Junts pone contra las cuerdas a Sánchez al pedir expulsar a los inmigrantes que reincidan
Junts pedirá una reforma del código penal y de la ley de enjuiciamiento criminal que reconozca la unicidad catalana
Junts per Catalunya, el partido de Carles Puigdemont, está preparando otra exigencia al Gobierno de Pedro Sánchez en el marco de la negociación sobre la amnistía y su apoyo al Ejecutivo socialista. Tal y como desveló este diario, los emisarios de Junts exigieron a los socialistas en su última reunión en Suiza entregar las competencias en materia de inmigración al ejecutivo regional. Junts es consciente que a nivel territorial existe malestar por los casos delictivos que involucran a inmigrantes. Para frenar la avanzada de la derecha más crítica con la inmigración, liderada por Aliança Catalana, Junts prepara una convención para definir su línea estratégica. Y según ha podido saber este diario, uno de los puntos clave será exigir a Sánchez una modificación del código penal que permita a Cataluña expulsar a los inmigrantes que reinciden en casos delictivos.
La dirección de Junts muestra sensibilidad con las peticiones que reciben desde sus alcaldías. El caso de Calella es, en este sentido, el más emblemático. Los regidores de la comarca catalana de la que pertenece Calella han enviado a Sánchez un escrito en el que piden la expulsión del territorio nacional de aquellos delincuentes sin papeles que reinciden. Según reconocen en el partido de Puigdemont, estos alcaldes han señalado a 11 migrantes que entran y salen de la cárcel, y que reinciden en sus historial delictivo.
Junts quiere convertir la cuestión migratoria y de la delincuencia en uno de sus caballos de batalla para las próximas elecciones autonómicas. Los de Puigdemont aspiran a recuperar votos gracias a la imposición de la amnistía a Sánchez, pero también quieren que se perciba su vuelta a la gestión, centrada esta vez en los temas de seguridad. Jordi Turull es el encargado de trasladar a la opinión pública los planteamientos de Junts. Además de Calella, en todo el Maresme se detecta un alarma entre los regidores por lo que en Junts califican de «multireincidencia».
Reforma del código penal
Junts exigirá a Pedro Sánchez una reforma del código penal, así como una reforma de la ley de enjuiciamiento criminal, y más recursos en los juzgados que llevan estos temas. Junts lamenta que los juicios tardan mucho tiempo en concluirse, y que ese retraso se convierte en numerosos casos de reincidencias. Además, el partido nacionalista catalán quiere que Sánchez reconozca la unicidad de esta comunidad autónoma, una con las tasas más altas de población migrante.
Las peticiones de Junts pueden, no obstante, convertirse en otro problema para los equilibrios de la mayoría de Sánchez. El líder socialista necesita para cada votación parlamentaria el apoyo unánime de todos los partidos nacionalistas, sean de derecha o de izquierda, además de Sumar y Podemos. De ahí que abordar cuestiones como el endurecimiento del código penal para expulsar a migrantes puede derivar en un choque político en el Congreso.
ERC y también Sumar y Podemos difícilmente asumirán un enfoque punitivo de las leyes sobre migración. Pero Junts está decidido en seguir adelante, y buscar la manera para poner a Sánchez contra las cuerdas tanto en asuntos de gestión territorial local como de agenda nacionalista para la desconexión.
Frenar el auge de Sílvia Orriols
Junts necesita frenar el auge del partido de derecha catalanista que lidera Sílvia Orriols. Esta formación ha convertido el asunto migratorio en su gran eje político, y ha logrado en el ayuntamiento de Ripoll ganar las últimas elecciones municipales. Esta condición de «vasos comunicantes» entre Junts y Aliança Catalana ha obligado a Junts a redefinir su estrategia y, asimismo, a aprovechar ahora la debilidad de Sánchez para ampliar los márgenes de gobierno de la región.
Tal y como ya adelantó THE OBJECTIVE, el partido de Puigdemont celebrará en breve una convención interna para fijar posición sobre la inmigración. Cataluña es una de la regiones con mayor presión migratoria y un sector de Junts cree que su partido no puede seguir con el mismo discurso que ERC y la CUP en la materia. En especial, desde que partidos como Vox o la alcaldesa de Ripoll y líder de Aliança Catalana, Sílvia Orriols, están llevando a cabo una agresiva campaña en las zonas rurales de Cataluña contra la inmigración ilegal.