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Proyecto Edén: Programa de acogida para perros de personas fallecidas

El vínculo afectivo que se desarrolla entre un perro y su humano es de los más fuertes que existen. De hecho, hay estudios que aseguran que se parece mucho al que existe entre un bebé y su madre. Si has tenido la suerte de compartir la vida con uno de estos animales, sabes que no hay nada de exagerado en esta afirmación. Un perro es un miembro más de la familia. La sola idea de que un día pueda faltarte, te rompe el alma. Un dolor inmenso que solo supera el miedo y la incertidumbre de pensar qué sería de él si faltaras tú. ¿Encontraría una nueva familia? ¿Pasaría sus últimos años en una protectora? Para tranquilidad de todos, nace Proyecto Edén.

Proyecto Edén: Programa de acogida para perros de personas fallecidas

El vínculo afectivo que se desarrolla entre un perro y su humano es de los más fuertes que existen. De hecho, hay estudios que aseguran que se parece mucho al que existe entre un bebé y su madre. Si has tenido la suerte de compartir la vida con uno de estos animales, sabes que no hay nada de exagerado en esta afirmación. Un perro es un miembro más de la familia. La sola idea de que un día pueda faltarte, te rompe el alma. Un dolor inmenso que solo supera el miedo y la incertidumbre de pensar qué sería de él si faltaras tú. ¿Encontraría una nueva familia? ¿Pasaría sus últimos años en una protectora? Para tranquilidad de todos, nace Proyecto Edén.

El Refugio es una organización sin ánimo de lucro que desde 1996 ayuda a perros y gatos maltratados y/o abandonados de todo el país. Cuenta con un centro de acogida, ubicado en El Espinar, Segovia y un centro veterinario, en Madrid, que se encuentra abierto a todo el público y destina sus ingresos íntegramente al cuidado de los animales abandonados. Además, defienden el sacrificio cero y durante todo el año realizan importantes campañas de divulgación, concienciación y denuncia. Una labor clave para combatir el abandono que, por desgracia, sigue siendo el principal problema de los animales de compañía en España. Ahora, la protectora da un paso más y presenta Proyecto Edén, un programa para acoger a los perros de personas que fallezcan en España.

Imposible no emocionarse con el vídeo promocional del proyecto: 

El objetivo del proyecto es brindar, a quienes se inscriban, la tranquilidad de saber que cuando fallezcan, El Refugio “se hará cargo de acoger, cuidar y querer a su perro, así como de buscarle una familia que lo adopte, para que nunca le falte el amor y protección que merece”. Porque como bien dicen en el vídeo: la vida no es eterna, pero el amor sí. ¡Qué gran verdad! Y qué duro pensar que la administración pública no tiene contemplado ningún tipo de protocolo de actuación oficial para estos casos. Falta mucho por conseguir todavía en lo que a los derechos de los animales se refiere.

¿Cómo comenzó el proyecto?

Detrás de cada proyecto hay siempre una historia interesante. El caso de Proyecto Edén no es una excepción. Hace un año llegó al centro veterinario de El Refugio, en Madrid, Don Gregorio acompañado por su perro Zeus. Padecía una larga enfermedad y sabía que el final estaba cerca. Como explican los responsables del proyecto: “Gregorio tenía que enfrentarse a ese momento de la vida en el que ya no caben los miedos, lamentos, ni vacilaciones; tan solo el valor y la determinación para tomar las decisiones que permitan que aquellos que dependen de ti, no sufran consecuencias negativas por tu partida”. Necesitaba que alguien le diera a Zeus un hogar cuando él ya no estuviera y acudió a El Refugio para pedir ayuda. Pocos días después de publicar el caso, una joven llamada Irene decidió adoptar al pequeño Zeus. “Gracias a ella, Gregorio pudo marchar en paz”, aseguran. Zeus cuenta ahora con la estabilidad y el amor que se merece.

Proyecto Edén: La vida no es eterna, pero el amor sí
Foto: Irene, Zeus y Nacho | El Refugio.

¿Quieres formar parte?

Para poder formar parte del proyecto, la persona debe ser mayor de edad, tener la nacionalidad española y residir en la Península, para los casos de Canarias y Baleares, es necesario alcanzar algún tipo de acuerdo previo para el traslado del perro. De momento, se puede inscribir un máximo de dos perros por persona y, como es lógico, deben tener la cartilla sanitaria al día y estar debidamente identificados con microchip a nombre de la persona que se sume al proyecto. Finalmente, como requisito legal, es imprescindible legar en testamento notarial la propiedad del perro a la protectora El Refugio. “Actualmente, no existe otra fórmula legal que nos permita garantizar la custodia del animal”, explican los responsables del proyecto. 

Una vez formalizada la inscripción, El Refugio se hace cargo del cuidado del animal y se compromete a buscarle una familia adoptiva “que garantice su felicidad, en caso de fallecimiento del titular”. Un compromiso que la protectora adquiere de forma gratuita. Como ayuda extra, para responder cualquier duda, El Refugio pone a disposición de los interesados el asesoramiento gratuito de su gabinete jurídico. “Así como sabemos que en El Refugio jamás podremos acoger a todos los perros que se abandonan en España, también sabemos que nos resultará imposible acoger a todos los perros de las personas que fallezcan; pero hemos pensado que sí podemos aportar nuestro granito de arena para ayudar al mayor número de perritos y personas, que nos sea posible”, reflexiona Nacho Paunero, presidente de El Refugio.

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