Un libro desvela que el arzobispo de Barcelona frenó el apoyo del Papa a España tras el 1-O
Según el periodista Antoni Puigverd, la Santa Sede contempló emitir un comunicado a favor de la unidad territorial

El cardenal Juan José Omella. | Europa Press
El expresidente de la Conferencia Episcopal Española y actual arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, frenó en el último momento que el Vaticano difundiera un comunicado a favor de la «unidad de España» tras el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017. Fue en un momento muy delicado, cuando el Gobierno de Carles Puigdemont congeló la declaración unilateral de independencia en busca de un «mediador» entre Cataluña y Madrid. Así al menos lo cuenta el periodista Antoni Puigverd en su nuevo libro Ocell de bosc (Ed. Libros de La Vanguardia). Su versión se complementa con lo que explicó el propio Puigdemont en sus memorias M’explico (Ed. La Campana), donde habla de Puigverd.
Antoni Puigverd, que durante muchos años fue amigo de Carles Puigdemont, explica que sabe lo que sucedió en el Vaticano en esos días en los que el procés se libraba en la esfera internacional. Según relata, el cardenal Omella, que tiene una gran amistad con el Papa Francisco, y que en esos días era arzobispo de Barcelona, visitó al Pontífice para explicarle «la situación que se vivía en Cataluña tras el 1 de octubre y le pidió si podía hacer de intermediario con el presidente Rajoy para favorecer una salida a la creciente tensión del momento». Bergoglio, prosigue en su libro, «respondió que no tenía ni idea de política española y que, por tanto, sería una temeridad meterse. Que se fiaba absolutamente del cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado (equivalente a ministro de Exteriores), que él sí que entendía».
«El Papa cogió el teléfono y dijo a Parolin que atendiera a Omella. ‘Lo que él haga, estará bien hecho’, dijo mientras se despedía. De inmediato, los dos cardenales se encontraron, y lo primero que dijo el italiano, antes incluso que el otro pudiera explicarle el motivo de su visita, fue esto: ‘Mire, Omella, justamente estaba a punto de firmar este documento sobre la situación española’», escribe Puigverd.
«Una defensa de la unidad de España»
El documento era «una defensa de la unidad de España». Y todo apunta a que Omella pudo «frenar» el documento. Además, Parolin no quiso saber nada de la petición de hacer de mensajero: «Dijo que el Vaticano no se metería en aquel embolado, también porque sabía perfectamente que incluso en Cataluña la cuestión de la independencia era polémica».

El autor de Ocell de bosc añade que el comunicado era «muy coherente» con la visión que Parolin y la inmensa mayoría de italianos tienen sobre la cuestión territorial en el interior de los estados. «Ni franceses ni italianos entienden la cuestión catalana». También explica que ha hablado con Omella para confirmar esta versión, y que el arzobispo «prefiere callar». Aunque añade que «es un hecho que Omella fue a Roma con este propósito. A su manera, intentó encontrar una solución».
‘Cancelado’ en Catalunya Ràdio
El periodista narra en su libro otros episodios de la situación política que atravesó Cataluña en los años del procés independentista. Por ejemplo, asegura que sufrió la «cancelación en el mundo audiovisual catalán». La activista Mònica Terribas decidió prescindir de él en las tertulias mañaneras de Catalunya Ràdio.
Puigverd siempre ha sido catalanista y aboga por una España «plurinacional», pero ni siquiera en los años más duros del plan rupturista del Govern simpatizó con el independentismo. De hecho, también explica cómo Puigdemont le invitó, junto a un grupo de periodistas, a un almuerzo en la Casa dels Canonges, la residencia oficial del presidente de la Generalitat, y fue el único en pedirle que no declarase la independencia para «evitar lo irreparable».
En ese almuerzo estaba Mònica Terribas, Antoni Bassas, Jordi Basté, Francesc-Marc Álvaro y Pilar Rahola. El resto de los comensales empujaron a Puigdemont a declarar la secesión.
«¡No lleves a la gente al matadero!»
Puigverd también explica distintos mensajes de WhatsApp que se intercambió con el entonces mandatario catalán. En uno de ellos, del mes de septiembre de 2017, le pidió a Puigdemont que desconvocara el referéndum: «No lleves a la gente al matadero».
El periodista ya le anticipa a Puigdemont las consecuencias de sus actos: «Piensa que, si no, sacrificaréis a mucha gente en vano (no serás solo tú) y la batalla posterior será para la amnistía o el indulto y para recuperar las competencias autonómicas».