Lil Tay, la 'influencer' que ha desafiado las normas con 9 años
Con solo 9 años Lil Tay se convirtió en el nuevo fenómeno viral: 2 millones de seguidores en Instagram y 200.000 suscriptores en YouTube la avalaban. Ahora, Lil Tay ya no cuenta con esos canales porque se los han cerrado. Antes de entrar en el porqué de ese cierre, entremos a explicar quién es Lil Tay y por qué ha logrado tal apoyo en las redes.
Con solo 9 años Lil Tay se convirtió en el nuevo fenómeno viral: 2 millones de seguidores en Instagram y 200.000 suscriptores en YouTube la avalaban. Ahora, Lil Tay ya no cuenta con esos canales porque se los han cerrado. Antes de entrar en el porqué de ese cierre, entremos a explicar quién es Lil Tay y por qué ha logrado tal apoyo en las redes.
Lil Tay es canadiense, pertenece a la Generación Z y se ha hecho famosa, básicamente, haciendo un muy discutido humor. Detrás del negocio –que es en lo que se ha convertido su pretendida influencia en las redes– están su hermano mayor Jason Tian, de 16 años, y su madre, Angela Tian, que ha sido la encargada de embolsarse una buena cantidad de dinero a costa de su hija.
Los vídeos de Lil Tay eran especialmente polémicos al mostrar una faceta nada adecuada para una niña de su edad: desde lanzar fajos de billetes al aire hasta atacar a patadas un Rolls Royce, pasando por fumar y otras actividades como conducir coches de lujo.
El cerebro detrás de la controvertida de Lil era su hermano, Jason, quien ha admitido que la percepción que se ha adquirido sobre su hermana puede que no sea la más correcta y que tanto él como su hermana necesitan un lavado de imagen. “¿No os preocupéis!”, tuiteaba en su cuenta Jason tras el escándalo del cierre de las cuentas de su hermana en diferentes redes. “Mi hermana y yo vamos a cambiar toda nuestra imagen para mejor. Volveremos más fuertes que nunca”, añadió.
Don’t worry! Me and my sister and going to change up our whole image for the better! We boutta come back stronger then ever
— Jason Tian (@icyrycie) 3 de junio de 2018
Si bien Jason trata de hacer propia la decisión de cerrar las cuentas de su cada vez más seguida hermana, lo cierto es que los rumores apuntan a que se las han cerrado de manera forzada. Uno de los motivos podría estar sustentado sobre la norma que establece la edad mínima para utilizar esas redes. Instagram, por ejemplo, tiene por norma el que sus usuarios tienen que tener más de 13 años para abrirse una cuenta, condición con la que Lil Tay no cumple. Aunque dichas cuentas ya no existan, por la red proliferan contenidos de la pequeña en cuentas de terceros.
La niña publicaba sobre todo imágenes y vídeos de su extravagante estilo de vida en los que abundaban los productos de lujo, especialmente coches y casas increíbles. Más tarde se conoció que su madre, que trabajaba en una inmobiliaria de lujo, fue despedida ya que su jefe vio que Lil Tay había usado su coche de empresa en uno de sus vídeos, y que utilizaban algunas de las casas con las que ella trabajaba en su faceta de agente inmobiliaria. La vida de lujo de Lil Tay era una farsa, por lo que no sería de extrañar que las explicaciones de su hermano sobre la misteriosa desaparición lo fueran también.
La polémica Lil Tay ha servido para poner sobre la mesa, una vez más, la discutida presencia de menores en las redes sociales. Su personaje es tan extremo que los apoyos y las críticas se han dividido por completo: o estás a favor, o estás en contra. Lil Tay ha desafiado las normas y nadie queda indiferente.
