista Carlos Sosa, pagar 422.40 euros.
La juez María Ángeles Velázquez manda al banquillo de los acusados al novio de la ex alto cargo de Podemos Victoria Rosell, el periodista Carlos Sosa, por los delitos de acoso, odio y revelación de secretos contra una menor de edad. Además, la titular del Juzgado de Instrucción número 27 de Madrid le exige pagar una indemnización como responsabilidad civil derivada del delito de 422.500 euros. Para ello, según ha podido saber THE OBJECTIVE, el periodista utiliza el digital que dirige, Canariasahora, portal incorporado a elDiario para cubrir las informaciones del archipiélago, para abonar la cantidad requerida por la juez.
La juez María Ángeles Velázquez ha dictado un auto de procedimiento abreviado por el cual manda a juicio a la pareja sentimental de la ex alto cargo de Podemos y ahora juez, Victoria Rosell. Esta causa se abrió a raíz de una querella interpuesta por el exmagistrado Salvador Alba. En un extenso escrito, el querellante narró cómo la entonces número dos de Irene Montero, Victoria Rosell, y su pareja iniciaron una campaña de acoso mediático contra su mujer, contra su hija y contra él. «Han desvelado datos médicos del querellante y han vinculado el trabajo profesional tanto de éste como de su mujer con una ideología política, provocando el odio de los miles y miles de seguidores que tienen los querellados en redes sociales por todo el país», detallaba el escrito. Además, añadió que su hija de nueve años ha sufrido acoso en el colegio después de que el novio de Rosell publicara datos personales de la menor en el digital que dirige.
Acoso a una menor de nueve años
«El día 25 de febrero de 2018, Carlos Sosa Báez publicó un artículo en el periódico que dirige en el que desvela el colegio en el que estudia la hija de los querellantes, que contaba con tan solo nueve años, haciendo alusión a una discusión de la menor con otra compañera que le preguntaba si habían metido ya a su padre en la cárcel. Esto provocó un estado de ansiedad brutal en la hija de los querellantes y la interposición de una demanda de conciliación contra los padres de la compañera que, por cierto, fue publicada al detalle. Esto es una muestra más del acoso al que se lleva sometiendo a los querellantes por parte de los querellados desde hace años», subrayó el escrito. Además, el digital del marido de Rosell publicó no sólo datos confidenciales de la hija menor de Salvador Alba, sino también una fotografía en la que aparecía junto a sus progenitores, difundiendo dicho medio, de esta manera, la imagen de una niña sin el consentimiento de sus padres.
Salvador Alba expuso en la querella que el periodista Carlos Sosa y su pareja Rosell, aprovechando que ejercían acusación popular y particular, respectivamente, en una causa en la que estaba imputado el ahora querellante, difundieron de manera presuntamente ilícita información de carácter reservado que formaba parte de las diligencias de investigación por las que fue condenado finalmente.
De esta manera, al ejercer la acusación popular, el periodista pudo acceder de manera privilegiada a todos los detalles sobre un viaje privado que el juez realizó en julio de 2018 junto a su familia y cuyos billetes de avión obraban en la causa porque el propio Alba los había aportado. El ahora querellante entregó dicha documentación ante el Tribunal Superior de Justicia de Canarias en relación a la causa en la que estaba siendo investigado. Sin embargo, éste no fue el único documento de carácter confidencial que afectaba a Alba y que fue publicado en el digital de Sosa. También se difundieron datos médicos del juez Alba. De hecho, «llegó a publicarse datos personales de los facultativos» lo que ocasionó que el querellante tuviese que cambiar en varias ocasiones de médico, puesto que «no querían atenderle tras ver sus datos personales publicados en los medios de comunicación», explicó el querellante.
La juez María Ángeles Velázquez manifiesta, en el auto de pase a procedimiento abreviado, que el periodista Carlos Sosa difundió «la vida personal y la salud de Salvador Alba, facilitando datos de los facultativos médicos que le atendieron, dando a conocer el lugar de ingreso, su afección y diagnóstico, publicando así mismo imágenes y vídeos en momentos de su vida privada, sólo o acompañado de sus familiares y datos de otros aspectos de la esfera personal del mismo, con alteración del normal desarrollo de su vida privada». Por todo ello, la instructora pide que la pareja de Victoria Rosell se siente en el banquillo de los acusados y se enfrenta a una petición de cárcel de 23 años.
Así, la juez ha solicitado que deposite una indemnización en concepto de responsabilidad civil ex delicto de 422.500 euros. En un primer momento, Carlos Sosa presentó como aval el capital del diario Canariasahora, pero ha sido rechazado por la juez. Por ello, buscó una segunda opción: conseguir nuevos socios que se inscribieran en el diario y obtener un beneficio del abono procedente de sus lectores para hacer frente a la cantidad reclamada. Y ahora en todas las noticias publicadas en ese portal aparece el siguiente texto:
Lo cierto es que la juez no le investiga por difundir una información falsa sino por divulgar datos personales, como la dirección y nombre del colegio, de una menor de nueve años. Lo que ha ocasionada un daño irreparable a esta menor.