El PNV avisa que su voto «va a ser muy caro» cuando «empiecen a cortejarle»
El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha advertido a quienes quieren «mudito y modosito» al Partido Nacionalista Vasco hasta el 24 de julio, de que su voto «va a ser muy caro» cuando le empiecen «a cortejar» y, tras «fijar posiciones», ha aclarado que con Vox no tienen «nada de que hablar» y «con quien se apoye en Vox, tampoco».
Además, ha lamentado la «política industrial» con la que le «ha tocado bregar y defender con uñas y dientes ante el actual Gobierno» y, tras afirmar que si el PNV «no hubiera estado presente en Madrid esta legislatura, miles de empresas vascas habrían cerrado» por los efectos de las «políticas erróneas», ha advertido de que no olvidarán que «fue la desidia de los socialistas la que puso la puntilla» a la industria vasca.
Durante un acto electoral en la localidad vizcaína de Sestao, que ha iniciado mostrándose orgulloso por el trabajo desarrollado por el PNV para que el Tour empezara en País Vasco, con la «guinda» del triunfo de etapa de hoy de Pello Bilbao, el líder jeltzale ha alertado contra quienes quieren hacer creer que el 23 de julio será «como en la película ‘Duelo al sol’, entre Sánchez y Feijóo».
A su juicio, eso es «una mentira y un gran fraude, como el debate de ayer», en el que «ni uno ni otro mencionaron la palabra ‘Euskadi’» y cuando lo hicieron, fue «para atacarse». «Nos usaron como armas», ha añadido.
El presidente del PNV ha asegurado que vio el debate entre Sánchez y Feijóo «más por responsabilidad que por interés» porque, además de que «Euskadi y sus intereses no salieron para nada entre los temas de discusión», la mayor parte del tiempo «estuvieron hablando de quiénes han sido, de quiénes hemos sido, socios de uno y de con quién va a pactar el otro si lo necesita para llegar a la Moncloa».
«O sea, que aquí uno de los ejes principales de lo que viene es con quién pueden pactar cada uno de ellos, pero los que estamos llamados a ser quienes demos o quitemos mayorías absolutas, no estuvimos presentes en el debate», ha lamentado.
A su juicio, al PNV le quieren «mudito y modosito» hasta el día 24 de julio y, «entonces, con la calculadora en la mano, Sánchez o Feijóo, Feijóo o Sánchez, o los dos, nos empezarán a cortejar a unos o a otros para conseguir nuestros votos». «Pero ahora no. Ahora calladitos, ausentes, partidos de segunda. Pues no, ¡nos rebelamos!», ha exclamado.
Para Ortuzar, esta forma de actuar es «un fraude a la democracia y a la igualdad de oportunidades» porque «se aprovechan de una situación de privilegio, de fuerza, para dejarnos sin voz y sin altavoz».
En este punto, ha advertido de que «el voto del PNV va a estar muy caro» cuando «con toda la cara del mundo» lo pidan, «si es que es necesario». En todo caso, ha aseverado que «quien quiera hablar» con su formación, «tendrá que ser sobre la base de tres principios irrenunciables: el respeto más absoluto al autogobierno vasco; el respeto más absoluto a los principios democráticos y a los derechos de las personas; y el respeto más absoluto a las demandas mayoritarias de la ciudadanía vasca».
Según el líder de la formación jeltzale, «sin esos tres elementos, no habrá nada de qué hablar con el PNV». «O, lo que es lo mismo, con Vox no tenemos nada de que hablar, y con quien se apoye en Vox, tampoco. Tampoco. Así de claro y así de rotundo», ha subrayado.
Ortuzar ha reiterado que «ni por acción ni por omisión» el PNV va a «blanquear a la ultraderecha española». «Ni por acción ni por omisión nuestra la ultraderecha española va a tener un milímetro de espacio. ¡Vox y nosotros somos antónimos!», ha advertido.
Por otro lado, ha aludido a País Vasco y a la Margen Izquierda, a la que pertenece Sestao, que fue «el corazón productivo del país». Tras citar a empresas como Altos Hornos, La Naval, Babcock, General Eléctrica o Westinghouse, «que daban trabajo a miles de trabajadores», ha reconocido que «hoy apenas queda nada de aquellos gigantes que tuvieron pies de barro».
Ha responsabilizado de esta situación a la apertura de las fronteras, pero también a «la desidia y una falta de interés del Gobierno central español» y ha recordado la frase del exministro socialista Carlos Solchaga, que afirmó que «la mejor política industrial es la que no existe». «Fue la desidia de los socialistas la que puso la puntilla a nuestra industria. No se nos debe olvidar aquello», ha instado.
Por ello, ha afirmado que «la mejor política industrial es la que existe» y «llevan décadas liderando» las instituciones vascas, de forma que «con el tema de los Fondos Europeos ha sido puesta como ejemplo no sólo en Madrid, sino también en Bruselas».
«Una política industrial por la que nos ha tocado bregar y defender con uñas y dientes ante el actual Gobierno y en la negociación
de las medidas que han sido llevadas al Congreso de los Diputados. Si el PNV no hubiera estado presente en Madrid esta legislatura, miles de empresas vascas habrían cerrado por los efectos de políticas erróneas que este Gobierno quería poner en vigor», ha resaltado.
Frente al «cerrojazo que querían dar a todo durante la pandemia, o de la desidia y falta de acción que tuvieron cuando la energía se puso por las nubes y hacía imposible trabajar a nuestra siderurgia», ha valorado que fue el PNV el que «les obligó a cambiar el paso». «Luego, en privado, nos han reconocido que menos mal que estuvimos allí presionando porque, si no, no ya en Euskadi sino en todo el Estado las consecuencias habrían sido letales para la economía», ha dicho.
Esteban: el PNV está «harto»
Por su parte, Aitor Esteban ha asegurado que el PNV está «harto» también de que «se utilice la política como un ariete con el que derribar al adversario».
A su juicio, los jeltzales hacen «frente a la involución democrática, así como a los populismos y a la demagogia de uno y otro signo», porque «la fortaleza del PNV es el diálogo, el decir las verdades de frente, desenmascarando a quienes utilizan la demagogia y el populismo para seducir con su radicalismo extremo para ir en contra de la igualdad».
Del mismo modo, ha apuntado que el PNV «quiere seguir siendo la voz de Euskadi en Madrid, una voz nítida, sin dobleces, siempre dispuesta al diálogo y capaz de llegar a acuerdos en beneficio de todos y, fundamentalmente, de la ciudadanía vasca».
Por otra parte, ha advertido de que el presidente del PP y candidato a la Moncloa, Alberto Núñez Feijóo «ha rebasado todas las líneas pactando e introduciendo a la ultraderecha en las instituciones». «Ha hecho lo que ningún otro líder de la derecha europea. Con tal de alcanzar el poder, si lo necesita, normalizará a Vox», ha lamentado, a la vez que ha advertido de que «el riesgo de involución es enorme». «Y nosotros decimos no a la involución», ha aclarado.
Asimismo, ha lamentado que el debate de Sánchez y Núñez Feijóo ha generado «tanto ruido» que «han vuelto a pervertir el sentido de las elecciones». «Quieren hacer pensar a la gente que en estas elecciones se juega el futuro de España. Que solo hay dos alternativas: la de Guatemala y la de Guatepeor. Pero no. Ni son elecciones presidenciales ni solo juegan ellos», ha constatado.
Por ello, se ha mostrado convencido de que «aquí no está en juego ni Sánchez ni Feijóo» por que «si de ellos dependiera» País Vasco caminaría «hacia atrás, hacia la centralidad, hacia el recorte del autogobierno, unos escondiéndolo en un federalismo jacobino, y los otros en el retorno a las esencias de la España una, grande y libre».
Aitor Estaban ha advertido de que «ante esa dualidad, en esa polarización, de Guatemala o Guatepeor», el PNV «no se rendirá
ante nadie» porque «no es muleta de nadie ni depende de nadie».