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España

El Gobierno no ha realizado ningún simulacro de gran apagón: el último fue en el año 2016

En ese último ensayo de Interior y Red Eléctrica se restauró el sistema eléctrico en sólo cuatro horas

El Gobierno no ha realizado ningún simulacro de gran apagón: el último fue en el año 2016

Centro de control de Red Eléctrica. | REE

El escenario más grave y dramático que puede sufrir una red eléctrica nacional es el llamado cero de suministro: una caída total del sistema con el consiguiente apagón total. Ese fundido a negro fue lo que ocurrió este pasado lunes en toda España, provocando el caos en las grandes ciudades, a pesar de que la reacción ya fue ensayada en dos ocasiones por parte del Ministerio del Interior y el Centro Nacional para la Protección de las Infraestructuras Críticas (Cnpic). Pero el último simulacro se hizo el 15 de noviembre de 2016, durante el Gobierno de Mariano Rajoy, con un escenario que clavaba lo ocurrido nueve años más tarde: un cero de tensión en la red española que provoca la caída del sistema en Portugal y también en zonas del suroeste de Francia. A diferencia del gran apagón de esta semana, la red recuperó su normalidad en apenas cuatro horas.

Este lunes se cumplieron los peores presagios que anticipaban un posible gran apagón eléctrico, a pesar de que el Gobierno lo ha considerado en todo momento -hasta ahora- un «bulo». Sin embargo, pese a negar tajantemente esa posibilidad, lo cierto es que las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y los operadores de Red Eléctrica ya habían ensayado con anterioridad cómo actuar en caso de que se produjese lo que muchos temían: que España se fuese a negro en cuestión de segundos.

Desde que Pedro Sánchez llegó a Moncloa, ni Interior ni ningún otro estamento oficial ha organizado y realizado un simulacro de gran apagón causado por un «cero de tensión». El escenario técnico hasta ahora sólo era una situación hipotética pero desde este lunes cuenta con un antecedente histórico. El último de los simulacros realizados basándose en esta hipótesis se produjo en 2016 y midió la capacidad de reacción de las fuerzas de seguridad para mantener el orden en ciudades y en el entorno rural, la protección de infraestructuras críticas como centrales nucleares o aeropuertos, y el proceso de vuelta a la normalidad. El anterior ejercicio -el primero realizado en España- data de 2010. Seis años después, en 2022, no se hizo una actualización del procedimiento -aunque no está protocolizado que deba realizarse-.

En el ejercicio, uno de los más ambiciosos del sector eléctrico, participaron centenares de funcionarios de Policía, Guardia Civil, Mossos d’Esquadra, Ertzaintza y Protección Civil, que trabajaron de forma conjunta con operadores eléctricos y Red Eléctrica de España.

Además del componente de seguridad ciudadana y del Estado, el ejercicio contó con un ensayo del procedimiento de reposición del servicio eléctrico. Es decir, el reencendido de la red tras sufrir el cero de energético. Un «incidente grave» del que se desconocían las causas, pero que se tomaba como hipótesis que fuese provocado. Se movilizó al Centro Nacional para la Protección de las Infraestructuras Críticas (Cnpic), que coordinó un despliegue de Policía Nacional y Guardia Civil con el objetivo de encapsular las centrales nucleares y otras instalaciones claves para la red eléctrica. Este protocolo se basa en una instrucción de Interior con fecha de 2009, firmada por el entonces ministro Alfredo Pérez Rubalcaba.

Bastaron cuatro horas para que esa reposición del servicio eléctrico peninsular quedase completada gracias al encendido, entre otras, de las centrales de ciclo combinado. Instalaciones que fueron claves en la recuperación de la situación este pasado lunes.

Interior defendió entonces que este tipo de simulacros son de vital importancia porque «permiten conocer el grado de resiliencia de nuestras infraestructuras estratégicas para mejorar su protección y respuesta ante las amenazas». Además, señalaron que «la cooperación público-privada en la gestión de estos incidentes es vital para dar una respuesta integral a incidentes graves, especialmente cuando son de carácter deliberado».

En las conclusiones tras el simulacro, el Gobierno recalcó que «la robustez y fiabilidad del sistema eléctrico español, en el que se producen escasos incidentes, limita la posibilidad de ocurrencia de este tipo de situaciones. No obstante, es preciso que los operadores adquieran experiencia en la gestión de situaciones especialmente complicadas»

Diez años sin plan de apagones

Tal y como ha publicado THE OBJECTIVE, España lleva desde el año 2015 –diez añossin presentar la Estrategia de Seguridad Energética. La Estrategia de Seguridad Energética del año 2015 se llevó a cabo con el Gobierno popular de Mariano Rajoy. Constó de 29 folios y, según la descripción de este, era un documento esencial para «desarrollar las previsiones establecidas de la Estrategia de Seguridad Nacional con respecto al ámbito de la seguridad energética, con el objeto de orientar la acción del Estado con visión anticipatoria, sobre la base de la singularidad energética de nuestro país».

En 2020, una orden del Consejo de Seguridad Nacional, que está compuesto por numerosos ministerios, incluyendo también a Moncloa, aprobó la revisión de la estrategia del año 2015. Un año después, el informe anual de Seguridad Nacional señaló que el Comité especializado de seguridad energética «había comenzado a revisar la estrategia de 2015″. Al año siguiente, en el informe del año 2022, se suprimió el capítulo de «seguridad energética», que había aparecido en los últimos informes de Seguridad Nacional, por el de «vulnerabilidad energética».

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