Yolanda Díaz copia el 'método Redondo' para hacer olvidar el veto a Irene Montero
La lideresa de Sumar responde a los ataques de Podemos con un goteo de anuncios sobre sus candidatos y las primeras propuestas programáticas
La lideresa de Sumar, Yolanda Díaz, está emulando el método de Iván Redondo, el exgurú estratégico de Pedro Sánchez, para dejar en la estacada a Irene Montero y olvidar la polémica sobre su exclusión de las listas electorales. A falta de saber si Podemos concurrirá finalmente con Sumar a los comicios del 23 de julio (el plazo definitivo caduca a finales del próximo lunes), el equipo de campaña de Díaz está aprovechando cada día de precampaña para activar un lanzamiento de su candidatura que se parece mucho al método que estableció Redondo después de la victoria de Sánchez en la moción de censura a Mariano Rajoy de 2018.
Redondo decidió lanzar el nuevo gobierno de Sánchez con una campaña comunicativa muy eficaz que se distinguió por desvelar cada día un ministro diferente del nuevo consejo de gobierno del socialista. Eso implicó controlar la agenda pública durante días, generando expectación entre los medios de comunicación y la ciudadanía, y ofrecer así la imagen de un ejecutivo moderno e innovador. Díaz y Sumar están aplicando el mismo método desde la semana en la que firmaron un preacuerdo de coalición con Podemos.
Después del paso a un lado de Alberto Garzón y Ada Colau, Díaz empezó desglosando algunos nombres de su equipo de campaña como Ernest Urtasun, eurodiputado de Unidas Podemos, en cuota de los Comunes y muy conocido entre los verdes europeos. Después empezó el baile de los candidatos en las listas electorales y miembros destacados del partido: Agustín Santos Maraver, número dos por Madrid (lunes); la eurodiputada de Podemos, María Eugenia Rodríguez Palop, como coordinadora (martes); el economista de Comisiones Obreras, Carlos Martín Urriza (miércoles), y a continuación, Violeta Serga, Marta Lois y Verónica Barbero en diferentes listas electorales.
«Mirar hacia el futuro»
A la vez, Díaz ha empezado a desglosar algunos puntos de su programa electoral. La ministra de Trabajo ha empezado por defender una reforma fiscal que incluya el aumento de impuestos a las grandes corporaciones y la fijación de un impuesto «permanente» para las «grandes fortunas» (ideas, por otro lado, defendidas siempre por Podemos).
Mientras Díaz se dedicaba a explicar a la ciudadanía su equipo, entregando a los medios las primicias anunciadas pocos minutos después en las redes sociales, los morados seguían con su denuncia del veto a Irene Montero. Preguntada por este asunto, Díaz siempre ha preferido desviar el foco, intentando centrarlos en su proyecto: «España quiere que hablemos de sus problemas, lo demás no tiene interés».
Sobre el futuro electoral de Sumar quedan, no obstante, muchas dudas. En el Gobierno de Sánchez confían en que pueda dar el sorpasso a Vox y consolidarse como tercera fuerza para recoger escaños en provincias pequeñas e intermedias. La misión que Sánchez encomienda a Díaz consiste en recuperar al menos 500.000 votos del más de millón de papeletas perdidas por Unidas Podemos a lo largo de los últimos cuatro años, tal y como desveló este diario.
Sigue el veto a Montero
Sobre el arranque de su campaña electoral, fuentes socialistas elogian la puesta en escena de Sumar. «Lo está haciendo bien. Explica sus fichajes con paciencia y ha empezado a desglosar elementos del programa. Es un goteo de anuncios que dejan a Podemos y su denuncia de vetos anclados en el pasado. Está mirando hacia el futuro», sostienen.
Desde el frente de Sumar, por otro lado, mantienen su negativa a incluir a Montero en las listas. Es una orden que llega directamente desde Yolanda Díaz, quien está ignorando el órdago de Podemos. Para Díaz se trata de pasar página, lanzar un proyecto de futuro y dejar a los morados en la estacada.
El político italiano Giulio Andreotti lo dejaba claro: «El poder desgasta a quien no lo tiene». Y esto es exactamente lo que Díaz pretende hacer con un asalto al espacio político que antes controlaba el partido fundado por Pablo Iglesias. Ahora Podemos está más débil que nunca, y Díaz aspira a alcanzar una cuota parlamentaria suficiente para poder enterrar definitivamente a su exsocio.