Cómo "apagar" el esperma: así funciona el anticonceptivo del futuro
O bien una barrera protectora para ellos o bien píldoras con demoledores efectos secundarios para ellas. Ya era hora de innovar, y por fin llegan noticias augurando un futuro prometedor: un nuevo descubrimiento podría darle la vuelta a estas cifras al ofrecer un método tanto para hombres como para mujeres, científicamente fiable y tan cómodo como imperceptible.
Impedir que los espermatozoides lleguen al óvulo para evitar la fecundación. Este es el objetivo de todo método anticonceptivo y aunque las opciones para conseguirlo son cada vez más variadas y fiables, lo cierto es que en pleno siglo XXI el condón sigue siendo el rey. Según cifras del Ministerio de Sanidad, Igualdad y Servicios Sociales, un 28,4% de los españoles utiliza el preservativo como principal método anticonceptivo, seguido por el 24,7% de los que no utilizan absolutamente ningún contraceptivo y el 21,7% de mujeres que toman la píldora.
En definitiva, tratándose de relaciones sexuales, la evolución desde que los griegos y romanos inventaron el preservativo al cubrir el pene con pieles y materiales orgánicos, resulta algo decepcionante. O bien una barrera protectora para ellos o bien píldoras con demoledores efectos secundarios para ellas. Ya era hora de innovar, y por fin llegan noticias augurando un futuro prometedor, un nuevo descubrimiento podría darle la vuelta a estas cifras al ofrecer un método tanto para hombres como para mujeres, científicamente fiable y tan cómodo como imperceptible.
¿En qué se basa el nuevo método del botón?
La explicación científica se encuentra en un artículo publicado en la revista especializada Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) en el que las científicas Nadja Mannowetz, Melissa R. Miller, y Polina V. Lishko explican la importancia de un componente que actuaría como botón de «encendido» y «apagado» del esperma.
En una explicación simplista, para tener éxito en su misión, los espermatozoides tienen que ser buenos en dos cosas: la natación y la perforación. La mayor parte de métodos, incluidos los preservativos, están pensados para frenar la primera de las cualidades (impedir que los espermatozoides «naden» hasta su destino), pero, ¿qué hay de la segunda parte? El esperma humano tiene que nadar entre 10 y 12 centímetros hasta llegar al óvulo, lo que viene a significar 24.000 veces su propia longitud, y tras el recorrido, convertirse en «taladro» con el que perforar la capa que cubre los óvulos.
En lugar de golpear de lado a lado como hacen durante su camino a través de las trompas de falopio, el espermatozoide empieza entonces a girar en una sola dirección, sacudiendo la cabeza hacia delante, a través del denso y viscoso entorno de las capas externas del óvulo. Los científicos llaman a esta maniobra el «golpe de poder«. La energía para producir este golpe proviene de iones de calcio, proveniente de un componente llamado CatSper que no está en ninguna otra parte de nuestro cuerpo. Encuentra algo que impida que estos «interruptores» de iones se enciendan, y estarás un paso más cerca de tener el anticonceptivo más eficaz del mundo. Es, precisamente, lo que acaban de hacer estas científicas.
En el artículo publicado en PNAS, las investigadores de la Universidad de California en Berkeley examinaron más de 50 compuestos químicos para encontrar unos cuantos que podrían evitar que los espermatozoides se movieran para realizar la perforación y los dos más prometedores provienen de plantas que los seres humanos han estado consumiendo durante milenios: lupeol, un compuesto que se encuentra en mangos, uvas y aceitunas, y pristimerin, que proviene de una antigua hierba medicinal conocida como Thunder God Vine.
Las científicas que han dado con esta clave explicaban en la revista Wired, que el descubrimiento puede convertirse en un anticonceptivo útil tanto para «emergencias» como de uso regular y que el uso de estas sustancias es «diez veces más efectivo que cualquier otro método» e impide que la fertilización del óvulo llegue a realizarse, con lo que incluso aquellos que creen que la vida empieza en la fertilización, no podrían tachar de abortista al método.
Los ensayos en primates para dar con las dosis adecuadas ya han comenzado, y las científicas esperan alcanzar resultados a finales de este año. Según sus cálculos, este nuevo método podría empezar a comercializarse en los próximos tres años, convirtiéndose así en el más eficaz anticonceptivo universal al alcance de todos.