El PP lleva al Congreso su plan para despolitizar la renovación del Poder Judicial
La proposición de ley orgánica llevada por la oposición pretende que los jueces sean quienes se renueven entre ellos sin depender de los partidos
El Partido Popular ha presentado ante el Congreso de los Diputados una proposición de ley orgánica para despolitizar completamente la elección de los vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Entre los objetivos que los populares afirman perseguir con esta medida se encuentra «el fortalecimiento de la independencia judicial» a través de criterios «más rigurosos y transparentes».
THE OBJECTIVE ha tenido acceso al texto, registrado en el Congreso el pasado 30 de diciembre y que cuenta con la firma de la portavoz del partido, Cuca Gamarra. El plan del PP fue adelantado en exclusiva por este medio y forma parte del plan del presidente de la formación, Alberto Núñez Feijóo, para obligar a que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se posicione a favor o en contra de una medida de la que en campaña electoral de 2019 se mostraba -al menos ante los medios y en los debates- favorable a emprender.
El plan del PP pasa por cambiar el sistema de elección de los 12 vocales del Poder Judicial, que pasarían a ser seleccionados a través del voto directo de todos los jueces, que podrán seleccionar un máximo de seis candidatos en una lista abierta. Los seis más votados pasarían al Consejo.
Los jueces eligen a los jueces
La expectativa desde Génova 13 es que esta medida sirva para satisfacer a la Unión Europea, que desde hace varios meses reclama a España que cambie su sistema de elección para despolitizarlo. De esta forma, los miembros de la carrera judicial serían los encargados en exclusiva de este proceso, lo que podría evitar, entre otros casos, situaciones de jueces que marchan a la política y, al tiempo, regresan a las instituciones.
La propuesta de los populares también pone condiciones para los candidatos, ya que se darían tres categorías: dos vocales deberán ser obligatoriamente magistrados del Tribunal Supremo, otros tres deberían ser magistrados con antigüedad de más de 25 años y habría siete jueces o magistrados sin sujeción a antigüedad. Uno de los magistrados del TS sería el vicepresidente del órgano.
Para evitar que las asociaciones judiciales se repartan los candidatos, los populares proponen buscar «las medidas necesarias para garantizar la mayor proporcionalidad en la representación entre miembros asociados y no asociados de la carrera judicial» y que asegure la presencia equilibrada de hombres y mujeres.
Además, para evitar las idas y venidas desde la carrera judicial a la política y posterior retorno a los juzgados, el plan del PP incluye vetar a quienes hayan ostentado un cargo en un Gobierno de cualquier tipo, que no hayan sido diputados o que hayan ostentado una representación sindical en los últimos cinco años.
La proposición de los populares forma parte de las negociaciones emprendidas por el Gobierno, representado por el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños. Aunque ambas partes han estado cerca de alcanzar un pacto en varias ocasiones para zanjar las renovaciones de los jueces, finalmente se han roto en los últimos compases.