Qué son las tartas «wildflower» y por qué son las favoritas de los novios
Estas tartas representan una fusión perfecta entre arte y sabor ofreciendo algo más que un simple postre a los novios
El mundo de la repostería, cada año trae nuevas tendencias que terminan por imperar en las mesas de los banquetes de boda. Este año, la mayoría de las tartas nupciales compartirán un denominador común, la decoración floral silvestre. Es la moda de las llamadas «tartas wildflower» y es que la mayoría de las parejas que se van casar durante los próximos meses terminarán escogiendo una de estas tartas para que adorne su mesa. Estas tartas no solo son un deleite para el paladar, sino que también representan un espectáculo visual impresionante. ¿Qué hace que estas tartas sean tan especiales y por qué han ganado tanta popularidad entre las parejas que planean su boda? Vamos a descubrirlo.
La esencia de las tartas wildflower
Las «tartas wildflower» se caracterizan por estar decoradas con flores silvestres comestibles. Estas flores no solo aportan un toque estético natural y elegante, sino que también añaden sabores y texturas interesantes a la tarta. Las flores más comunes utilizadas en estas creaciones incluyen pensamientos, capuchinas, rosas, violetas y caléndulas, todas ellas seleccionadas cuidadosamente por sus intensos colores y ser aptas para el consumo humano.
La decoración con flores silvestres permite a los pasteleros crear diseños únicos y personalizados, lo que da como resultado las preciosas «tartas wildflower». Estas tartas son temáticas y personalizadas, puesto que los novios pueden elegir no solo el sabor del bizcocho de su tarta de flores silvestres, sino que también, queda a elección de los mismos, el color del pastel, de modo de que cada «tarta wildflower» puede ser adaptada para reflejar los colores y la temática de la boda, proporcionando un nivel de personalización que pocas otras decoraciones pueden igualar.
Naturalidad y sostenibilidad
En una época donde la sostenibilidad y lo orgánico están ganando terreno, las «tartas wildflower» se alinean perfectamente con estos factores. Las flores utilizadas suelen ser cultivadas de manera orgánica y local, lo que minimiza el impacto ambiental y apoya a los agricultores locales. Además, al ser flores comestibles, no se utilizan productos químicos ni pesticidas en su cultivo, lo que las hace seguras tanto para los consumidores como para el medio ambiente.
Esta conexión con la naturaleza y el enfoque en la sostenibilidad va acorde con la filosofía de las parejas modernas, quienes buscan que su boda refleje sus valores y preocupaciones. Así, elegir una «tarta wildflower» o tarta de flores silvestres no solo es una decisión estética, sino también ética.
La experiencia de comer flores
Más allá de su ornamentación, las «tartas wildflower» o de flores silvestres ofrecen una experiencia multisensorial. Las flores comestibles aportan aromas delicados y sabores sutiles que maridan con el resto de los ingredientes tradicionales de la tarta. Por ejemplo, las violetas pueden añadir un toque ligeramente dulce y floral, mientras que las capuchinas aportan un sabor picante y fresco.
La combinación de estos elementos crea un perfil de sabor complejo y delicioso que sorprende y deleita a los invitados. Esta dimensión extra de sabor es una de las razones por las que estas tartas se han convertido en una elección tan popular para bodas y otros eventos especiales.
Fotografía perfecta
En la era de Instagram y las redes sociales, las fotos juegan un papel crucial en la planificación de una boda. Las «tartas wildflower» con su belleza natural y su diseño cuidado, son increíblemente fotogénicas. La combinación de colores vivos y la disposición artística de las flores crea imágenes que capturan la atención y se comparten ampliamente en redes sociales.
Para los novios, tener una tarta que no solo sabe bien sino que también se ve espectacular en las fotos es un doble triunfo. Las imágenes de estas tartas adornadas con flores silvestres se convierten en recuerdos duraderos de un día especial, llenando álbumes de fotos y perfiles de redes sociales con su encanto natural.
Versatilidad en el diseño
Otra ventaja de las «tartas wildflower» es su versatilidad. Pueden adaptarse a una variedad de estilos y temáticas de la boda, desde bodas rústicas en exteriores hasta ceremonias elegantes en interiores. La capacidad de personalizar la selección y disposición de las flores permite que estas tartas encajen perfectamente en cualquier ambiente.
Además, las «tartas wildflower» pueden diseñarse en diferentes tamaños y formas, ya que existe una gran variedad de flores de distintos tamaños en la naturaleza, lo que las hace adecuadas tanto para bodas íntimas con pocos invitados como para grandes celebraciones. Los pasteleros pueden trabajar con los novios para crear una tarta que se ajuste a sus necesidades y deseos específicos, garantizando que cada detalle sea perfecto.