Garzón ve la amnistía como «un primer paso para desenquistar» el conflicto catalán
El líder de IU cree que sólo hay dos opciones políticas estos meses: un Gobierno de coalición o repetición electoral
El coordinador general de Izquierda Unida y ministro de Consumo en funciones, Alberto Garzón, pide al bloque de la izquierda «acometer las reformas necesarias» para adecuar el Estado a la plurinacionalidad. Además, considera que la amnistía «puede ser un primer paso para desenquistar» el conflicto en Cataluña.
Así consta en el borrador del informe político que dará a conocer esta tarde ante la Coordinadora Federal de partido. En él que destaca que el independentismo catalán «será determinante» en el nuevo tablero político de España «más allá de la cuestión institucional» y pese al «duro revés» que sufrió en las urnas.
«Más allá de la cuestión institucional, ha llegado el momento de asumir los grandes retos de país y acometer las reformas necesarias para adecuar en última instancia el Estado a la realidad política, social y cultural de nuestro país», según Garzón. Vaticina una respuesta «furibunda» del bloque de la derecha a estas reformas y pone como ejemplo la reacción de los diputados de Vox y PP en el Congreso en la pasada sesión durante el uso de las lenguas cooficiales del Estado: «Pero no debemos tener miedo», zanja.
Por ello, subraya el líder de Izquierda Unida la idea de que es necesario «alterar la selectividad estratégica del Estado» para acabar con las tendencias e inercias que «hacen que los conflictos políticos se resuelvan de forma natural casi siempre a favor de los intereses de las oligarquías».
Cree Garzón que solo hay dos alternativas «plausibles» en el nuevo escenario político en los próximos meses. O bien un Gobierno de coalición, que sirva para mejorar la vida de la clase trabajadora y las posiciones de la izquierda, o una nueva convocatoria de elecciones generales.
«Un acuerdo de gran coalición no es posible mientras opere la lógica de polarización ideológica entre bloques y la investidura de Feijóo está condenada al fracaso», descarta Garzón. Asimismo, enmarca «la plurinacionalidad en una visión republicana y nítidamente federal» que esté ligada a lo social y, por ello, argumenta que «la cuestión territorial y la social deben ir de la mano» para que «todos los territorios avancen juntos» y «ninguno se quede atrás».