Los historiadores catalanes desmontan el relato independentista del acuerdo de PSOE y Junts
Reprenden que los socialistas hayan comprado un relato «manipulado y tergiversado» para investir a Sánchez
Pedro Sánchez, presidente del Gobierno. | Alejandra Svriz
Los historiadores catalanes también han salido a dar un golpe sobre la mesa tras leer el acuerdo firmado entre PSOE y Junts per Catalunya, en el que no solo se recoge la amnistía para los líderes del ‘procés’, sino que los socialistas hacen suyo el relato del independentismo sobre la historia de Cataluña y sobre los hechos acontecidos desde 2012, tras el rechazo del Constitucional a la sentencia del Estatut. La Asociación de Historiadors de Catalunya Antoni de Capmany denuncian el uso «uso presentista, manipulado y falso» ejercido por ambas formaciones con el objetivo de justificar su acuerdo.
El texto compartido por el Partido Socialista -del que ya han tenido que retractarse tras rechazar que, a pesar de lo firmado en negro sobre blanco, se vayan a realizar comisiones políticas para juzgar la labor de los jueces en el Congreso de los Diputados- recogía un relato sobre el supuesto conflicto histórico de España con Cataluña que remontan hasta los Decretos de Nueva Planta (1714), cuando -siempre según el texto firmado por el PSOE y Junts- «se abolieron las constituciones e instituciones seculares de Catalunya», tratando al territorio como un ente independiente a pesar de que nunca llegara a separarse a pesar de declararse en rebeldía.
Es por ello que el grupo ha decidido desmontar una a una las «manipulaciones» de ambos partidos políticos, utilizadas para justificar la firma del acuerdo de investidura de Pedro Sánchez. Recuerdan que la Guerra de Sucesión española fue un conflicto civil y dinástico en el que Cataluña no participó como un territorio independiente sino que se dio en el territorio nacional. Destacan, además, que el rey Felipe V juró y respetó las instituciones y leyes catalanas en 1702, siendo estos últimos quienes rompieron, unilateralmente y a través de las armas, el pacto en 1706. Tras la victoria del bando de Felipe V y sofocada la rebelión en 1714, según la ley el monarca tenía el derecho a gobernar la provincia como dispusiese.
Los historiadores destacan que, a pesar de la tergiversación del relato por los nacionalistas, los Decretos de Nueva Planta no abolieron el catalán y además supusieron un gran avance social y económico en la provincia, pues las anteriores eran feudales, oligárquicas e incluso racistas -«como se recoge en el Capitulo XVI de las Constituciones de 1706 donde se ordena la expulsión de los gitanos de Cataluña con penas de diez años de galeras para los varones adultos y de cien latigazos para mujeres y niños»- y que las normas durante la administración borbónica cortaron los dos siglos consecutivos de decadencia catalana e impulsaron el crecimiento demográfico y monetario de la región, en especial con los beneficios otorgados a Cataluña al convertirla en una de las grandes beneficiadas del comercio con América.
La asociación continúa con su lección al PSOE e insiste en que los otros acuerdos firmados con los nacionalistas vascos y catalanes -PNV, Bildu y Esquerra Republicana– están cimentados en una «historia tergiversada para justificar el pacto» de investidura de Sánchez.
Finalmente concluyen que la «manipulación, tergiversación, falseamiento y ocultación de la historia son los cimientos donde se ha construido y se construye el relato independentista catalán», por lo que el documento firmado por PSOE y Junts per Catalunya «busca justificar en el pasado un supuesto conflicto de España contra Cataluña perpetuado en el tiempo» solo para permitir que Sánchez siga en La Moncloa cuatro años más.
Puede leer el comunicado íntegro aquí
