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Castilla y León

Mañueco a Tudanca: «¿Qué se siente al recibir una buena dosis de sanchismo?»

La tensión entre el PSOE de Castilla y León y Ferraz abre la puerta a unas primarias «desgarradoras» en la formación

Mañueco a Tudanca: «¿Qué se siente al recibir una buena dosis de sanchismo?»

Mañueco y Tudanca en la Junta de Castilla y león | El Día de Soria

La tensión estalló de forma evidente entre Ferraz y el PSOE de Castilla y León desde el mismo momento en el que Tudanca anunció su intención de celebrar primarias en la formación antes de que tuviera lugar el congreso que revalide el liderazgo de Pedro Sánchez, algo que hizo saltar todas las alarmas en la formación y que obligó a anular dichas primarias.

El enfrentamiento surgió por la interpretación de las normas del congreso del partido y las fechas para renovar la dirección autonómica, como informamos en THE OBJECTIVE el pasado viernes.

Pleno en las Cortes

La crisis que sacude al PSOE de Castilla y León se coló, como era previsible, en el debate político del pleno de las Cortes esta semana.

El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, aprovechó su cara a cara con el secretario general socialista, Luis Tudanca, para preguntarle cómo se sentía al haber experimentado en carne propia una buena dosis de «sanchismo».

Mañueco continuó señalando: «¿Usted, que es el secretario general más fiel, más obediente, más sumiso y más dócil a Sánchez?» Estas palabras provocaron una reacción de Tudanca, quien ocupó su escaño con una expresión tensa, visiblemente afectado por la presión en su propia bancada.

Este intercambio reveló la creciente división y el malestar que permea en el PSOE de la comunidad, así como la habilidad de Mañueco para capitalizar la crisis en su beneficio político, recordando que Tudanca fue el único barón socialista que apoyó la llegada de Pedro Sánchez a Ferraz durante las convulsas primarias que llevaron a Sánchez a liderar el partido en 2018.

Argumento de Tudanca

El Comité Autonómico de Castilla y León aprobó un calendario acelerado el pasado jueves, en medio de críticas internas, con 105 votos a favor y 14 en contra. Sin embargo, un día después, el Comité de Ética y Garantías del PSOE anuló esa decisión, lo que llevó el enfrentamiento entre la dirección autonómica y la federal a niveles sin precedentes.

Desde Castilla y León, la formación, todavía liderada por Luis Tudanca, argumentó que «el procedimiento seguido fue exactamente el mismo que en 2021, cuando no hubo problemas». En esta ocasión, el criterio jurídico de Ferraz establece que, aunque la normativa puede interpretarse, debe respetarse el orden congresual y las normativas internas de manera consecutiva.

Este choque de interpretaciones dejó al partido en una situación complicada, donde las diferencias en la aplicación de las normas amenazan con profundizar la división entre las distintas facciones.

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