La Guardia Civil constata irregularidades en el voto por correo a favor del PSOE
THE OBJECTIVE accede a uno de los sumarios en curso, relativo a las elecciones municipales en un pueblo de Sevilla

Una persona ejerce su derecho a voto en un colegio electoral. | Europa Press
La Guardia Civil avanza en el presunto amaño a favor del PSOE del voto por correo en las elecciones municipales de 2019 y 2023. THE OBJECTIVE ha tenido acceso a uno de los sumarios en curso, centrado en la localidad sevillana de Albaida del Aljarafe. Sin embargo, lejos de tratarse de un caso aislado en un pequeño municipio andaluz, los investigadores apuntan a «un patrón sistemático de actuación que podría haberse repetido en otros puntos de la geografía española», según fuentes consultadas por este periódico. Almería, Murcia, Tenerife, Melilla y Ciudad Real son algunos de los territorios donde también se han abierto diligencias por hechos similares.
Fuentes próximas a la investigación apuntan a que lo sucedido con la compra de votos en los últimos procesos electorales responde a un modus operandi organizado y extendido, supuestamente orquestado desde el aparato local de distintos núcleos del PSOE para adulterar el voto por correo mediante suplantación de identidad, coacción y compra de votos. En todos los casos se repiten elementos comunes: la utilización de trabajadores públicos o personas vinculadas al partido para captar votantes vulnerables, la promesa de favores laborales a cambio del sufragio y la manipulación de los trámites en las oficinas de Correos.
Albaida del Aljarafe: favores por votos
Uno de los casos mejor documentados por la investigación policial es el de Albaida de Aljarafe, en Sevilla. Los acercamientos y ofrecimientos para comprar votos entre vecinos del pueblo es una buena muestra de cómo operaba a nivel local esta red. Los investigadores ven muchas similitudes con lo sucedido en otras partes de España. THE OBJECTIVE ha podido acceder a la investigación: el informe de la Unidad Orgánica de Policía Judicial, adscrita a la Audiencia Provincial, recoge declaraciones comprometedoras.
En esas pesquisas, por ejemplo, se detectó que un trabajador del Ayuntamiento, vinculado al PSOE, ofreció a un ciudadano un contrato temporal a cambio de firmar la solicitud de voto postal. El funcionario se encargó de gestionar todo el proceso, incluidas las formalidades con su DNI, ejerciendo un voto que no le pertenecía. Otro caso documentado es el de una anciana que, ya fallecida, admitió que fue su hija quien votó en su nombre debido a su avanzada edad. Aunque aseguró que el voto fue «voluntario» y al partido de su preferencia, la Guardia Civil constató que no se cumplió el protocolo legal, que exige la comparecencia personal en la oficina de Correos y la exhibición del documento de identidad original. La anciana jamás se desplazó ni firmó autorización alguna.

Los agentes detallan que la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg) establece de forma tajante que la solicitud de voto postal debe formularse personalmente ante un empleado de Correos, quien ha de comprobar la identidad del solicitante mediante DNI original. No se admiten copias ni intermediarios, salvo con poderes notariales. Sin embargo, en Albaida del Aljarafe se han detectado múltiples casos donde estos trámites fueron obviados.
Una denuncia destapó la trama
El origen de la investigación radica en una denuncia presentada ante la Fiscalía de Sevilla por el coordinador local de Izquierda Unida. En ella se detalla cómo «determinados cargos y militantes del PSOE urdieron una red para captar votos a cambio de contratos municipales». El relato apunta a una organización jerarquizada con roles definidos: desde quien accedía al censo electoral hasta quien presionaba por teléfono a los votantes o introducía las papeletas manipuladas en el sistema postal.
Según la denuncia, la concejal socialista A.C.L. seleccionaba a posibles beneficiarios de empleos públicos, susceptibles de ceder su voto. El marido de la teniente de alcalde, B.D.A., realizaba llamadas para exigir el voto a cambio de contratos, y un empleado de Correos, A.G.D., era quien transportaba físicamente las solicitudes y votos para evitar que los votantes tuvieran que presentarse. En total, más de un centenar de personas habrían entregado sus documentos de identidad para que terceros tramitaran el voto en su nombre. En muchos casos, las firmas fueron presuntamente falsificadas.
El Juzgado de Instrucción número 3 de Sanlúcar la Mayor abrió diligencias contra varios implicados por delitos de fraude electoral, falsedad documental, suplantación de identidad, prevaricación y pertenencia a organización criminal en 2019. Una causa que seis años después sigue abierta y con nuevas pesquisas.
Un patrón que se extiende por España
El caso sevillano no es una excepción. Aunque esta fue de las primeras investigaciones por fraude electoral en el voto por correo, en los comicios de 2023 estalló un escándalo por distintas zonas de la geografía española. En Mojácar, Almería, la Fiscalía investiga a un grupo de militantes del PSOE por utilizar un patrón similar de captación de votos entre inmigrantes en situación irregular. En Murcia, el juez ha procesado a la candidata del PSOE en Albudeite y a otros 13 investigados por presuntos delitos de pertenencia a organización criminal y delito electoral.
En Melilla, continúa en curso la investigación abierta en 2023 en la que se detuvo a diez personas, entre ellos, el exconsejero de Distritos, Juventud y Participación Ciudadana, Mohamed Ahmed Al-lal (Coalición por Melilla), ante la sospecha de un intento de fraude electoral tras haberse casi triplicado las solicitudes de voto por correo desde las 4.200 registradas en 2019 hasta más de 11.700 para las elecciones del 28M.
En La Gomera, la Justicia abrió en 2023 una investigación sobre supuestas irregularidades en la tramitación del voto por correo. Al parecer, inmediatamente después de tramitar el voto por correo, se presentaban en los domicilios de los vecinos integrantes de la Agrupación Socialista Gomera para explicarles su programa electoral y robarles mediante manipulación y engaño el voto por correo que habían solicitado fraudulentamente. Antes de eso, habían hecho una tarea previa, desde ordenadores del propio Cabildo de La Gomera, solicitando la documentación suplantando la identidad de los gomeros. El Cabildo está gobernado desde 1991 por Casimiro Curbelo, primero con el PSOE y luego con el partido que fundó en 2015, Agrupación Socialista Gomera (ASG).
En Arona, Tenerife, el Juzgado de Primera Instancia Número 2 abrió diligencias previas para esclarecer un supuesto caso de delito electoral por la presunta compra de votos del PSOE en la localidad a raíz de la denuncia presentada este jueves ante la Policía Nacional por representantes de Coalición Canaria, Partido Popular y Más por Arona. Pero, al cierre de esta información, se desconoce si esta causa continúa abierta o se archivó.
En Pozuelo de Calatrava, Ciudad Real, también se abrió una causa en 2023 por la presunta compra de votos por 120 euros para el partido socialista. Un vecino de la localidad informó de que había sido sobornado y coaccionado a cambio de dinero con cantidades que oscilaban entre los 50 y los 120 euros a cambio de tramitar su voto por correo. Según la denuncia, las coacciones habían sido llevadas a efecto en su propio domicilio, por familiares del candidato del PSOE. La Policía Nacional apreció que dada la condición vulnerable y los escasos medios económicos de los que dispone, accedió a la petición de Félix y José Manuel (hermanos del candidato socialista, David Triguero) para dar su voto al PSOE. En este caso al candidato del PSOE de Pozuelo de Calatrava, David Triguero. Sin embargo, no ha trascendido información sobre el desarrollo de esta causa.