Podemos y los socios del Gobierno cargan contra la nueva ley de secretos oficiales
Los morados se desmarcarían por segunda vez del rumbo de los socialistas en la coalición
Unidas Podemos no está conforme con el anteproyecto de ley de secretos oficiales, que aprobará el Consejo de Ministros esta tarde, y podría plantearse no apoyarla en la tramitación parlamentaria y descolgarse nuevamente de una ley del Gobierno de coalición. Así lo han asegurado a Efe fuentes de Unidas Podemos, que discrepan de esta ley que sustituirá a la legislación vigente, aprobada en abril de 1968, en pleno franquismo, y modificada en octubre de 1978.
La nueva norma incorporará cuatro categorías, fijará un mínimo de 50 años para guardar los «altos secretos» de Estado y otorgará la responsabilidad de la información clasificada al Ministerio de la Presidencia, que ahora recae en el de Defensa.
De hecho, el propio portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha mostrado vía Twitter el malestar que recorre el partido ‘morado’ con respecto a esta ley. En concreto, ha compartido una imagen de un titular de prensa que leía «El Gobierno plantea que los secretos oficiales puedan permanecer clasificados más de 50 años» y donde había tachado la expresión «el Gobierno» y la había sustituido por «el PSOE».
Podemos podría votar no por segunda vez
Aunque hay margen para la negociación entre los dos socios, esta nueva legislación podría desencadenar el enésimo choque en el Ejecutivo de coalición y además provocar que Unidas Podemos se desmarque por segunda vez de una ley del Gobierno, como hizo al abstenerse en la votación de la nueva ley audiovisual, el pasado 26 de mayo.
En este contexto de discrepancias entre ambos, sigue pendiente la reunión de la mesa de seguimiento del pacto de coalición de gobierno que solicitó la vicepresidenta, Yolanda Díaz, tras el choque por el aumento del gasto militar (un crédito extra de 1.000 millones de euros) el pasado 5 de julio.
Y sobre esta reunión, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una rueda de prensa en Tirana (Albania), ha subrayado su disposición a que ese encuentro se produzca, insistiendo en que el diálogo entre los socios «siempre es importante», pero sin concretar nada.
La primera y única convocatoria de esta mesa hasta ahora se produjo el pasado 25 de octubre para hablar sobre todo de la reforma laboral, que también hizo saltar las chispas entre ambos, sin llegar en ese momento a un acuerdo.
Descontento entre los socios de legislatura
Entre los socios clave del Gobierno durante esta legislatura, es decir, las formaciones nacionalistas, tampoco ha sentado demasiado bien este anteproyecto de ley, especialmente en PNV y EH Bildu. Estos últimos han pedido al Gobierno que rectifique el anteproyecto de ley de secretos oficiales, que aprobará este lunes el Consejo de Ministros, porque no cumple «con la palabra dada, ni responde a las demandas» del País Vasco.
Fuentes de esta formación política abertzale ha señalado que la nueva ley, propuesta por la parte socialista del Ejecutivo, no servirá para «conocer la verdad y buscar la justicia en los numerosos episodios que aún siguen bajo el manto de la impunidad».
Por ello, piden que rectifiquen y planteen una reforma que aborde lo ocurrido desde la transparencia, el reconocimiento y la verdad sobre «todos los casos de vulneración de derechos y libertades que conciernan al Estado español y a sus aparatos desde el franquismo hasta el día de hoy. La impunidad debe terminar». Para Bildu, «no es aceptable» que la nueva ley no toque los principales elementos de una ley franquista que mantendrá en secreto «todo aquello que atacó los derechos y libertades de miles de vascos».
En cuanto al PNV, los nacionalistas vascos creen que el anteproyecto de ley de secretos oficiales, que aprobará este lunes el Consejo de Ministros, llega «muy tarde», por lo que duda de que pueda entrar en vigor esta legislatura, y considera «exageradamente largos» y «decepcionantes» los plazos previstos para la desclasificación de documentos. Su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, ha recordado en unas declaraciones remitidas a los medios de comunicación que han pasado seis años desde que el PNV propusiera por primera vez reformar la ley de secretos oficiales de 1968.
Ha incidido en que es un anteproyecto de ley y, por tanto, «todavía tiene que pasar mucho tiempo hasta que en su caso se apruebe y surgen muchas dudas sobre si va a ser posible en esta legislatura». Por eso, en opinión del PNV, se deben acelerar los plazos para «no desperdiciar la oportunidad de actualizar una ley franquista y avanzar en una de las reformas estructurales que el Estado español tiene aún pendiente».
Por su parte, ERC ha preferido esperar a analizar el documento del Gobierno. «No podemos avanzar el sentido del voto, nunca lo hacemos y, en cualquier caso, tendremos que leer bien la propuesta de una ley que hasta el momento es totalmente anacrónica», han señalado fuentes del partido republicano.