García-Gallardo alertará en Bruselas del «hartazgo» del sector del campo
Juan García-Gallardo ha señalado que «no puede haber economía verde con números rojos»
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, y a su vez líder de la formación Vox en la comunidad, Juan García-Gallardo, ha visitado la fábrica de la cooperativa soriana Copiso, una de las diez más importantes de España, y en la visita, además de ensalzar el modelo cooperativo, ha señalado los graves problemas a los que se tiene que enfrentar el sector primario por las imposiciones que vienen de Europa, según la información a la que hemos tenido acceso en THE OBJECTIVE.
García-Gallardo ha anunciado que en breve viajará a Bruselas con el objetivo de trasladar a Bruselas el «hartazgo» de los agricultores y ganaderos por las imposiciones europeas, una situación que se agrava día a día y que han detectado de forma evidente en el Gobierno de Castilla y León, a la vez que pretenden dar una solución integral.
García-Gallardo ha señalado que «los agricultores y ganaderos de Castilla y León, como los de España y Europa, están hartos de las imposiciones europeas» que, a juicio del vicepresidente, «les impiden desarrollar con normalidad sus negocios».
Viaje a Bruselas
García-Gallardo asistirá al plenario del Comité de las Regiones los días 31 de enero y 1 de febrero, para participar precisamente en un debate sobre las políticas medioambientales.
En el foro de Bruselas expondrá su convicción de que «no puede haber economía verde con números rojos». Igualmente ha insistido en la idea de que la sostenibilidad medioambiental «es importante, pero lo es todavía más la sostenibilidad económica y social» que es, a su juicio, lo que los «excesos regulatorios» europeos ponen en riesgo.
Copiso
Copiso, la empresa cuyas instalaciones ha visitado ayer el vicepresidente de la Junta, concentra buena parte de los agricultores y ganaderos de la provincia de Soria.
Es una de las diez cooperativas más importantes de España, y es también cabeza del sector en Castilla y León, motivo por el que fue presentada por García-Gallardo como ejemplo de un modelo que apoya el gobierno autonómico «por su eficacia y su beneficio social».