Aldama dice que Ábalos cobró cuatro millones en comisiones y que una parte fue para el PSOE
El empresario entrega en el Supremo notas manuscritas de Koldo que demostrarían el supuesto amaño de los contratos
Entre 3,5 y cuatro millones de euros. Víctor de Aldama ha cifrado en esa cantidad las mordidas que recibió de las empresas beneficiadas por las adjudicaciones de obra pública. El empresario ha explicado este lunes en el Tribunal Supremo que una parte se la quedaba él, otra iba para José Luis Ábalos y su asesor y una tercera se destinaba al PSOE, aunque no ha precisado la cuantía ni ha aportado pruebas. El comisionista de la trama de mascarillas ha entregado pantallazos de Whatsapp y notas manuscritas de Koldo García que demostrarían el supuesto amañó de los contratos.
Aldama ha comparecido durante tres horas en el Supremo por el caso Koldo, después de que el Alto tribunal asumiera la investigación sobre Ábalos. El comisionista de la trama ha explicado que el exministro y su asesor le decían que «era dinero para el partido». Fuentes jurídicas consultadas por THE OBJECTIVE han insistido en que el empresario ha tratado de desmontar la tesis de antiguo secretario de Organización del PSOE, que el pasado jueves negó haber adjudicado obra pública a empresas amigas y cobrar contraprestaciones por ello.
El comisionista de la trama ha aportado al Supremo un pantallazo con notas manuscritas que le envió Koldo García que incluye adjudicaciones de obra pública con localizaciones y cifras concretas correspondientes a 2019. Esos amaños se habrían extendido los dos años siguientes, según precisan fuentes presentes en el interrogatorio. Aldama ha relatado que ese documento sería «una garantía» de que Ábalos iba a cumplir, tal y como le habría requerido a su asesor.
Aldama y las mascarillas
Las empresas que ha señalado Aldama serían Levantina, HCH, Azvi, OPR y Áridos. El comisionista ha insistido en que varias de ellas habrían pagado en especie y que, en ocasiones, él solo ejercía de enlace entre las sociedades y el Ministerio. El ministro de Transportes, Óscar Puente, y un informe de Adif han desmentido las acusaciones. El empresario también ha explicado que los 6.000 euros mensuales que habría pagado Sortis no obedece a ninguna asesoría, sino que era un pago encubierto de mordidas.
Aldama ha insistido en que esas comisiones eran independientes a las obtenidas por las de las mascarillas. Soluciones de Gestión, la empresa que representaba, consiguió adjudicaciones por valor de 54 millones de euros al inicio de la pandemia, la mitad de dos entes vinculados al Ministerio de Transportes: Adif y Puertos del Estado. El empresario ha asegurado ante el juez que departió directamente sobre licitaciones con sus máximos dirigentes, Isabel Pardo de Vera y Álvaro Sánchez Manzanares, que le pidió que «adecuasen la oferta».
El compareciente ha reconocido que podía precisar el montante de las mordidas que Ábalos habría obtenido por las mascarillas (unos 250.000 euros, precisó en la Audiencia Nacional), pero no por el resto. Quien se encargaba de entregarle el dinero era su asesor, que se cuidaba de sacar la conversación delante de su jefe. Aldama ha afirmado que entregó personalmente al exministro 170.000 euros en su piso de El Viso, donde vivió durante su etapa al frente de Transportes, y la sede del Ministerio.
Las mismas fuentes sostienen que Aldama ha ratificado las acusaciones que realizó el pasado 21 de noviembre ante la Audiencia Nacional, cuando afirmó que dio un sobre con 15.000 euros para el secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán y otros 25.000 para Carlos Moreno, jefe de Gabinete de María Jesús Montero. La ministra aseguró que ponía «la mano en el fuego» por su hombre de confianza, aunque hace una semana ya asumió encuentros entre ellos.
«En compañía de señoritas»
Los documentos que Aldama aportó al Supremo al principio de diciembre también afirmaban que alquilaba una vivienda en la madrileña calle de Atocha para «encuentros de diversa naturaleza» que habría utilizado el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres. Este lunes se ha reafirmado al asegurar que tanto este como Ábalos acudían al inmueble «en compañía de señoritas». El abogado del exministro ha intentado rebatirle sin éxito al tildar esas reuniones de políticas.
Tras su declaración, el Supremo ha acordado mantener medidas cautelares contra Aldama, al que se le retira el pasaporte y se le prohíbe salir de España. El empresario también tendrá que comparecer en sede judicial cada 15 días, aunque a partir de ahora tendrá que ser ante la Secretaría de la Sala de lo Penal del Alto tribunal. En un auto al que ha tenido acceso este diario, el magistrado Leopoldo Puente asegura que «persisten los indicios de criminalidad» y que es necesario reforzar las medidas tras las declaraciones prestadas.