MyTO
Política

Pedro Sánchez baraja sustituir a los portavoces del PSOE tras la cumbre de la OTAN

El PSOE busca nuevos portavoces «con peso político» y más visibilidad de los barones territoriales. Muchos miran a Fernández Vara

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, interviene en una sesión de control. | Europa Press

Hechos, no palabras. La hiperactividad es la única forma de eclipsar la ausencia de autocrítica tras la debacle del 19-J y ésta no sólo afecta al Gobierno sino (y principalmente) al partido. Fuentes socialistas adelantan a THE OBJECTIVE la inminencia de una remodelación que el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, está a punto de acometer en la Ejecutiva socialista y los portavoces parlamentarios. Según estas fuentes, se trataría de abordar la sustitución de todos los perfiles comunicativos del partido, empezando por el portavoz de la Ejecutiva, Felipe Sicilia, y concluyendo con cambios en los grupos parlamentarios, con la sustitución de los portavoces de Congreso y Senado, Héctor Gómez y Eva Granados.

El pasado lunes el presidente ya dejó entrever la inminencia de esta remodelación en la reunión de la Ejecutiva Federal donde, según fuentes presenciales, Sánchez puso el foco en los errores de «comunicación» de los portavoces que comparecen semanalmente en el partido y en las Cortes Generales. No se verbalizó la necesidad de un cambio de portavoces, aunque tampoco quedó lugar para la duda. 

«Ferraz no está funcionando»

A sumar otro argumento: «Ferraz no está funcionando» y el presidente está «harto de la batallita entre Adriana Lastra y Santos Cerdán». Un enfrentamiento que arrastran desde hace meses, mucho antes de ser nombrados como vicesecretaria general y secretario de Organización del PSOE en el 40 Congreso de octubre en Valencia. «No te extrañe volver a ver a Antonio Hernando u Óscar López por el PSOE», añaden fuentes socialistas a THE OBJECTIVE, conscientes de que Pedro Sánchez ha dicho basta porque el partido no está sirviendo de altavoz de la acción del Gobierno, sino de lastre.

Fuentes socialistas explican también que en el diagnóstico de Pedro Sánchez se suma un alejamiento de la dirección con la calle y, más concretamente, con los territorios. Motivo por el cual pretenden dotar de mayor visibilidad a los barones del partido, cuya marca y prestigio están muy por encima en estos momentos de la marca PSOE, e incluso del tirón del propio Pedro Sánchez. Se habla de dotar de una portavocía al hombre «más querido y respetado por el partido», el extremeño Guillermo Fernández Vara. No es casual en esto la ausencia de crítica del barón castellano-manchego, Emiliano García-Page, de viaje oficial fuera de España, y a quien todavía no se le ha escuchado su valoración del 19-J.

«Bronca en la Ejecutiva»

Una reunión tensa en la que el presidente Sánchez no estuvo «triste», como explicaron con eufemismos algunos de los presentes, sino «muy cabreado», como se plasmó en los rictus serios del posado ante las cámaras. «Nuestra mayor autocrítica fueron las caras de la foto», explica un dirigente socialista tras relatar una acalorada reprimenda del secretario general ante la que medió la presidenta del PSOE, Cristina Narbona, para templar los ánimos. En el debate se expusieron dos posturas: quienes se sumían en el análisis depresivo de los resultados y los más beligerantes que precisaban de medidas que «nos permitan pasar página».

Cristina Narbona y Pedro Sanchez en un momento de la Ejecutiva el pasado lunes.

Y hubo «bronca» de Sánchez a la dirección federal por los claros fallos en la estrategia comunicativa tras la noche electoral de la derrota andaluza, cuando la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, compareció con nula autocrítica para negar la evidencia de la derrota y culpar a factores externos y ajenos al partido socialista. 

La intervención de Lastra «fue una monumental metedura de pata» que cabreó al presidente y otros miembros del Gobierno porque «nos sitúa de espaldas a la realidad». Y de ahí que la primera cabeza política que se cobrará el presidente será la del pupilo de Lastra, Felipe Sicilia, según las fuentes consultadas. Un primer movimiento al que seguirán otros que exigen de una nueva reunión de la Ejecutiva Socialista, aunque el calendario es complicado.

Tras la OTAN y antes del Debate de la Nación

El presidente del Gobierno se encuentra en Bruselas para asistir a la cumbre informal de líderes de la UE y el Consejo Europeo. No retornará hasta el viernes a última hora de la mañana, pero ha de ultimar los preparativos para el día siguiente. El sábado se celebra el Consejo de Ministros extraordinario para aprobar el segundo decreto de medidas derivadas de la guerra de Ucrania tras el que él mismo comparecerá en Moncloa, según adelantó THE OBJECTIVE. El lunes se celebrará otro Consejo de Ministros ordinario, por lo que no tendrá lugar la reunión de la dirección en Ferraz, 70.

Y el martes se inicia la cumbre de la OTAN, a cuya organización está absolutamente entregado el Gobierno. Así las cosas, la prometida celeridad en esta remodelación del PSOE sólo podría ejecutarse después de que se despeje el calendario internacional. Es decir, que el plan de remodelación tendrá lugar previsiblemente en la primera semana de julio a más tardar, «antes del Debate del Estado de la Nación» en el que tendría que estrenarse el nuevo portavoz. Una cita que se espera para la segunda semana de julio, los días 12, 13 y 14 del mes.

Fuentes socialistas reclaman movimientos, pero no sólo desde los territorios, sino también desde la propia dirección federal del PSOE, y apuntan a los actuales portavoces que «no han dado la talla desde el principio» y evidencian la «falta de peso político que hay ahora mismo en el partido». Entienden que «es inteligente porque se transmite la idea de que aquí no ha habido un fallo de gestión sino de comunicación. El Gobierno actúa pero no lo rentabiliza porque no llega al votante». Y eso es precisamente lo que está dispuesto a cambiar un presidente del Gobierno que no piensa dar tregua hasta que se ejecute un golpe de autoridad que vuelva a poner prietas las filas del PSOE. 

8 comentarios
  1. Caledonia

    Una nota histórica: Durante la II Guerra Mundial, los comandos británicos tenían controlada la rutina de Adolf Hitler. Resulta que en su lugar de retiro para descansar, de asesinar a millones, Había un momento, cuando Hitler salía a dar un paseo por los bosques de Bavaria, en el que no iba con escolta. ‘Lo temenos!’ Le decían los comandos a Churchill para que diera la orden, a pesar de que no tenían resulta cómo escapar. Creo que fue Eisenhower el que diría no tocarlo porque las decisiones de Hitler les eran favorables a los aliados para derrotar a Alemania. La operación se canceló.
    A mí me parece muy bien que Sánchez cambie a los portavoces y a todos los ministros si quiere.

  2. Quirosanu

    Esta claro que Pedro Sánchez no ha acertado con los portavoces. Ni Oscar Puente el desagradable Alcalde de Valladolid ni el sustituto el ínclito Sicilia están a la altura de lo que tiene que ser u portavoz serio de un partido que se dice serio. Yo no se que ha visto Pedro Sánchez en Adriana Lastra a quien conocemos muy bien en Asturias y que desde los 18 años vive de trepar por el partido y la UGT donde a las órdenes de Jose Angel Villa aprendió cómo vivir sin dar golpe. Su mala educación y encaramiento terminó de mostrarlo el domingo cuando compareció tras las Elecciones andaluzas cargando contra todos menos contra ellos mismos, no reconociendo ninguno de los errores que habían cometido ¿Cómo estará el personal que vuelven a sonar Óscar López que ya hizo de todo dentro del partido o Antonio Hernando del que nada se sabia desde que lo habían retirado de la portavocita en el Congreso?

  3. ToniPino

    Por favor, a Lastra que no me la toquen, que ya me quitaron a Carmen Calvo, Celáa y Ábalos.

Inicia sesión para comentar