Guiño de Erdogan a Sánchez en plena crisis en Oriente Próximo: quiere otro buque de Navantia
El presidente turco anuncia que cerrará en breve otro acuerdo con los astilleros españoles
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha movido pieza en el tablero geopolítico de Oriente Próximo cuando Israel y Hamás han entrado en su tercera semana de guerra. En un guiño al Gobierno español de Pedro Sánchez, este domingo anunció en su discurso con motivo del centenario de la fundación de la República turca que Ankara planea cerrar en breve un acuerdo con los astilleros públicos de Navantia para construir un segundo buque anfibio portaeronaves como el LHD Anadolu entregado el pasado mes de abril.
«Concluiremos otro acuerdo con los españoles y, con suerte, aumentaremos nuestros portaaviones a un segundo, trayendo una versión superior del Anadolu a nuestro país», proclamó Erdogan dando a entender que las negociaciones están muy avanzadas. Este barco de guerra es una copia del Juan Carlos I, el buque insignia de la Armada española, y del Adelaida y Canberra que Navantia ha entregado en los últimos años a Australia.
El hecho de que el presidente turco lo defina como un portaaviones no quiere decir realmente eso, pues no tiene capacidad en sus bodegas para transportar cazas de gran tamaño, aunque una versión mejorada de Anadolu significaría que Turquía se acerca mucho al selecto grupo de siete países -EEUU, China, Rusia, Reino Unido, Francia, Italia e India- que disponen de los colosos más grandes en alta mar.
Erdogan y Sánchez ya hablaron de este segundo encargo a Navantia en noviembre de 2021 cuando se celebró en Ankara la VII cumbre hispano-turca. El primero de los LHD entregados a Turquía en abril de este 2023 se construyó en los astilleros turcos con el diseño de Navantia, que cedió la transferencia de tecnología, equipos y asistencia técnica para su construcción en el país otomano, así como los motores, la turbina y el sistema integrado de control de plataforma, entre otros sistemas.
«El primer portaaviones no fue a gran escala. Así que hemos acordado la construcción de un (portaaviones) a gran escala», dijo Erdogan en la conferencia de prensa conjunta con Sánchez. «Y quizás, también alcanzaremos para un submarino. Hay tanto que podemos hacer en la industria de la defensa, incluidos los vehículos aéreos no tripulados armados y desarmados», añadió a renglón seguido el presidente de Turquía hace dos años.
El armamento del Anadolu fue suministrado finalmente por dos firmas turcas. En la operación de Navantia suscrita con la turca Sedef, que empezó en 2016, la compañía pública española se embolsó unos 140 millones de euros y una carga de trabajo para los astilleros de Ferrol y San Fernando cifrada en su momento en casi 900.000 horas.
La idea de un segundo buque anfibio ha sobrevolado los despachos oficiales turcos en los últimos años pero la caída de la lira turca y la devaluación de la moneda provocó que Ankara descartase inicialmente tal posibilidad. Queda la incógnita del embargo de armas que el Ejecutivo español anunció en octubre de 2019 contra Turquía por su intervención militar en Siria.
En aquel momento, el veto español tuvo una excepción de gran tamaño, el citado Anadolu, que se encontraba construido al 90%. Desde la empresa pública se subrayó que no se trataba propiamente dicho de un contrato de Navantia, sino de un astillero turco que estaba utilizando la tecnología española para llevar a cabo los trabajos de construcción. Por lo tanto, la decisión española de imponer aquel embargo a Turquía no paralizó los trabajos del hermano otomano del Juan Carlos I.