PSC, Junts y ERC pactan una reforma para que Puigdemont pueda votar a distancia
Cualquier modificación del reglamento requiere de mayoría absoluta, por lo que el apoyo de Illa era fundamental
El PSC, Junts, ERC, los comunes y la CUP han registrado este viernes una propuesta para reformar el reglamento del Parlamento catalán que, entre otras cuestiones, amplía los supuestos de delegación de voto para permitir que puedan acogerse a esta opción los diputados que residen en el extranjero, como ya adelantó THE OBJECTIVE. La reforma, que saldrá adelante porque las citadas cinco formaciones cuentan con la mayoría parlamentaria, permitirá en principio que puedan votar de forma delegada los parlamentarios de Junts Carles Puigdemont y Lluís Puig.
El pacto entre estas formaciones llega después de que el Tribunal Constitucional admitiera a trámite hace diez días el recurso del PP contra la decisión de la Mesa de Edad del Parlament de admitir el voto delegado de Puigdemont y Puig, lo que permitió elegir a los miembros de la Mesa y constituir la cámara catalana. Otros cambios previstos en este texto son que los grupos parlamentarios se conformen mediante el método que ya se usa en el Congreso de los Diputados y que las declaraciones institucionales salgan adelante solo mediante una mayoría cualificada de dos tercios.
El voto a distancia de Puigdemont y Puig es una de las primeras tareas a las que ha tenido que hacer frente el presidente de la Mesa del Parlament, Josep Rull, que ya afirmó al tomar el cargo que «priorizará con» emprender una reforma del reglamento para que los dos parlamentarios, huidos de la Justicia española, puedan votar de forma telemática. Después de que el Tribunal Constitucional haya admitido a trámite el recurso de amparo del PP contra la votación en la Mesa de Edad, en Junts buscaban una modificación que amplíe los supuestos en los que se puede delegar el voto, o votar a distancia, con el fin de poder contar con los sufragios de ambos diputados.
Es imprescindible tener mayoría absoluta
Según explicaron otras fuentes parlamentarias a este periódico, cualquier modificación del reglamento requiere «de mayoría absoluta» y «nadie está reparando en ello». El independentismo ha perdido por primera vez desde el inicio del procés la mayoría parlamentaria y con los Comunes no alcanzan el umbral de los 68 escaños. Para abordar esta reforma necesitaban contar, pues, con los de Salvador Illa, como así ha sucedido finalmente. El pacto ahora suscrito marca un cambio de posición en el PSC, pues fue precisamente este partido quien presentó un recurso de amparo ante el Constitucional contra el voto de Lluís Puig en la pasada legislatura.
Rull busca elaborar un texto lo suficientemente «ambiguo» para que se permita votar de forma telemática o delegada, más allá de los casos de baja médica o bajas de maternidad que ya permite el reglamento. «Buscan tener un margen de maniobra para aceptar estos votos, aunque posteriormente la justicia lo anule», adelantaron estas fuentes parlamentarias.