«Hace ocho años, en un frío día de noviembre, os saludamos en los escalones de la Casa Blanca. Vimos la luz y la cautela en vuestros ojos mientras mirabais vuestro nuevo hogar», comienzan diciendo las mellizas de 35 años. «En ocho años, habéis hecho mucho. Habéis visto mucho», añaden. Las hijas de Bush recuerdan que han visto crecer a las hijas de Obama y puntualizan: «Ahora estáis a punto de uniros a otro club atípico, el de los ex Primeros Niños».
Malia Obama, de 18 años, está disfrutando de un año sabático antes de entrar el próximo año en la Universidad de Harvard. A su hermana menor Sasha, de 15, le quedan un par de años de secundaria por delante, razón por la cual los Obama han optado por quedarse en Washington después de que Barack Obama deje la presidencia de EEUU el próximo día 20 de enero. Entre los consejos que han recibido de las mellizas Bush, se incluye «disfrutar de la Universidad». “Como la mayoría del mundo sabe, nosotras lo hicimos», añaden en broma, una clara alusión a las noticias de los medios publicando pequeños escándalos por consumo de alcohol mientras eran estudiantes. «Explorad vuestras pasiones. Cometed errores, estáis autorizadas a hacerlo” y, lo que es más importante, «mantened a vuestros amigos de verdad, los que realmente os conocen, os adoran y os protegen».
Jenna y Barbara Bush crecieron en Texas y se graduaron en 2000, el año en que su padre fue elegido presidente. Bush estuvo ochos años en la Casa Blanca y le sucedió Obama en 2008. Barbara ahora es abogada y vive en Nueva York, mientras que Jenna es periodista, trabaja para una television, está casada y es madre de dos niñas pequeñas.