Díaz asume en solitario la negociación con Puigdemont y Junts para la jornada laboral
La vicepresidenta promete a los empresarios catalanes «compensaciones» para que levanten el veto a la reforma
Yolanda Díaz se reúne con Carles Puigdemont en septiembre de 2023 | Europa Press
Yolanda Díaz se ha puesto en contacto con Carles Puigdemont y su entorno de Junts per Catalunya para lograr su visto bueno a la reforma de la jornada laboral que pretende llevar al Congreso cuanto antes. La vicepresidenta segunda mantuvo un pulso con el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, que le pedía esperar y obtener el respaldo de todos los socios de investidura antes de abordar la reducción hasta las 37,5 horas semanales. Pero Díaz tiene prisa y ejerció toda la presión de la que dispone para aislar a Cuerpo y obtener el visto bueno de Pedro Sánchez. Para hacerlo, ha entrado en contacto directo tanto con Puigdemont como con empresarios catalanes que, de momento, siguen siendo críticos con la reforma. La comunicación con Puigdemont, según sostienen en Sumar, ha sido reiterada desde el pasado mes de diciembre.
Yolanda Díaz y otros miembros de Sumar se están centrando estos días en intentar resolver el embrollo de la reducción de la jornada laboral. De entrada, tienen que superar el veto del PNV y de Junts per Catalunya, muy sensibles a la presión de los empresarios catalanes y vascos contrarios a la medida. A finales del año pasado, el PNV manifestó su disposición a debatir la reducción de la jornada laboral, así que ahora los esfuerzos de Sumar se centran en Junts.
Según las fuentes consultadas, Sánchez pidió a Díaz llevar al Congreso su reforma solo después de obtener el sí de todos los socios de investidura. Los socialistas no querían que la medida fuera tumbada en el hemiciclo. Pero Díaz le recordó al presidente que, debido a la fragmentación parlamentaria, todas las medidas que se llevan pueden caer en el último minuto, y que el propio PSOE envía al Congreso sus propuestas sin tener amarrados los apoyos. «¿Por qué, entonces, se le debería pedir eso a la reforma de la jornada laboral?», esgrimen desde las filas de Sumar.
Compensaciones a las pymes
Finalmente, Sánchez ha decidido permitir a Díaz llevar al Consejo de Ministros su reforma y, de allí, elevarla al Congreso, aun sin tener seguros los apoyos. A cambio, según Sumar, los socialistas piden a Díaz encargarse en solitario de la negociación. Es decir, que dejan que lo intente, pero con el riesgo de asumir en primera persona el coste de un fracaso. Díaz, que afronta unas encuestas a la baja y necesita reforzar su liderazgo, habría aceptado ese todo o nada de Sánchez para intentar aprobar la reforma antes de que finalice el año.
Prueba de ello es que Yolanda Díaz, según Sumar, se ha puesto en contacto personalmente con Puigdemont y con los empresarios catalanes para que den su visto bueno a la reforma, y está hablando tanto con Foment, la patronal catalana, como con los representantes de las pequeñas y medianas empresas. Las fuentes consultadas sostienen que la vicepresidenta ofrece «compensaciones» a las pymes catalanas para que apoyen su iniciativa. De momento, tiene el respaldo firme de los sindicatos, y quiere llevar la cuestión al Congreso, aun sin tener todos los votos favorables de antemano.
Las conversaciones con Puigdemont, por otro lado, no avanzan demasiado. Las fuentes consultadas sostienen que Junts sigue guardando silencio y escurriendo el bulto. Pero eso puede también ser una señal de cierta apertura, puesto que, aseguran, Puigdemont está recibiendo muchas presiones por parte de empresarios catalanes para que vote en contra de la reducción de la jornada laboral. Aun así, las mencionadas fuentes muestran optimismo, e incluso aquellos sectores que hasta ahora manifestaban sus recelos por la estrategia de Díaz creen que si logra garantizar esas compensaciones a los empresarios catalanes, será más fácil obtener el apoyo de Junts.
