Crean una app para el control de fármacos de diabéticos ante la falta de 'stock' en farmacias
Los sanitarios avisan del peligro de la nueva tendencia de usar medicamentos para la diabetes con el fin de reducir peso
En ocasiones, uno de los mayores retos a los que se enfrenta un diabético es encontrar la medicación correspondiente en las farmacias. Desde el inicio de 2023, los sanitarios han informado de la falta de abastecimiento de fármacos relacionados con esta enfermedad. Casi un año después, la situación no ha mejorado.
La Asociación de Diabetes de Málaga (Adima) fue pionera en colaborar con la Red Digital de Farmacias de LUDA Partners. En caso de que el paciente acuda a su farmacia habitual y no localice los medicamentos recetados por el médico por falta de ‘stock’, Adima recomienda solicitar al farmacéutico «buscarlo en LUDA».
LUDA es una herramienta digital que permite localizar de inmediato la farmacia más cercana que tenga el producto necesitado, procediendo a su reserva y posterior recogida. Esta aplicación supone un refuerzo asistencial para los pacientes con diabetes.
Según ha explicado a THE OBJECTIVE Luis Martín Lázaro, cofundador de LUDA Partners, el 98% de las veces que el farmacéutico busca el medicamento desabastecido, lo encuentra. Más de 3.500 farmacias ya forman parte de la red y han ayudado a más de 240.000 pacientes a evitar los riesgos de salud que conlleva la falta de medicamentos.
En Málaga, el 20% de las farmacias forman parte de este proyecto. De media, se suman 100 farmacias mensualmente y se ha rebasado la cifra de las 3.500 adscritas. El crecimiento, según Martín Lázaro, supone una «respuesta a la creciente escasez de suministros, una situación que los farmacéuticos viven con mayor frecuencia».
La proyección para 2024 es superar las 5.000 e incluso las 6.000 boticas al finalizar el año presente. De ser así, esta herramienta digital alcanzaría al 25% de las farmacias en España.
LUDA Partners anunció en diciembre el acuerdo con diferentes asociaciones de pacientes con las que se ha desarrollado un protocolo para la fácil y rápida ubicación de los medicamentos. Además de la asociación malagueña de Adima, se sumaron la Asociación Dulces Unidos Huelva, Asociación Lupus Málaga y Autoinmunes, Asociación Malagueña de Epilepsia, Asociación Granadina de Diabetes y la Asociación Red Nacional de Infértiles.
Problema de suministros
Varias asociaciones de diabéticos han avisado de la compleja situación en la que se encuentran los pacientes. La falta de fármacos no es un contratiempo nuevo. Desde hace años, pacientes y sanitarios vienen informando de las vicisitudes ante la búsqueda de determinados medicamentos. Sin embargo, en los últimos meses, los diabéticos han notado que la situación se ha agravado.
Desde el pasado octubre, la Agencia Española de Medicamentos informó sobre problemas de suministros de Ozempic, medicamento utilizado para mejorar el control glucémico en el tratamiento de adultos con diabetes tipo 2. La AEMPS anunció que parte de la dificultad surgía tras un aumento considerable de demanda de algunos medicamentos de este tipo.
Entre los fármacos más afectados también se encuentran: Fiasp, Trulicity, Victoza, Vokanamet y Glucagen. Además, según indica Martín Lázaro, el Centro de Información online de Medicamentos Autorizados no muestra una fecha prevista de finalización de la escasez, o se proyecta para finales de 2024. Esta información genera una incertidumbre preocupante para los pacientes que necesitan este tratamiento frecuentemente.
«En este contexto, los diabéticos están obligados a ser muy previsores. Las consecuencias de no disponer de la medicación apropiada son potencialmente peligrosas», asegura a THE OBJECTIVE un sanitario del Hospital Virgen del Rocío.
Una tendencia de alto riesgo
Tras las últimas noticias en torno a medicamentos relacionados con el tratamiento de sobrepeso, las redes sociales se han inundado de usuarios recomendando algunos fármacos para bajar peso. Entre ellos, se encuentra el Ozempic.
El Ozempic, además de aumentar la cantidad de insulina liberada por el páncreas, disminuye la velocidad en la que los alimentos salen del estómago, ayudando a reducir la cantidad de azúcar liberada por el hígado. El medicamento quema rápidamente hidratos de carbono. Este efecto ha propiciado que cientos de usuarios en redes sociales recomienden el Ozempic como una manera «fácil y rápida de perder peso».
Durante el año 2023 diferentes celebridades formaron parte de esta nueva moda, predicando los efectos adelgazantes de los medicamentos para diabéticos: «Muchos pacientes con problemas de sobrepeso empezaron a solicitar a sus médicos este tratamiento. Esto causó un aumento excesivo de la demanda de este medicamento que los diabéticos lo han sentido de forma más acuciante», apostilla Martín Lázaro, cofundador de LUDA Partners.
Un vídeo en TikTok muestra a una joven explicar «cómo perdió 20 kilos con Ozempic». Con más de 20.000 likes, la chica exhibe su transformación física e incluso explica cómo se debe suministrar el producto.
Varios médicos se han pronunciado sobre las graves consecuencias que esta nueva tendencia puede acarrear. Un reciente estudio asumió un incremento en el riesgo de problemas gastrointestinales al utilizar los populares fármacos para adelgazar. Los efectos secundarios a largo plazo todavía se desconocen con exactitud, pero los primeros análisis ya apuntan a unas secuelas bastante contundentes.
«Estos fármacos están destinados a tratar la diabetes y, como cualquier medicamento, tienen efectos secundarios. Utilizarlos para fines no aprobados puede acarrear riesgos para la salud», concluye Martín Lázaro.
Ozempic necesita prescripción médica para ser recetado. Sin embargo, según ha podido conocer THE OBJECTIVE, el fármaco ha llegado al mercado negro con precios superiores a los cien euros. Los expertos denuncian la amenaza que supone para la salud la automedicación sin ningún tipo de control médico.