El bloque progresista se hace con la cúpula del TC al copar la presidencia y la vicepresidencia
Este mecanismo se venía aplicando en los últimos años como una forma de lograr que las dos almas del tribunal tuvieran representación en la cúpula
El candidato favorito presidirá el Tribunal Constitucional. El jurista gallego Cándido Conde-Pumpido, de 72 años, se ha convertido este miércoles en el decimosegundo mandamás del órgano encargado de velar por la constitucionalidad de las leyes. Se ha impuesto en la votación a María Luisa Balaguer, que ha aspirado al puesto hasta el último momento con el aval del denominado sector conservador. La vicepresidenta recaerá en la también progresista Inmaculada Montalbán.
El Pleno ha comenzado a las 13.05 horas. La decisión de apostar por Conde-Pumpido ha sido fugaz. Ha salido elegido en primera votación por seis votos contra los cinco que ha cosechado Balaguer. La magistrada granadina Inmaculada Montalbán será la nueva vicepresidenta tras imponerse por los mismos votos al conservador Ricardo Enriquez.
De esa forma, el sector progresista copa la cúpula de la corte de garantías, como ya adelantó THE OBJECTIVE. Los siete magistrados del bloque progresista, ahora mayoritario, llegaban divididos al cónclave. A pesar de haberse reunido este martes fue imposible consensuar un único candidato. En el Pleno de este miércoles han competido Balaguer y Conde-Pumpido, que se ha hecho finalmente con el puesto gracias a lograr seis votos, presumiblemente todos los del sector progresista, excepto el de Balaguer.
Adiós al acuerdo tácito
Así, el sector progresista ha roto la norma no escrita por virtud de la cual la Presidencia correspondía al sector mayoritario y la Vicepresidencia, al minoritario. De hecho, el bloque conservador había postulado a Ricardo Enríquez, el magistrado de mayor antigüedad y edad, que ha logrado cinco votos.
Este mecanismo se venía aplicando en los últimos años como una forma de lograr que las dos almas del TC tuvieran representación en la cúpula del TC, pero no siempre ha sido así, ya que hay precedentes de tándem procedente del mismo bloque.
Fuentes de la corte de garantías ya advertían de que, si los magistrados conservadores no votaban al candidato que mayor consenso suscitaba en el sector progresista, incumpliendo así su parte del acuerdo tácito, la corriente mayoritaria se vería liberada del mismo.
Un tribunal progresista
Conde-Pumpido y Montalbán sustituirán a Pedro González-Trevijano y Juan Antonio Xiol, respectivamente, que abandonaron sus cargos el pasado lunes, junto a Antonio Narváez y Santiago Martínez-Vares, con la renovación parcial del TC, que estaba pendiente desde el pasado 12 de junio.
La entrada de los cuatro nuevos magistrados provocó un vuelco de la antigua mayoría conservadora –de seis magistrados frente a cinco– a una holgada progresista –de siete contra cuatro–.
De los cuatro nuevos magistrados, el exministro de Justicia Juan Carlos Campo y la ex alto cargo de Moncloa Laura Díez, propuestos por el Gobierno, han reemplazado a González-Trevijano y Narváez, nombrados en su día por el Ejecutivo de Mariano Rajoy.
Por su parte, María Luisa Segoviano, ex presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo (TS), y César Tolosa, hasta ahora presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TS, ambos propuestos por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), han dado el relevo a Xiol y Martínez-Vares, postulados también por el CGPJ.