El PP cierra filas con Moncloa y Sumar justifica el veto de México al Rey: «Anacrónica carga»
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, celebra el veto: «Viva México, cabrones»
El portavoz del PP, Borja Sémper, ha exigido este miércoles a México «respeto» a España después de la exclusión de Felipe VI de la toma de posesión de la presidenta electa mexicana, Claudia Sheinbaum, y ha recalcado que si el Rey no está invitado, España «no está invitada», cerrando así filas con el Gobierno de Pedro Sánchez en este asunto. Sumar, en cambio, justifica el veto. «Otra vez comprobamos que la monarquía es una anacrónica carga que nos da problemas cuando no ruboriza. Mal ejemplo de diplomacia exigir al anfitrión de la fiesta a quien tiene que invitar a su casa. España estaría muy bien representada por autoridades elegidas democráticamente», ha indicado el portavoz parlamentario de IU, Enrique Santiago.
El Ejecutivo ya ha dicho que es «inaceptable» que no se haya invitado al Rey Felipe VI a la toma de posesión de la presidenta mexicana el próximo 1 de octubre en Ciudad de México y por ese motivo ha decidido no participar en la ceremonia a ningún nivel, según ha informado el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
En declaraciones en los pasillos del Congreso, Sémper ha resaltado que Felipe VI, que es el jefe del Estado, es «el representante» de España y si él no está invitado a ese acto, no lo está tampoco España.
«Su majestad el Rey es el representante, lógicamente y si su majestad el Rey no está invitado, España no está invitada. Respeto a su majestad el Rey y un respeto a España», ha manifestado el dirigente del PP a los periodistas.
Sumar pide reflexionar sobre si el Rey debe representar a España
El portavoz de Sumar en el Congreso, Íñigo Errejón, ha manifestado que acatan la decisión del Ministerio de Exteriores de no enviar representación del Gobierno a la toma de posesión de la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, en rechazo a la exclusión del Rey Felipe VI de esa ceremonia.
No obstante, ha manifestado también que México es un país soberano a la hora de escoger para decidir a quién invita dentro de las delegaciones internacionales, ha remarcado que Sumar le hubiera gustado que estuviera presente el Ejecutivo en el evento y ha instado a abrir el debate sobre si es adecuado que el monarca represente a España en el Exterior, dado que no es un cargo electo.
Así se ha pronunciado en declaraciones en el Congreso en torno a la polémica abierta una vez que México no ha invitado a Felipe VI a la toma de posesión de Sheinbaum, cuando es tradición que el Rey asista estas ceremonias en Latinoamérica, y la consiguiente respuesta de Exteriores, que tildó de inaceptable que se le apartara de la delegación y determinó que ningún miembro del Ejecutivo asistirá a la toma de posesión.
Tras esta directriz, la vicepresidenta segunda y máximo referente de Sumar en el Gobierno, Yolanda Díaz, no va a asistir al acto al que había sido invitada, siguiendo el criterio de Exteriores. En julio y antes de este choque, manifestó que su voluntad era ir y que tenía una magnífica relación con la nueva mandataria mexicana.
Mientras, varios diputados del grupo plurinacional han cuestionado abiertamente la decisión del departamento que dirige José Manuel Albares de declinar mandar una representación del Ejecutivo al acto.
Por ejemplo, el portavoz parlamentario de IU, Enrique Santiago, ha lanzado en la red social ‘X que «la monarquía es una anacrónica carga que nos da problemas, cuando no ruboriza». «Mal ejemplo de diplomacia exigir al anfitrión de la fiesta a quien tiene que invitar a su casa. España estaría muy bien representada por autoridades elegidas democráticamente», ha apostillado.
De hecho, el diputado también fue invitado a la toma de posesión pero no asistirá al coincidir con la fiesta anual del PCE, según indican fuentes parlamentarias. La parlamentaria Tesh Sidi también ha señalado que Espala no podía faltar a la toma de posesión de un gobierno progresista y otros diputados consideran que es un error y una torpeza en materia de relaciones diplomáticas la postura de Exteriores.
Rufián y Belarra muestran su apoyo a México
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha respondido con un «Viva México, cabrones» al ser preguntado por la decisión de México de no invitar al jefe del estado español, el rey Felipe VI, a la toma de posesión de la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, prevista para el próximo 1 de octubre.
Rufián mostraba así, desde los pasillos del Congreso, su apoyo a la decisión del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que ya ha sido criticada por el Gobierno español.
Por otro lado, la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha justificado que el Rey no sea invitado a la investidura de la presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, esgrimiendo que «avergonzó a España» en la toma de posesión del presidente de Colombia, Gustavo Petro, y que es «un problema» para las relaciones internacionales basadas «en el respeto» y «los Derechos Humanos».
«El Rey avergonzó a España en la toma de posesión de Gustavo Petro y ahora no le invitan a México. Aunque el facherío patrio se enfade, el Rey es un problema para las relaciones internacionales basadas en el respeto y los Derechos Humanos y no en la corrupción», ha sentenciado la dirigente de la formación morada en un mensaje en la red social X, haciendo referencia a cuando Petro exhibió en su investidura la espada de Simón Bolívar y don Felipe no se levantó.
El todavía presidente en funciones de México, Andrés Manuel López Obrador, puso en 2022 «en pausa» las relaciones bilaterales con España al considerar que no existía «una actitud de respeto» por la parte española y pidiendo al Felipe VI una disculpa por la ‘Conquista’.
Posteriormente y en declaraciones en los pasillos del Congreso, la líder de Podemos ha expresado que le «preocupa enormemente» que el Gobierno esté «atando sus relaciones internacionales» a las de la monarquía, cuando es evidente que Felipe VI es un problema para las mismas.
«El Rey fue a cara de perro a Bolivia. El Rey cometió, desde mi punto de vista, una falta de respeto enorme en la toma de posesión de Gustavo Petro, intentando humillar al presiente de Colombia y no levantándose ante la espada de Bolívar. Y después de eso, es evidente que México no invita al Rey, porque el Rey es un problema para las relaciones internacionales, basadas en el respeto mutuo y en los Derechos Humanos».
Es más, ha censurado que el Gobierno ate su diplomacia al Rey y «a una monarquía borbónica que a lo que está acostumbrada es a hacer relaciones corruptas con narcodictaduras». «Nos parece que no es el camino para un Gobierno que se dice a sí mismo progresista», ha ahondado.
Por último y sobre si piensa que el Gobierno debería ir a la toma de posesión de la nueva mandataria mexicana pese a la exclusión del monarca, ha respondido que «por supuestísimo» que sí porque las relaciones con México son «estratégicas».