Recurren ante la Audiencia el nombramiento del marido de Teresa Ribera en la CNMV
Hay Derecho presenta la demanda después de que el Supremo reconociera su legitimación para impugnar la elección

Mariano Bacigalupo, marido de Teresa Ribera. | CNMV
Hay Derecho ha recurrido el nombramiento del marido de Teresa Ribera en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Fuentes jurídicas explican a THE OBJECTIVE que la fundación ha presentado una demanda ante la Audiencia Nacional después de que el Tribunal Supremo reconociera su legitimación activa, revocando así la decisión inicial. La organización que preside Segismundo Álvarez considera que Mariano Bacigalupo no reúne los requisitos para ser vocal del organismo público encargado de supervisar y regular los mercados de valores. El Gobierno le designó en septiembre de 2022, cuando su esposa ejercía como vicepresidenta.
La Audiencia Nacional deberá ahora analizar si el nombramiento del marido de Ribera, actual vicepresidenta y responsable de Competencia en la Comisión Europea, cumple los requisitos legales exigidos. Hay Derecho solicita su anulación y la imposición de costas a la Administración.
La fundación ya recurrió el nombramiento del marido de Ribera en noviembre de 2022, pero entonces la Audiencia Nacional denegó su petición al considerar que carecía de legitimación activa. Bacigalupo acababa de cesar en su cargo como consejero de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y saltó de inmediato a la CNMV al ser considerado como una persona «de reconocida competencia en materias relacionadas con el mercado de valores». Hay Derecho alegó falta de idoneidad.
Ribera y Calviño
El portazo de la Audiencia Nacional llevó a la fundación a interponer un recurso de casación ante el Supremo, que le dio la razón el pasado julio. Hay Derecho también denunció entonces la existencia de un conflicto de intereses, dada la relación matrimonial del nuevo vocal de la CNMV con la entonces ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera. También reprochó que el nombramiento partiera de la entonces ministra de Economía, Nadia Calviño, compañera de su esposa.
Con el salvoconducto del Supremo, Hay Derecho acaba de presentar una demanda a la Audiencia Nacional, que está obligada a entrar en el fondo del asunto. Elisa de la Nuez, secretaria general de la fundación, explica que el juzgado tendrá que evaluar si el nombramiento cumplía los requisitos legales. En su opinión, un salto entre reguladores sin acreditar la competencia exigida por la ley del Mercado de Valores demanda que los consejeros electivos de la CNMV sean personas de reconocida competencia. Sin embargo, en su opinión, el currículo del marido de Ribera no acredita experiencia ni formación en el sector.
Bacigalupo es doctor en Derecho, profesor titular de universidad y cuenta con una amplia experiencia en organismos públicos de regulación en los ámbitos energético, digital y de transportes. Fue presidente del Grupo de Reguladores Postales Europeos (ERGP) y, desde 2017, consejero de la CNMC. Además, ha sido vicepresidente de la Asociación Iberoamericana de Entidades Reguladoras de la Energía (Ariae) y, desde 2021, miembro del Consejo de Reguladores de la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía de la UE (ACER).
De la Nuez explica que «para ser consejero se necesita ser un experto reconocido en el ámbito del mercado de valores, y el señor Bacigalupo no solo no tiene en [su] currículum nada que avale eso, sino que viene de ser consejero de la CNMC, un organismo regulador diferente con funciones muy distintas». Para la secretaria general de Hay Derecho, ese salto sin transición ni acreditación técnica supone un incumplimiento claro del requisito legal.
Falta de mérito y capacidad
«Es difícil cumplir los requisitos legales de las dos a la vez. Si cumples los de uno y te has dedicado a eso […] no puede ser que, sin solución de continuidad, de un día para otro pase a un organismo que requiere unos requisitos legales diferentes y tiene funciones diferentes», recalca De la Nuez. Para Hay Derecho, este ejemplo ilustra un patrón recurrente en el sector público, tanto estatal como autonómico: la falta de mérito y capacidad en los nombramientos públicos. La diferencia radica en que, en este caso, sí existen requisitos legales concretos que no se han respetado.
La demanda expone que el expediente administrativo del nombramiento del marido de Ribera está vacío de contenido sustantivo y no incluye ningún tipo de información, ni siquiera el currículum del candidato, «lo que refuerza la ausencia de motivación y el carácter arbitrario del acto». Hay Derecho ya logró que el Supremo anulara el nombramiento de Magdalena Valerio como presidenta del Consejo de Estado en noviembre de 2023. Ahora recuerda que este tipo de designaciones erosionan la independencia de los organismos reguladores y dañan la confianza en las instituciones «cuando se hacen al margen de la ley».
«El contexto es que el mandato del señor Bacigalupo en la CNMC estaba próximo a finalizar y, en lugar de terminarlo, se produjo un cese anticipado que permitió su nombramiento inmediato en otro organismo regulador por cuatro años más», señala De la Nuez. En su opinión, «la vinculación personal del designado con una miembro del Gobierno (la entonces vicepresidenta Teresa Ribera) y que perteneciera al mismo Consejo de Ministros que la persona que lo designó forman parte del contexto en el que se produce este nombramiento».
La directora general de Hay Derecho, Safira Cantos, agrega que «no se trata de personas, sino de instituciones: los organismos reguladores deben estar dirigidos por expertos independientes que cumplan con los requisitos establecidos en la normativa, y no que sean nombrados por afinidades políticas o personales». Y añade: «Con estas acciones de litigación estratégica rigurosa, reafirmamos nuestro compromiso con la defensa del Estado de derecho, la integridad institucional y el respeto a los principios de mérito y capacidad en los nombramientos públicos».
