Duras críticas del secretario general de la ONU a los populismos y extremismos
Guterres no mencionó a ningún país o jefe de gobierno, pero criticó a quienes atacan a las minorías, a los musulmanes o a la comunidad LGTB. «El desprecio de los derechos humanos es una enfermedad, una enfermedad que se propaga por todas partes, en el norte, el sur, el este y el oeste. Una enfermedad que el Consejo de Derechos Humanos debe contribuir a erradicar», añadió. En una velada alusión al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al que en ningún momento mencionó, instó a los miembros del consejo a «resistir con la mayor firmeza ante quienes desean restablecer la tortura», un «acto cobarde que no permite obtener informaciones utilizables y que deshonra al país que la practica», informa AFP.
El Alto Comisionado de los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, también aprovechó su intervención después de Guterres para lanzar un contundente mensaje «a los actores políticos que amenazan el sistema multilateral o tienen la intención de retirarse parcialmente» del sistema. Un mensaje que coincide con un momento de incertidumbre sobre el orden internacional tras la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca y sus declaraciones a favor del proteccionismo y de levantar muros físicos o imaginarios, actitudes ante las que Zeid dijo que «no permaneceremos sentados». El alto comisionado se refirió también a los «derechos de los refugiados y de los migrantes» denunciando que «son gravemente cuestionados». «Frente a la multitud de personas que huyen de la guerra, la comunidad internacional no debe sustraerse a sus responsabilidades», subrayó.