Así se hacen helados caseros, saludables y que parecen artesanales
Este alimento es una de las mujeres opciones para combatir las altas temperaturas del verano
Tarrinas de helado de mango | Pexels
Con la llegada de las altas temperaturas, el helado pasa a ser uno de los mejores amigos para combatir el calor. Como en verano no siempre apetece salir a la calle, sino que el plan predilecto suele ser quedarse en casa con el ventilador o en la piscina, hacer esta comida casera es una opción que permite comer fresquito sin necesidad de salir.
Esto también permite hacerlos más saludables y con los ingredientes al gusto. Frutas como el plátano, la fresa o el melocotón (que además están de temporada) u otros alimentos como chocolate, yogurt o frutos secos. Las posibles combinaciones son numerosas. Además, no hace falta tener una heladera para poder hacer estas recetas. Solo serán necesarios moldes para helado, un procesador de alimentos y un congelador donde poder almacenarlos.
A la hora de encontrar recetas, Instagram es una de las grandes fuentes de ideas. Hay de todos los tipos, formas y sabores, pero esta es una selección de algunas de las recetas disponibles en esta red social.
Polos de frutas
Una modalidad muy saludable y fácil son los polos de frutas. Aquí solo hará falta cortar en trocitos la variedad elegida, o variedades, en caso de querer combinar varias, y meterlas en el molde. Luego se añade agua de coco, zumo u otro líquido similar y solo hay que esperar a que el congelador los deje listos.
Helados de yogur y frutas
Una variante de los anteriores es elegir la fruta que más apetezca (fresas, plátano, frambuesas, mango…) y un yogur griego natural, que no tenga azúcar añadido. Es posible complementarlo con chocolate, cacao desgrasado, frutos secos, crema de cacahuete o coco rallado, por ejemplo. Para endulzarlo, una opción es sustituir el azúcar por pasta de dátiles, por ejemplo, que es más saludable. En cuanto a las cantidades de cada ingrediente, en general van al gusto y según apetezca a cada persona, no hay ninguna fórmula a seguir.
Una buena opción para probarlos es mezclando un plátano, un puñado de fresas y un yogur griego natural. Sólo hay que mezclar todos los ingredientes en un vaso, batirlos y rellenar los moldes con la mezcla. Después queda guardarlos en el congelador y esperar unas cuatro horas hasta que estén listos.
Helados tipo Magnum
Las recetas anteriores es posible adornarlas con una cobertura de chocolate para convertirlos en unos tipo Magnum, unos de los helados más conocidos. Para ello hay que derretir unas cuatro onzas de chocolate (el tipo es un poco al gusto, aunque el de 85% de cacao es de los más recomendados) en el microondas durante un minuto con una cucharada de aceite de coco.
Esta cobertura es para echarla a los polos al ir a comerlos, justo después de sacarlos del congelador. El frío hará que el chocolate derretido con el aceite de coco se solidifique hasta obtener la textura deseada. Además, a esto es posible añadirle más cosas como frutos secos partidos o coco rallado.
Helado con requesón
Saliendo de los polos, un helado de copa es un tipo rápido de hacer y que tampoco tiene mucha dificultad. Para esta receta hace falta requesón, chocolate 85% y aceite de coco. Los pasos a seguir son:
- Meter el requesón en un bol y dejarlo en el congelador entre 10 y 15 minutos, sin que llegue a congelarse.
- Derretir dos onzas de chocolate con una chucharadita de aceite de coco en el microondas.
- Sacar el bol de requesón de la nevera y verter el chocolate derretido hasta que este se solidifique.
- Mezclarlo todo y ya está listo para disfrutarlo.
Helado de chocolate
Otra opción de copa fácil y rápida es la de helado de chocolate. Para ella son necesarios dos plátanos cortados en rodajas y congelados, dos cucharadas de mantequilla de cacahuete y dos cucharadas de cacao en polvo. Hay que mezclar todos los ingredientes en una batidora y comerlo al momento.
