Encuesta | ¿Debe dimitir Fernando Grande-Marlaska por la tragedia de Melilla?
El ministro del Interior es el señalado por la gestión de la crisis, en la que el Gobierno ha cambiado su versión a causa del alto número de muertos
El reloj corre para el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien cada día se ve un poco más atrapado por la gestión de la crisis migratoria en la valla de Melilla, en la que más de 20 inmigrantes perdieron la vida y más de 70 personas continúan en paradero desconocido. En esta situación, varios diputados han solicitado la dimisión del exjuez, investigado por la Justicia y señalado hasta por los propios miembros del Gobierno.
Las pesquisas que está llevando a cabo la Fiscalía ponen en un nuevo brete al socialista, en especial tras conocerse las sospechas del organismo, que apuntan a que desde Interior se han entregado vídeos manipulados o recortados sobre los hechos que no permiten conocer todo lo que sucedió aquel día. Para revertirlo, se ha elevado una nueva petición al Ministerio para que entregue todo el material íntegro, algo que el propio Marlaska ha negado que pueda hacerse al afirmar que ya se ha dado el disponible.
Día a día van surgiendo nuevas pruebas que desmontan las múltiples versiones dadas por el Gobierno acerca de estos hechos. Esta semana, un vídeo de la agencia Colpisa probaba que la Gendarmería de Marruecos había cruzado al lado español –algo negado por el ministro Marlaska-, que había inmigrantes muertos en territorio nacional –también negado– y que se ejerció la violencia contra los asaltantes -lo que el presidente desmintió a los pocos minutos de conocerse los hechos, hace cinco meses, tras alabar la actuación de la Guardia Civil y señaló lo «bien resuelto» que había quedado el asalto-.
Además, el documental publicado por la cadena BBC ha señalado otras cuestiones, como las dudas acerca de la gran cantidad de inmigrantes desaparecidos, el uso de la violencia por parte de las autoridades o la falta de atención médica a los heridos, quienes llegaron incluso a amontonarse unos sobre otros, algunos inertes y sin dar señales de vida en las imágenes que se han compartido.
Hoy, en THE OBJECTIVE, te contamos, además, que la última excusa elevada por Interior ha quedado también desmentida. En sus comparecencias, los responsables habían defendido la existencia de una especie de ‘zona gris’, un terreno en el que ninguno de los dos estados sería el responsable de lo que sucede en su interior, algo que los expertos desmienten.
En declaraciones a este diario, fuentes consultadas señalan que los hechos se dieron sin ninguna duda en terreno español, ya que el espacio de la valla en el que se dio la tragedia se encuentra bajo la soberanía de un estado, y ese es España.
Por el momento, Grande-Marlaska permanece en su puesto. Varios diputados han pedido la dimisión del ministro, aunque destaca que dentro del propio Ejecutivo comienzan a crecer las voces críticas con su gestión. La vicepresidenta del Gobierno Yolanda Díaz ha reclamado una investigación de lo sucedido para esclarecer la magnitud de la tragedia, algo que rompe la unidad mostrada en la coalición en esta materia durante los últimos cinco meses, donde el tema se ha venido olvidando, hasta ahora.
La posible marcha de las ministras Reyes Maroto y Carolina Darias para las candidaturas locales en las elecciones municipales de 2023 pueden propiciar un cambio de carteras en el Gobierno que, si la situación se mantiene, puede empujar a Marlaska fuera del Ejecutivo.