Pablo Iglesias tachará de «traidora» a Yolanda Díaz si apoya a los rivales de Podemos en mayo
Los ‘morados’ exigen a la ministra de Trabajo que se involucre en los territorios donde IU y Podemos concurren juntos y que no respalde a Más Madrid
Pablo Iglesias y la dirección de Podemos han avisado a Yolanda Díaz que no tolerarán medias tintas en las elecciones municipales y autonómicas de mayo. Los morados quieren que Díaz se involucre en los territorios donde Izquierda Unida y Podemos concurren juntos y que, sobre todo, no apoye a los afines a Íñigo Errejón en Madrid, Valencia y Canarias. Se trata de una línea roja decidida por la dirección de Podemos, según fuentes del mismo partido. Con ello advierten que preparan represalias: entre otras, lanzar una campaña en redes para tachar a la gallega de «traidora». Díaz deberá aclarar su postura antes de la campaña electoral de mayo.
Iglesias tiene en su diana a Mónica García, Joan Baldoví y Alberto Rodríguez. Cada uno por razones distintas, pero en general por desafiar a Podemos en tres territorios clave: Madrid, Valencia y las Islas Canarias. En esas comunidades autónomas, Podemos quiere evitar que los afines a Errejón se impongan al partido morado, lo que inevitablemente abriría la veda a un debate sobre el «fin de ciclo» de la formación fundada por Iglesias en 2014, tal y como mantienen en las conversaciones confidenciales los representantes de Yolanda Díaz.
Podemos ya ha avisado a sus militantes y a sus partidarios para que se preparen para una ofensiva por tierra, mar y aire en el caso de que Díaz no respete esa exigencia. La candidata de Sumar prefiere ponerse de perfil y esperar el batacazo de Podemos. Ello le permitiría decir que solo ella puede aglutinar lo que queda de la izquierda alternativa al PSOE en las generales. Se trata de un plan diseñado por los estrategas de Díaz, que adelantó THE OBJECTIVE en el pasado mes de septiembre.
Irene Montero, la alternativa
Pero, según Podemos, el proyecto de Yolanda Díaz estará destinado a fracasar si en unos tiempos razonables no aclara de qué lado está. Mientras tanto, los morados avisan de que Irene Montero está preparada para concurrir como «candidata» contra Díaz si la gallega se niega a negociar un planteamiento unitario y puestos destacados en sus listas.
El partido que ahora lideran Ione Belarra e Irene Montero, bajo la supervisión de Iglesias, está dispuesto a ir a por todas si Díaz no da garantías de su compromiso en las próximas elecciones de mayo. Iglesias lanzó un duro ataque contra la ministra de Trabajo en la última convención de Podemos (la llamada Universidad de Otoño) en el pasado mes de noviembre. Pidió «respeto» para su partido y amagó con acusarla de haber traicionado el mandato histórico de Podemos: garantizar la unidad de todas las siglas y sensibilidades de las izquierdas alternativas al PSOE. Yolanda Díaz contestó con fuerza y dijo que «no le debe nada a nadie».
La ministra de Igualdad, no obstante, tiene la capacidad de pugnar contra Díaz si hace falta, según sostienen en Podemos. La aludida ya habría dado su visto bueno, aunque Iglesias, tal y como desveló este diario, ha pedido «paciencia«. Nadie descarta, además, que otros pesos pesados del partido puedan volver para respaldarla.
La clepsidra de Iglesias
El ex secretario general lanzó antes de Navidad algo parecido a un ultimátum. Quiere que Díaz anuncie su candidatura para las generales a finales de enero, o como mucho en febrero. A partir de ese momento, Iglesias dará la vuelta a la clepsidra, que se vaciará antes de la campaña de las autonómicas de mayo. En ese momento, Díaz deberá aclarar su planteamiento: si mantiene un perfil bajo y no se involucra con las candidaturas conjuntas de IU y Podemos, los morados activarán una ofensiva para tacharla de «traidora».
El principal tablero en que Podemos quiere poner a prueba a Díaz es el madrileño. IU y Podemos han llegado a un acuerdo de candidatura tanto para el Ayuntamiento como para la Asamblea. Díaz no quiere involucrarse personalmente para no enojar a Mónica García. La portavoz de Más Madrid evaluó la posibilidad de llegar a un pacto con los de Díaz, pero miembros de su equipo lo desaconsejaron, como desveló THE OBJECTIVE.
Además de Madrid, Podemos considera como territorios clave la Comunidad Valenciana y Canarias. En Valencia, los de Iglesias avisan a Díaz que no tolerarán que respalde a Baldoví. Iglesias reprocha al portavoz de Compromís que respalde las voces que acusan al ex secretario general de hablar demasiado desde sus foros mediáticos. Con Alberto Rodríguez la herida es más personal. Iglesias le nombró secretario de Organización, pero después de su salida del Congreso el exdiputado canario se dio de baja de Podemos y fundó un nuevo partido de corte regionalista.
Ahora, sin embargo, Podemos considera que tanto García como Baldoví y Rodríguez están haciendo el juego de Íñigo Errejón. Y por eso no están dispuestos a perdonar cualquier paso en falso de Díaz que pueda ser interpretado como un respaldo a los actuales enemigos de la formación morada. Los últimos sondeos que apuntan a la necesidad de que Díaz se desprenda de Podemos forma parte, según los morados, de una campaña orquestada por medios conservadores para hundir para siempre el partido de Iglesias y Montero. Díaz ya está avisada, aseguran desde el frente morado.