¿Por qué Junts y ERC amagan con admitir los votos de los fugados?
Los dos partidos entienden que al no haber un requerimiento expreso del Constitucional no hay delito de desobediencia
Carles Puigdemont. | Agencias
ERC y Junts per Catalunya estudian desacatar la sentencia del Tribunal Constitucional contra el voto telemático de Carles Puigdemont y Lluís Puig en la sesión constitutiva del Parlament de este lunes. Los dos partidos quieren controlar el órgano rector de la Cámara catalana con un pacto con la CUP, pero el hecho de que los dos diputados fugados no puedan votar les iguala en votos a PSC y PP. En caso de empate, la presidencia de la Mesa recaería en el candidato del grupo parlamentario más numeroso. Es decir, en el grupo socialista.
La Mesa de Edad está conformada por tres diputados, los dos más jóvenes y el de más edad .Una de las dos diputadas más jóvenes es de ERC (Mar Besses) y el presidente provisional de la mesa, por ser el mayor, es Agustí Colomines, de Junts. Esto hace que el órgano tenga mayoría independentista y ERC y Junts ya han apuntado que aceptarán el voto a distancia y/o delegado de los diputados fugados de la justicia española. En contra de lo que dijo la sentencia del Constitucional, que declaró nulos los acuerdos de la Mesa que habilitaron un sistema para que Lluís Puig pudiera votar a distancia.
Las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE de ambos partidos creen que ostentar la presidencia de la Mesa es clave para poder decidir quién se somete al pleno de investidura y ordenar los debates. El candidato de Junts, Carles Puigdemont, ya ha expresado su voluntad de someterse a la investidura pese a que Salvador Illa, líder del PSC, tiene más escaños que él. Como informó este periódico, su estrategia desde antes del 12-M pasaba por ser investido con mayoría simple.
La diputada más joven de ERC que estará en la Mesa de Edad, Mar Besses, dejó claro a través de sus redes sociales que «solo el pueblo de Cataluña tiene potestad de definir las mayorías del Parlament» y que es lo «que defenderán siempre». La otra parlamentaria más joven es Júlia Calvet, de Vox, que está en minoría.
«Diferencias procesales»
Las fuentes jurídicas consultadas por THE OBJECTIVE explican que hay «diferencias procesales que hay que tener en cuenta» con respecto a otras desobediencias durante los años del procés que fueron objeto de sentencia condenatoria. Al menos, hay ciertas «dudas» que ERC y Junts estarían contemplando para esquivar las consecuencias de una desobediencia. «A diferencia de la época del procés, no hay ninguna advertencia hecha por el Constitucional, ni existe un incidente de ejecución de sentencia», sostienen estas fuentes.
Con ello, de aceptar el voto delegado o telemático, ambos vetados por el TC, no se estaría desobedeciendo ninguna orden concreta, específica y/o personal de ninguna autoridad como exige el Código Penal, en relación al caso concreto que se plantea el lunes en el Parlament, sin perjuicio de una posible impugnación por nulidad que pueda presentarse. Otra cuestión es que tampoco se podrían solicitar reconsideraciones a otros órganos parlamentarios que en ese momento no estarán aún constituidos.
Baja médica de Wagensberg
Además de Puigdemont y Puig, el diputado de ERC Roger Wagensberg también se halla en Suiza, donde se instaló «de forma temporal» hasta que se aclare la causa de Tsunami Democràtic en la que está imputado. Sin embargo, al contar con una baja médica es uno de los supuestos en el que está permitido la delegación del voto.
En cambio, en el caso de Puigdemont y Puig, y aunque la Mesa de Edad validara su voto -ya sea de forma telemática o delegada-, el resto de grupos políticos podrían llevarlo ante el Constitucional y pedir medidas cautelares. De ser así, el tribunal de garantías declararía nulo el acuerdo de la Mesa sobre dicho voto e incluso podría comprometer la elección del nuevo órgano rector del Parlament.
