Durante las últimas semanas las provincias septentrionales de Corea del Norte se han visto fuertemente azotadas por un temporal de fuertes lluvias. En la ciudad de Changjon se han registrado 70 mm de lluvia durante los últimos cinco días, mientras que en Sinpo, 80 mm. Sin embargo, las precipitaciones más fuertes han tenido lugar en Wonsan, donde se ha acumulado 165 mm en cuatro días, cuando la media de todo el mes de septiembre es de 178 mm, según datos de 2015. El departamento meteorológico de Corea del Norte ha informado que se trata del desastre natural «más devastador desde 1945». Soldados han sido llamados para ayudar a los civiles en las operaciones de rescate.
Mientras tanto, Kim Jong-un se dedica a preparar su sexta prueba nuclear, según ha advertido el Gobierno de Corea del Sur. El pasado viernes 9 de septiembre, Pyongyang llevó a cabo su quinto ensayo nuclear y el más potente llevado a cabo hasta el momento, dando lugar a un terremoto de magnitud 5,3.