Arza (PP): «La dirección se ha dedicado a boicotear a Alejandro Fernández como a Ayuso»

Juan Arza es militante del PP, aunque recientemente se ha dejado ver en eventos de Valents, el nuevo partido liderado por Eva Parera. Arza, además, fue uno de los rostros más visibles de la junta directiva de Societat Civil Catalana en los años más álgidos del procés independentista. Ya en esas fechas se opuso al Gobierno de Mariano Rajoy por su «pasividad» con Cataluña y dimitió de su cargo como jefe de estudios de la formación. Ahora, y pese a haber apoyado a Pablo Casado en el proceso de primarias que celebró el partido, afirma estar desencantado con el líder ‘popular’.

Pregunta. Usted pasó de ser jefe de estudios del PP en Cataluña a militante raso. ¿Por qué?

Respuesta. Me sentí defraudado por la pésima gestión que el Gobierno hizo del 1-O y del procés independentista en general. No se actuó con la rapidez, la contundencia y la inteligencia necesaria. Se permitió que el separatismo se hiciera fuerte, pusiera al Estado contra las cuerdas y llevara a la sociedad al borde del enfrentamiento civil. Dimití para demostrar mi desacuerdo con esa gestión, con la ingenua creencia de que otros me seguirían en la protesta y de que algo cambiaría. 

En 2017 ya criticó el «inmovilismo» de Rajoy con Cataluña.

El desafío independentista es la amenaza más grave que ha vivido nuestra democracia desde el 23F. Exigía una estrategia y una acción coordinada en el plano institucional, social, diplomático y sobre todo mediático. La pasividad del Gobierno de Rajoy fue inexplicable. Siempre fue a remolque de los acontecimientos, apelando en vano al cumplimiento de la ley. La ‘operación Cataluña’ pilotada por Soraya Sáenz de Santamaría fue el colmo: un intento ridículo de negociar con los separatistas, traicionando a los que luchábamos contra sus abusos. 

Usted fue de los que apoyó a Casado precisamente por el inmovilismo de Rajoy con Cataluña. ¿Le ha decepcionado? ¿Su entrevista en Rac1 perjudicó a Alejandro Fernández? 

La elección de Casado representó una gran esperanza para los que queríamos un partido que recuperara sus mejores valores, que lamentablemente se ha visto frustrada. Toda la campaña del PP en las últimas elecciones autonómicas fue un caos, que demostró la división, la desconfianza y descoordinación dentro del partido. La entrevista de Casado en un medio independentista, dejando algunos mensajes equívocos, despertó en muchos sectores el miedo a que volviera el «PP del Majestic», el de las componendas con el nacionalismo. Eso perjudicó a Alejandro Fernández, evidentemente.

«Alejandro Fernández es una buena persona, pero debe demostrar más coraje y voluntad real de cambio»

¿Cómo ve a Alejandro Fernández como líder del PP? ¿Cree que le pueden hacer lo mismo que a Ayuso?

La dirección nacional se ha dedicado a boicotear a Alejandro Fernández, recurriendo a otros dirigentes catalanes que se han prestado a ese juego. Si no le habían cortado la cabeza todavía es porque no tenían claro el recambio y porque estaban ocupados en otras guerras. 

Después de la crisis de estos días, Fernández tiene más probabilidades de sobrevivir. Él es una buena persona, tiene una gran preparación intelectual y es un orador brillante. Pero debe demostrar más coraje y voluntad real de cambio. No se puede limitar a esperar, confiando en que ya vendrán tiempos mejores. En Cataluña los constitucionalistas necesitamos una estrategia y una organización nueva, que recurra al talento de la sociedad civil y que no esté condicionada por intereses partidistas.

¿Dará el paso a Valents? Usted también era crítico con que el PP catalán se dirigiera desde Madrid.

Después de lo ocurrido en los últimos años he llegado a la conclusión de que los catalanes constitucionalistas necesitamos poder político real, representantes que influyan en las instituciones y que solo respondan ante nosotros, que no se sometan a los intereses y componendas de la política nacional. Ciudadanos pudo haber representado esa idea, pero se embarcó en una aventura a nivel nacional y sus líderes abandonaron Cataluña para hacer carrera en Madrid. 

El proyecto de Valents me convence porque se ha comprometido a no abandonar a los catalanes ni utilizarlos como moneda de cambio. Porque apuesta por la unión del constitucionalismo, no por su división partidista. Y porque ha conseguido reunir a un grupo de personas de mucho talento, sin hipotecas ni cargas del pasado. 

¿Cómo ve el futuro del PP en regiones como Cataluña y el País Vasco? 

La situación es grave no solo para el PP sino para el constitucionalismo en general. Los grandes partidos nacionales han ido perdiendo terreno y algunos parecen resignados a desaparecer. Se diría que sus dirigentes solo aspiran a salir de esas regiones y a mudarse a Madrid, en donde viven más tranquilos. Pero todavía estamos a tiempo de cambiar las cosas si apostamos por la unidad y si nos ponemos manos a la obra, aprovechando el enorme talento que hay en la sociedad civil y la solidaridad de nuestros compatriotas del resto de España. 

Vox logró superar al PP en las elecciones al Parlament. ¿Hay que pactar con Vox?

No comparto ni el fondo ni las formas de Vox. Creo que hacen populismo: tienen la virtud de señalar problemas reales como la inmigración o el desbarajuste autonómico, pero proponen soluciones simplistas e irrealizables. Coquetean con el antieuropeísmo, abusan del nacionalismo español, y utilizan la demagogia para provocar y polarizar. Ahora bien, sigue siendo un partido democrático que hasta ahora ha demostrado respeto por las reglas de juego. Jamás lo compararía con partidos que acogen terroristas en sus filas o que han organizado un golpe de Estado. Me repugna la idea de hacerles un cordón sanitario. 

«Vox coquetea con el antieuropeísmo y abusa del nacionalismo español»

¿Hay espacio para Valents?

¡Por supuesto! Un espacio enorme que partidos como Vox o el PSC no representan bien, y que el hundimiento de Ciudadanos y PP ha dejado huérfano. Estamos hablando de cientos de miles de electores de centro, moderados, liberales o conservadores que se sienten catalanes y españoles. Aspiramos a romper con la resignación y la desmovilización, a ser determinantes en muchos ayuntamientos, en el Parlament y a contribuir a desalojar a la coalición Frankenstein de La Moncloa. 

Para los que dudan. ¿Cuál es la diferencia entre Valents y Centrem?

Son dos proyectos que no tienen nada que ver. Todavía no está claro qué es Centrem, pero todo indica que se trata de un intento de resucitar a Convergència. Es un proyecto lleno de independentistas que se avergüenzan del procés. Valents no oculta a independentistas en sus filas, no quiere resucitar un catalanismo que ha degenerado en separatismo, abominamos de la equidistancia y no queremos volver al statu quo nacionalista. 

¿Álvarez de Toledo sería un activo para Valents? Otros de sus fieles, como Añó o López Alegre, parece que ya han dado el paso…

Álvarez de Toledo es una persona inteligente, cultísima y valiente. Figuras como ella son necesarias en la sociedad española, pero no sé qué desea hacer en el futuro y no tengo claro que su lugar sea la política partidista.