Moncloa celebra que la venganza de Iglesias contra Díaz entierra a Podemos: «Ha muerto»
Los socialistas auguran «el principio del fin de Podemos». En Sumar el enfado es «monumental»
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, este miércoles en el Senado. | Europa Press
Todavía dura la resaca de una de las votaciones más críticas de los últimos tiempos. Una de esas que, como la de la reforma laboral, dejan rastro y obligan a reflexionar y extraer conclusiones sobre sus consecuencias. En el fragor de la batalla, entre la euforia de la victoria, muy pocos socialistas eran capaces de redactar el «verdadero titular de la jornada: Podemos ha votado con la derecha y la ultraderecha. Hoy es el principio del fin», señalan a THE OBJECTIVE. La borrachera gubernamental por haber logrado salvar los muebles, al menos dos de tres, no dejaba lugar a la lucidez necesaria para reconocer que las dos victorias sobre los decretos del escudo social y la ley ómnibus no eliminaban la importancia ante el hecho de que el Gobierno haya cosechado su primera derrota a apenas 55 días después de ser investido Pedro Sánchez.
Pasada la resaca y reposados los hechos, el Gobierno recobró la fluidez argumental. Varios ministros salieron en tromba a cuestionar el comportamiento de Podemos, empezando por la todopoderosa vicepresidenta, María Jesús Montero. Esta última focalizó en Podemos su primer mensaje de la mañana del jueves. La también vicesecretaria general del PSOE mostró su perplejidad al respecto: «Yo creo que la votación por parte de Podemos no se entiende, porque lo que la mayoría de izquierda quiere es que se aumente la cobertura a personas desempleadas. Y esa reforma iba profundizando justo en eso, en hacer compatible el subsidio de desempleo con la ocupación a tiempo parcial. Con tristeza, asistimos a que este grupo político, votando con el PP y Vox, no expresa de forma clara cuáles son sus valores y sus ideologías».
«Podemos ha muerto y son conscientes»
Un mensaje contenido respecto a lo que en privado expresa el Gobierno sobre las consecuencias que para Podemos tendrá el haber sido responsable de tumbar al Ejecutivo en una de las políticas sociales que tanto dicen defender. Fuentes de Moncloa consultadas por este periódico denuncian sin piedad su «tiro en el pie» y las consecuencias que tendrá para su formación política haberse atrevido a dejar caer un paquete de medidas sociales. Concretamente, en materia de subsidios a los parados. «Podemos ha muerto y ellos están empezando a ser conscientes de ello», apunta un alto cargo. «No les ha salido bien la jugada».
Su estrategia parlamentaria pasaba por apoyarse en Junts para votar en contra del decreto del subsidio por desempleo, y que la unión en el voto en contra diluyera su responsabilidad de dejar caer al Gobierno, justificada en la negativa de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, a negociar con Podemos. Pero les salió mal. La diputada de Junts Isidre Gavín aseguró en los pasillos del Senado que votaría en contra de los tres decretos y Podemos se precipitó a mover ficha. Al filo de las 15.00 horas, la secretaria general, Ione Belarra, compareció ante los medios de comunicación para anunciar su voto en contra de la iniciativa, justificado en que «lamentablemente el Gobierno no se ha comprometido a retirar el recorte de las pensiones de las personas que cobran el subsidio para mayores de 52 años».
La jugada frustrada de Belarra
El inesperado giro de guion que aconteció horas después, tras conocerse que Junts salvaba las votaciones del Ejecutivo no participando en la votación, dejó a Podemos colgado de la brocha. Algo que se traslució en los rictus serios de sus cinco diputados y colaboradores. «Están desencajados. Se han dado cuenta de que se han equivocado», explicaban entonces fuentes socialistas que hoy se ratifican por la tournée mediática de exdirigentes de Podemos como Pablo Iglesias o Irene Montero. «Ya está. Hala, ya han tenido su cuota de protagonismo. Lo han conseguido. Pero no va a durar. Todo el mundo sabe que esto agrandará la brecha con su electorado», como auguran en su desaparición en las próximas elecciones gallegas, vascas y europeas.
PSOE y Sumar coinciden en pronosticar que Podemos será extraparlamentario tras las elecciones a la Xunta de Galicia el próximo 18 de febrero. Podría ocurrir lo mismo en el País Vasco, donde los morados ganaron las elecciones generales de 2015, y se la juegan en las elecciones europeas el 9 de junio. «Ellos ya han trazado una ruta a las europeas y esto les perjudica. Quedan muy tocados. Si sacan un escaño, todavía sobreviven. Veremos», vaticinan estas fuentes a THE OBJECTIVE.
Sumar: «Jugar a los tronos con el pan de la gente»
Por eso, la consumación de su venganza contra la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, podría generar un efecto boomerang en sus ideólogos, porque según Sumar se ha visualizado una «jugada mezquina». Fuentes de la coalición de Díaz creen que los dirigentes de Podemos han actuado de forma «infantil» porque «han querido jugar su juego de tronos con el pan de mucha gente. Es terrible. Algunos se ponen ante un micrófono y se han olvidado por completo de lo que te trajo a la política», añaden, señalando veladamente al exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, quien este jueves fue entrevistado en RAC1.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, incluyó a Podemos en la estrategia de PP y Vox para tumbar al Gobierno: «La derecha, la ultraderecha y Podemos han recortado los derechos de los parados y las paradas españolas. Ayer, la derecha, la extrema derecha y Podemos han tumbado un decreto que ampliaba la protección del subsidio por desempleo a las mujeres trabajadoras transfronterizas. Han votado ‘no’ a un colectivo importante de trabajadores menores de 45 años sin cargas familiares que se quedan sin subsidio por desempleo. Han votado ‘no’ a que los trabajadores de la agricultura eventuales se queden sin subsidio por desempleo. Esto lo han hecho el PP, Vox y también Podemos. En definitiva, han dañado a nuestro país. Yo me debo a los trabajadores de nuestro país. Han recortado los derechos de los trabajadores y van a tener que rendir cuentas ante la ciudadanía».
«Enfado monumental» en Sumar
El enfado en Sumar es «monumental», según las fuentes consultadas, que desmienten los recortes en las cotizaciones de los parados mayores de 52 años. «Es un recorte falso, no hay recorte», como alegó Ione Belarra, quien «muestra un profundo desconocimiento de las matemáticas». El entorno de Díaz explica que, tras la subida del salario mínimo interprofesional (SMI), que ha crecido en torno a un 50% en los últimos cinco años, la cotización de los subsidios de un parado mayor de 52 años es mayor y «más decente» que la cotización de un trabajador.
«No puedes tener a un tío subsidiado cotizando más que a un tío que está trabajando. No es cierto que sea un recorte, es una forma de incentivar el trabajo», explican con indignación ante el «desconocimiento» de los morados. «No saben lo que están pidiendo. Antes tenían a Nacho Álvarez, que les explicaba las cosas y ahora no tienen a nadie». Una descapitalización de Podemos a nivel humano, a nivel técnico, y como auguran PSOE y Sumar, también a nivel electoral, a una velocidad que les lleva al borde de la extinción como partido.
