Origami contra el coronavirus: cómo la papiroflexia puede ayudarte en el confinamiento
¿Encerrado en casa y sin saber que hacer? el origami –papiroflexia– es una gran opción para ayudarte a pasar el confinamiento que vive España desde que se decretó el estado de alarma por la pandemia de coronavirus. Esta técnica japonesa, apta tanto para adultos como para niños, se presenta como una herramienta para la evasión sin necesidad de salir del salón de casa.
¿Encerrado en casa y sin saber que hacer? El origami –papiroflexia– es una gran opción para ayudarte a pasar el confinamiento que vive España desde que se decretó el estado de alarma por la pandemia de coronavirus[contexto id=»460724″]. Esta técnica japonesa, apta tanto para adultos como para niños, se presenta como una herramienta para la evasión sin necesidad de salir del salón de casa.
La papiroflexia no solo te mantendrá ocupado durante la cuarentena, también es ideal para potenciar factores como la creatividad, la concentración y la destreza manual. Y encima es barata: basta con tener papel a mano –puedes utilizar papeles de envoltorios o que ya han sido usados antes para darles un segundo uso–.
Una de las figuras más conocidas y con una simbología muy fuerte es la grulla. ¿Conoces su historia?
Cuenta una leyenda japonesa, que si deseas algo con mucha fuerza y construyes 1.000 grullas de papel, los dioses te concederán ese deseo que tanto anhelas. Sadako Sasaki tenía dos años cuando Estados Unidos lanzó la bomba atómica en la ciudad en la que vivía, Hiroshima, el 6 de agosto de 1945. Diez años más tarde -cuando tenía 12 años-, como consecuencia de la irradiación que le produjo la bomba de Hiroshima, los médicos le diagnosticaron leucemia.
Cuando la pequeña Sadako estaba en el hospital realizando el tratamiento, su amiga Chizucho le explicó la historia de las 1.000 grullas de papel y Sadako se puso manos a la obra. Nunca lo consiguió. Murió habiendo realizado 644 grullas de papel
Simbólicamente, sus amigos continuaron su misión y completaron las 1.000 grullas, con la esperanza de que se evitaran las guerras en el futuro y se consiguiera la paz entre todos los países del mundo. Tres años más tarde de la muerte de Sadako, los niños y niñas de toda la ciudad de Hiroshima le dedicaron una estatua de ella con una grulla en su mano que hoy puede verse en el Parque de la Paz de Hiroshima.
Desde entonces, regalar grullas de papel se ha asociado con el hecho de querer desear salud, bienestar, felicidad y prosperidad.
Desde The Objective, te ofrecemos ocho sencillas plantillas para que te pongas manos a la obra y puedas hacer tus propias figuras de origami. La primera, sin duda, no podía ser otra que la famosa grulla. Os proponemos el reto de llegar a las 1.000 grullas contra el coronavirus. Nosotros, ya tenemos la nuestra.
La grulla
Cara de oso
Loro
Vaso
Jirafa
Barco
Cangrejo
Caja
